sábado, 26 de marzo de 2011

El entrenamiento del cerebro podría ayudar a los niños con síndrome de Tourette

Investigadores de la Universidad de Nottingham, en Reino Unido, aseguran que el uso de terapias conductuales en niños con síndrome de Tourette puede resultar eficaz para reducir sus síntomas, según los resultados de un estudio que publica esta semana la revista 'Current Biology'.

   El síndrome de Tourette es un trastorno neurológico que, en Reino Unido, afecta a más de 300.000 personas y, generalmente, se caracteriza por la aparición de tics sonoros, parpadeos y repetición de algunas palabras.
   Generalmente, suele ser diagnosticado en edad infantil, alrededor de los 6 y 7 años, cuando comienzan a aparecer estos tics que, en la mitad de los casos, continúan hasta edad adulta.
   El cerebro de estos niños, según han comprobado estos expertos tras analizar diferentes pruebas de imagen de su cerebro y compararlas con niños sin este trastorno, se desarrolla de una única forma "reorganizando" su estructura durante la adolescencia.
   "Estudios previos habían demostrado que algunos de estos niños pueden controlar sus síntomas, lo que podría estar relacionado con una especie de cambio compensatorio en el cerebro para adaptarse a estos tics, como se ha comprobado", reconoce Stephen Jackson, profesor de Neurociencia Cognitiva de la Facultad de Psicología y uno de los autores del estudio.
   Por ello, según apuntan, si se estimula la "formación" del cerebro mediante el uso de la terapia conductual podrían ayudar a estos pacientes a controlar sus síntomas de una forma más rápida y eficaz.
   Además, esto supondría una alternativa a los tratamientos farmacológicos que deben utilizar estos pacientes, que pueden tener efectos secundarios no deseados como el aumento de peso y depresión.

Punset advierte de la capacidad de la gente de ser infeliz

LÉRIDA.- El economista, ex ministro y divulgador científico Eduard Punset ha recetado ser capaz de cambiar de opinión como vía para combatir la crisis.  En el I Congreso de Inteligencia Emocional en las Organizaciones, que pretende enmarcar la inteligencia emocional en las organizaciones uniendo esfuerzos de los mundos académico y empresarial, ha recordado su experiencia personal en la banca cuando regresó a España, en 1973.
 
   "En tiempos de crisis los directivos de la banca lo que hacían era encerrarse en sí mismos y decir que no era el momento de hablar de cambios. Se ha tardado, pero ahora se sabe que esto es un error", ha asegurado.
   Para él, la crisis obliga precisamente a mucho más al exterior y "probar nuevos campos", ha dicho durante su conferencia en el congreso, organizado por la Universitat de Lleida (UdL) y el Centro Europeo de Empresas e Innovación de Lleida (Ceei).
   Punset ha advertido de la capacidad de la gente de ser infeliz, lo que atribuye a "lo que llaman los neurólogos la disonancia, la negativa congénita a cambiar de opinión, ya no digamos de partido".
   "Otra razón de infelicidad del colectivo es lo que Richard Dawkins llamaba el código de los muertos", que define como las abstenciones en relaciones personales que algunas personas se imponen en aras de un determinado pasado; por ejemplo, las referencias a cómo decían los abuelos que debían hacerse las cosas, como cuando la abuela advertía contra la relación sentimental con una determinada persona.
   Según Punset, pese a la globalización hay gente que pierde oportunidades de encuentros muy fructíferos por culpa de este código, ha aseverado.

El cambio de hora afecta más a las personas mayores que toman ansiolíticos

El cambio de hora, que se producirá este sábado (a las 2 de la mañana serán las 3), afecta más a las personas mayores que toman ansiolíticos y/o antidepresivos, según recuerda el neurólogo de USP San Camilo, Antonio Yusta Izquierdo.

   De todos modos, la situación es "transitoria" y lo normal es que a los diez días se haya superado, en caso contrario Yusta Izquierdo recomienda acudir a consulta.

   Asimismo, entre los consejos que ofrece este especialista para lograr una mejor adaptación se encuentra no alterar el ritmo circadiano o biológico y mantener fijas las horas de descanso nocturno y de actividad, tal y como se venía realizando.

   Además, es conveniente asegurar una buena hidratación (beber entre 2 y 3 litros de agua al día) y evitar la toma de estimulantes como el té o el café en horas, sobre todo, a última hora de la tarde. 

   Se deben evitar también siestas prolongadas de más de 30 minutos y se de procurar realizar actividades que requieran más concentración en las horas en las que se esté más despejado.

   Por su parte, las personas que tienen migraña han de seguir las recomendaciones para tratar esta patología porque los episodios se pueden intensificar durante el periodo de adaptación al cambio de hora.

La depilación por láser es definitiva

A día de hoy, se puede decir que la depilación láser es definitiva tras más de diez años de experiencia. Así de contundente se ha mostrado la vocal de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), la doctora María Teresa Gutiérrez, quien ha apuntado que sólo se conseguirá empleando un láser "adecuado", es decir, "con suficiente energía para la destrucción de los folículos pilosos".
   Asimismo, ha explicado que un resultado óptimo se consigue en pieles "sin dependencia hormonal", entendiendo como tal "la aparición de vello en la mujer en zonas propias del varón", ya que, en este caso, "el crecimiento del pelo es gradual en el transcurso de los años y, por tanto, su destrucción es gradual".
   La doctora Gutiérrez ha detallado que la piel idónea para someterse a un tratamiento de depilación láser es "una piel clara con vello oscuro" y ha afirmado que "hay que saber rechazar a aquellos pacientes en los que no va a resultar efectiva la depilación láser".
   Además, ha insistido en que "la energía que se usa en el láser no puede ser tan alta como para no dañar la piel ni tampoco como para destruir el bulbo piloso". A su juicio, en España suele haber un prototipo alto por lo que "hay que estudiar a cada paciente antes de empezar a depilarle" y asegurarse, por tanto, "de que su piel y su vello se pueden tratar".
   La depilación láser consiste en destruir el bulbo piloso, es decir, la raíz, para que no vuelva a salir y conseguir "a la larga" una depilación definitiva. Según la experta, ésta es la ventaja principal de someterse a este tratamiento, aunque ha advertido de algunos inconvenientes. En concreto, ha apuntado que hay que acudir a centros cuyos láseres dispongan de "suficiente energía" para destruir la raíz, un proceso que tardaría "entre cinco y ocho sesiones", mientras que sería "complicado" obtener un buen resultado con "láseres no médicos".
   En este sentido, diferencia entre la depilación láser y la fotodepilación (luz pulsada), afirmando en que ésta última tiene resultados inferiores. Preguntada sobre los láseresz depilatorios de uso domiciliario, la doctora ha apuntado que "no sustituyen a los sistencias tradicionales en cuanto a eficacia y seguridad" y tampoco hay "estudios suficientes que los avalen".
   Respecto a los tipos de láser que existen, la experta ha recomendado el láser de diodo y de alejandrita. "Tienen una eficacia similar aunque el que tiene una mejor relación entre radiación y absorción es el alejandrita", ha puntualizado. Respecto al láser soprano, vendido en su día como "perfecto para pieles oscuras o bronceadas", ha explicado que "son necesarias muchas pasadas para un resultado relativo". Asimismo, ha recomendado la depilación láser para aquellas pieles que padezcan de foliculitis (pelos enquistados bajo la piel).
   Por último, la doctora Gutiérrez ha indicado que los cuidados de prevención hay que tenerlos "antes" del tratamiento y se ha centrado en la importancia de no someterse a él con una piel bronceada, ya que, según ha apuntado, "la depilación láser se basa en la absorción por la melanina" y ha concluido afirmando que para pieles bronceadas "no existe ningún láser".

EEUU autoriza un medicamento para tratar los melanomas avanzados

La agencia estadounidense de control de medicamentos (FDA) autorizó la comercialización del Yervoy (ipilimumab), del laboratorio Bristol Myers Squibb, el primer tratamiento que prolonga la vida de enfermos con melanoma avanzado, según un comunicado. 

"Yervoy es la primera terapia aprobada por la FDA que claramente mostró que prolonga la vida de enfermos que sufren melanoma metastásico", dijo Richard Pazdur, director de la oficina de evaluación de tratamientos anticancerosos de la FDA.
El melanoma, un cáncer de piel, es una de las formas de cáncer más fatales. Su incidencia es la que ha tenido más aumento de entre todas las formas de tumor en los últimos treinta años.
El estudio clínico de fase 3 entre 649 pacientes en varios países mostró que los tratados con Yervoy sobrevivieron diez meses después del diagnóstico, contra los seis meses y medio que sobrevivieron los enfermos que recibieron una vacuna experimental anticancerosa, es decir, una ganancia de vida de más del 50%.
El ipilimumab es un anticuerpo monoclonal administrado vía intrevenosa, generalemente bien tolerado. A diferencia de la mayoría de los tratamientos contra las células cancerígenas, este anticuerpo pertenece a un nuevo tipo de medicamentos que activan las células T (timocitos), una categoría de linfocitos que juegan un papel clave en la respuesta inmunitaria celular.
Según la OMS, el cáncer de piel es responsable de 66.000 muertes en el mundo cada año, el 80% a causa de melanomas. Más de la mitad de los pacientes tiene menos de 59 años.
En Estados Unidos, fueron diagnosticados 68.130 nuevos casos de melanoma en 2010 y murieron 8.700 personas, según el Insituto Nacional del cáncer estadounidense.