miércoles, 8 de junio de 2011

Descubren una mutación genética que inhibe la proliferación celular en el cáncer de tiroides


Investigadores de la Clínica Mayo en Rochester (Estados Unidos) han detectado que una mutación genética que se pensaba que aceleraba el crecimiento tumoral en los pacientes afectados de cáncer de tiroides hace en realidad lo contrario, inhibiendo la propagación de las células malignas.

   Así se desprende de un estudio presentado en el marco del Congreso de la Sociedad Americana de Endocrinología que se celebra en Boston, que de confirmarse en posteriores estudios podría abrir la puerta a nuevos tratamientos para esta enfermedad.
   "No se trata de un oncogén como todo el mundo creía", según reconoce el doctor Honey Reddi, autor del estudio que ha demostrado que la proteína de fusión PAX8/PPARy, desarrollada a partir de la mutación de un gen de fusión presente en la mayoría de carcinomas tiroideos foliculares, funciona como un tumor supresor mediante la estimulación (activando la producción natural) del microRNA-122 y el PTEN, dos agentes antitumorales que se generan de forma natural.
   Según explica este exterto, dicha proteína de fusión es el resultado de la traslocación de material genético entre los cromosomas humanos 2 y 3.
   Estudios anteriores 'in vitro' de la proteína PAX8/PPARy apuntaban a una rápida aceleración del crecimiento celular, lo que hizo que los investigadores llegaran a la falsa conclusión de que funcionaba como un oncogén.
   Sin embargo, estudios con animales han mostrado posteriormente que in vivo de Mayo Clinic realizados con animales sugieren que el PAX8/PPARy estimula la famosa proteína anticancerígena PTEN, así como la microRNA-122, y que probablemente activa otras moléculas anticancerosas.
   Según el doctor Reddi, el PAX8/PPARy no fomenta la progresión del tumor cuando está expuesta a células cancerosas. "En realidad, lo que hace es activar otras moléculas anticancerosas de origen natural, impidiendo la propagación del tumor".
   "Los tumores de los ratones que están expuestos al gen PAX8/PPARy crecen de un modo casi cuatro veces más lento que los de aquellos que han sido privados de las propiedades anticancerígenas de la proteína.
   De cara a futuras investigaciones, uno de los objetivos del equipo es la identificación de otros marcadores como el microRNA, lo que permitiría identificar una enfermedad benigna y evitar la necesidad de someter a  los pacientes a una operación quirúrgica inmediata innecesaria.
   Tras haberlo debatido con otros médicos de la Clínica Mayo, Reddi afirma que "existen muchas complicaciones en las operaciones de tiroides y la detección precoz de marcadores podría evitar miles de operaciones innecesarias cada año".
   "Estamos solo al principio, pero nuestro objetivo es trasladar estos resultados del laboratorio a la práctica lo antes posible", concluye.

Demuestran el efecto antitumoral del selenio frente a la leucemia

Una investigación desarrollada en la Universidad de Navarra por el graduado en Química Daniel Plano ha demostrado el efecto antitumoral de nuevos compuestos que contienen un átomo de selenio, un elemento químico que se encuentra en alimentos como el brócoli, las nueces de brasil, los champiñones o el marisco.

   El trabajo del químico navarro partió de 72 compuestos sintetizados, de los cuales eligieron los ocho con mayor acción y capacidad selectiva frente a cinco tipos de cáncer 'in vitro'. "En particular, estos compuestos mostraron su acción en líneas celulares de leucemia, cáncer de próstata y cáncer de mama", explica el científico en un comunicado remitido por la Universidad de Navarra.
   Asimismo, el investigador, que ha obtenido el Premio Extraordinario de Doctorado de la Facultad de Ciencias, añade que muchos de los compuestos sintetizados "han demostrado resultados muy prometedores contra la 'leishmaniasis', una enfermedad causada por diferentes protozoos y que se transmite por la picadura de los insectos jejenes".
   Respecto a la actividad antitumoral del selenio, el químico de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Navarra recuerda el estudio realizado por investigadores del Centro del Cáncer de la Universidad de Arizona (EEUU).
   En este centro llevaron a cabo un análisis que comenzó en 1983 con 1.312 personas divididas en dos grupos. Mientras el primero recibió 200 microgramos de selenio diarios, suplementados como levadura, el resto tomó un placebo. Los resultados confirmaron que el grupo tratado con selenio desarrolló casi un 66 por ciento menos de cáncer de próstata, un 50 por ciento menos de cáncer colorrectal y de pulmón, y cerca de un 40 por ciento menos de pulmón, comparados con el grupo control, según ha explicado el especialista.
   Además, el mismo ensayo ratificó que los sujetos que habían tomado el suplemento de selenio experimentaban una reducción a la mitad en las muertes totales por cáncer.
   Por otra parte, el experto recuerda que el estudio de la Universidad de Arizona, y otros muchos trabajos, "confirman la influencia de los suelos con niveles elevados de selenio, y del consumo de alimentos que lo contienen, en una menor incidencia de varios tipos de cáncer".
   En este sentido, aunque no se cuente con un registro sobre la distribución geográfica de este elemento en los suelos, Daniel Plano aclara que su presencia se puede aumentar mediante abonos que lo contengan.
   Su trabajo ha dado lugar a colaboraciones con varios grupos de centros internacionales y se ha materializado en 12 publicaciones en revistas científicas de prestigio.

Investigadores relacionan la psoriasis más grave a la presencia de un gen

Investigadores del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona (Barcelona), del Banco de Sangre y Tejidos y del Hospital Clínic de Barcelona han logrado descubrir que las personas que padecen los casos más graves de psoriasis tienen también una sobreexpresión del gen CCL4L. 

   El estudio ha logrado asociar así determinadas características genéticas con la gravedad de esta enfermedad, lo que puede contribuir a predecir qué pacientes sufrirán una variante peor de esta dolencia, y abre la puerta a la búsqueda de tratamientos cada vez más personalizados.
   La psoriasis es una enfermedad crónica de la piel que, por una anomalía en el proceso de renovación celular causa descamación, inflamación, envejecimiento, picor y dolor.
   Se calcula que afecta a entre un 2% y un 3% de la población, y en la modalidad más grave aparece antes de los 30 años en un área más extensa de piel afectada y, en ocasiones, asociada a otras enfermedades autoinmunes como la diabetes y la artritis, además de infecciones como el virus de la hepatitis C.
   La investigación ha sido publicada el 'Journal of Investigative Dermatology', y demuestra por primera vez que una mayor presencia del gen CCL4L en el ADN implica una mayor presencia de la proteína quimiocina CCL4L en la sangre --que forma parte del sistema inmunitario del cuerpo humano y actúa regulando infecciones y procesos inflamatorios--.
   La investigación ha contado con la subvención de la farmacéutica Merck-Serono, además de las entidades públicas Fundación para la Investigación y Prevención del Sida en España y el Instituto de Salud Carlos III.

El uso de opioides en España para el tratamiento del dolor se ha multiplicado por 20 desde 1992

Desde 1992, la utilización de opioides en España para el tratamiento del dolor se ha multiplicado por 20, según ha informado la Sociedad Española del Dolor (SED), que aclara que, no obstante, el país sigue ocupando aún el noveno puesto en el ránking europeo, lejos de países como Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Suiza, Islandia y Holanda. A nivel mundial, España ocupa el undécimo puesto.

   Este miércoles arrancó en Tenerife la reunión científica anual de la SED, que hasta el próximo viernes reúne a más de 500 expertos en Puerto de la Cruz y servirá para examinar la controversia generada alrededor del uso de los opioides en el tratamiento del dolor.
   El doctor José Luis Rodríguez, presidente del Comité Organizador de la XI reunión anual de la Sociedad Española del Dolor y XII Forum del Dolor de las Islas Atlánticas, explica en un comunicado que el aumento en el consumo de analgésicos opioides puede considerarse como "positivo, ya que demuestra que se ha ido venciendo el temor a su uso desde el punto de vista médico y de los pacientes".
   "Los analgésicos opioides son una valiosa herramienta para el tratamiento del dolor crónico intenso y, por tanto, tenemos que disponer de ellos en nuestro arsenal terapéutico", señala Manuel Alberto Camba, presidente de la SED.
   Sin embargo, también añade que siempre se tienen que valorar las características personales y los riesgos que comporta la mala utilización de estos fármacos. "Debemos tener el convencimiento de que hemos agotado el resto de nuestras posibilidades de tratamiento, entre ellas obviamente el empleo de las técnicas mínimamente invasivas que existen en nuestra cartera de servicios y que pueden en muchos casos evitar su uso o bien hacer que los empleemos como coadyuvantes", concluye.
   En este sentido, el doctor Rodríguez añade que "tenemos que decir que el uso de estos medicamentos debe ser muy controlado por los médicos que los prescriben para que realmente sean útiles y se evite el mal uso y los efectos indeseables, ello es especialmente importante en el tratamiento del dolor crónico no oncológico".
   En estas jornadas, se llevará a cabo una revisión global de estos medicamentos y se analizarán aspectos como la importancia de su relación coste/eficacia, las posibilidades del uso de los diferentes tipos disponibles en el mercado farmacéutico para el dolor crónico y la evaluación de sus efectos secundarios.
   Los medicamentos opioides actúan sobre todo a nivel del sistema nervioso central (SNC) produciendo analgesia y evitando el dolor. Se pueden administrar por distintas vías (oral, sublingual, intravenosa, transdérmica, etc.) y se caracterizan por ser los fármacos más potentes en cuanto a analgesia.
   Este miércoles el encuentro arrancó con la celebración del Curso Precongreso para Medicina Familiar y Comunitaria, en el que en varias mesas de trabajo eminentemente prácticas se expondrán, para su discusión, casos clínicos de pacientes con dolor neuropático, oncológico y nociceptivo, y que son tratados con opioides en diferentes situaciones o con antiinflamatorios.
   De igual forma este jueves, en el XII Forum del Dolor de las Islas Atlánticas se tratarán todos aquellos asuntos relacionados con el dolor crónico y se hará especial hincapié en patologías como el dolor neuropático y orofacial y el análisis del tratamiento mediante técnicas de radiofrecuencia, neuroestimulación y mínimamente invasivas.
   Además, se desarrollarán una serie de talleres de trabajo y simposiums en los que, de forma práctica, se explorarán, entre otros aspectos relacionados con las patologías dolorosas, la migraña crónica, el manejo global del dolor oncológico, la optimización del tratamiento del dolor irruptivo mediante el uso de opioides y una revisión de los fármacos específicos para uso por la vía intratecal.

Inician un estudio para conocer los beneficios reales para la salud de algunos alimentos

El Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid ha firmado un convenio de colaboración con la empresa 2B Blackbio para iniciar el proyecto 'Henufood', con el que pretenden comprobar el efecto beneficioso de algunos alimentos para la salud y sus efectos reales en el organismo.

   Asimismo, también permitirá el desarrollo de nuevas herramientas de diagnóstico que ayudarán a mejorar la detección de los factores de riesgo de algunas enfermedades crónicas que pueden estar condicionadas por la alimentación, como la diabetes, así como detectar posibles alergias alimentarias.
   El investigador principal de este proyecto, el doctor Javier Martínez-Botas, ha explicado que, el desarrollo de marcadores de proteínas y péptidos para el estudio de alergias alimentarias y la generalización de estas técnicas, "podría evitar en el futuro la realización de tests cutáneos con alérgenos", lo que evitará muchas molestias a los pacientes e incluso ingresos hospitalarios para realizar las pruebas diagnósticas que "son bastante largas y complejas a día de hoy".
   "Podríamos acortar y simplificar muchísimo estas pruebas, lo que beneficiaría especialmente a los niños pequeños afectados por estas alergias alimentarias", añade.
   Por su parte, el presidente de 2b Blackbio, Pedro Franco de Sarabia, ha explicado que se trata de una iniciativa "pionera" en el campo de la nutrición que puede "llevarnos hacia una alimentación personalizada en el futuro en personas con factores de riesgo de enfermedades crónicas o con alergias a determinados alimentos".
   El proyecto parte de 'arrays' que contienen información de todo el genoma y que se van adaptando y concretando hasta conseguir 'microarrays', que estudian un grupo reducido de genes y proteínas de interés.
   Así, la investigación busca detectar, a partir de 'microarrays' como el cholestchip y el dietchip, aspectos concretos del metabolismo para descifrar si los componentes "saludables" que se añaden a los alimentos funcionales tienen algún efecto real en nuestra genética.
   Todo ello, mediante la identificación de marcadores genéticos, es decir, analizando aquellos genes cuya expresión cambia al consumir estos componentes saludables de los alimentos.
   "El desarrollo de herramientas para la generación de datos en estudios clínicos de alta calidad podría ser algún día la solución definitiva para las validaciones de alimentos funcionales" añade Pablo Castán, director científico de 2B Blackbio.
   Por el momento, los estudios en genes están centrados en detectar biomarcadores relacionados con el metabolismo del colesterol, uno de los principales factores de riesgo presente en las enfermedades de corazón.
   A la vez, este análisis ayudará a identificar nuevos componentes saludables, a descartar los que no lo son y puede desembocar en la aplicación de la tecnología de 'microarrays' para la detección de alergias alimentarias, principalmente a la leche y al huevo, a través del desarrollo de marcadores de proteínas y péptidos.
   "Actualmente, -añade Castán- estamos trabajando en el campo de la nutrigenómica y la nutriproteómica, desarrollando herramientas para predecir la evolución de alergias a determinados alimento un problema de importancia creciente en los niños menores de 5 años. La utilización de 'microarrays' es compatible con cuadros alérgicos debidos a diversas causas, lo que permitiría aplicar también esta solución a las alergias a medicamentos y alergias estacionales, entre otras".
   El proyecto, que dura 4 años, supone una inversión total de 23,6 millones de euros, 10,3 millones de los cuales están financiados por el programa CENIT, del Ministerio de Ciencia e Innovación con la cofinanciación del fondo tecnológico FEDER. Por parte de 2B Blackbio, el proyecto supone una inversión de más de 1,5 millones de euros.
   Además, esta alianza publico-privada cuenta con la participación de un total de 9 empresas y 11 centros de investigación en toda España.
   La empresas participantes en este proyecto de ámbito nacional pertenecen mayoritariamente al sector alimentario (Gallina Blanca Star, Biocentury SLU, Carinsa, Central Lechera Asturiana, GO Fruselva, Probelte Pharma, y Wild); una de ellas pertenece al sector biotecnológico (2B BlackBio) y una al sector de las tecnologías de la información (Ibermática).
   Por su parte, los hospitales y centros de investigación (OPI) que participan son el Hospital Universitario La Paz y el Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid; el Hospital Sant Pau y el Hospital Universitari Vall d'Hebron de Barcelona; el Instituto Catalán de Ciencias Cardiovasculares (ICCC); la Universidad Católica de Murcia (UCAM); la Universidad de Lleida; el Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA) de Valencia; el Instituto de Investigación en Nutrición y Seguridad Alimentaria de la Universidad de Barcelona (INSA-UB); el Hospital Universitario Dr. Peset de Valencia, y Barcelona Digital.