viernes, 20 de mayo de 2011

Tres alumnas de Harvard desarrollan un pan para celíacos

Tres alumnas de la estadounidense Harvard University, Michelle Lea, Jennifer Danielle y Erica Jil, están desarrollando junto a la Fundación Alicia un pan para celíacos que está en negociaciones para su comercialización, de la mano de chefs como Ferran Adrià, Joan Roca y Carme Ruscalleda.

   Se trata de las primeras estudiantes del curso 'Science&Cooking' premiadas con este intercambio por sus proyectos, impartido por ambas instituciones y el apoyo de Esade durante un trimestre, y que busca formar a profesionales en el ámbito interdisciplinar de la cocina y la ciencia.
   De hecho, estas alumnas, junto a Bethania Constanza --quien desarrolla un proyecto sobre los geles calientes--, estudian disciplinas tan diversas como matemáticas, economía y neurobiología, y buscan en este curso cruzar sus conocimientos con las propiedades de los alimentos y encontrar vías de colaboración e incluso de creación de nuevas patentes, como es el caso del caviar de aceite desarrollado entre ambas instituciones y que hoy comercializa una empresa.
   Ante el mal sabor de las pastas para celíacos, las alumnas premiadas han explicado que su objetivo es que estas personas puedan disfrutar de la comida, por lo que su receta de pan y bizcocho ya se usa en un restaurante de Boston y la Fundación Alicia está en negociaciones con una empresa interesada para firmar un convenio y "ciertos" acuerdos de colaboración, ha explicado en rueda de prensa, el responsable de investigación de la fundación, Pere Castells.
   Otros seis alumnos del curso aterrizarán en Barcelona en las próximas semanas para seguir investigando en estas líneas durante tres semanas, en el marco de un convenio con la universidad americana que se prolongará durante cinco años.
   Está previsto que los alumnos del próximo curso, ayudados por los chefs Joan Roca, Nando Joan, Carme Ruscalleda, Ferran Adrià, Wiley Dufresne y Dan Barber -- ahonden en los procesos culinarios, como la cocción a bajas temperaturas, los productos espesantes, las emulsiones científicas --como la mayonesa, el 'pil pil' y el romesco--, los productos que 'enmarronecen' --como el caramelizado--, espesantes volcánicos y "chocolateros".
   Creada en 2004, Alicia es una fundación de Caixa Manresa y la Generalitat de Cataluña, en la que participa 'El Bulli' de Ferran Adrià, que se dedica a la alimentación y la ciencia --tal y como indica su nombre ali-cia, y aborda todos los procesos relacionados, desde el sanitario, social y científico.

Los trastornos de la diferenciación sexual pueden afectar al 1% de la población

Hasta un 1 por ciento de la población podría verse afectado por un trastorno de diferenciación sexual, un término que engloba más de 25 enfermedades muy diferentes, que comparten una anomalía genética u hormonal en el desarrollo del aparato genital interno o externo, que hace que se produzca ambigüedad genital y, por tanto, sea difícil definir claramente el sexo al nacer.

   "Cada una es muy diferente de las demás, tanto en su manifestación como en el tratamiento, siendo el testículo feminizante, el hemafroditismo o la resistencia androgénica algunas de las más frecuentes", explica la profesora Isabel Esteva, del Servicio de Endocrinología del Hospital Carlos Haya de Málaga, quien afirma que "en dos de cada tres casos el trastorno se produce intraútero y se diagnostica al nacer".
   La doctora, que ha participado en el VIII Curso 'Fundamentos Moleculares de la Medicina', organizado recientemente por la Real Academia Nacional de Medicina (RANM) con la colaboración de la Fundación Lilly, explica que "el otro momento crucial en la detección de este tipo de trastornos es la adolescencia, ya que "entre un tercio y un cuarto de los casos se manifiesta a partir de la pubertad".
   En estos trastornos hay una gran cantidad de factores moleculares y identificados "y muchos otros aún por identificar", añade. Entre los casos más conocidos se encuentra la hiperplasia suprarrenal congénita virilizante, que sólo afecta a las mujeres, y en cuyo caso sí es posible la detección prenatal y "con tratamientos hormonales adecuados desde el embarazo se puede llegar a que esa niña no nazca con genitales virilizados", explica.
   Cuando se trata de anomalías morfológicas, hay ocasiones en que las ecografías de alta resolución durante el último trimestre de embarazo podrían detectar algún indicio, sin embargo, esta especialista advierte que "se debe extremar la prudencia en este sentido".
   Por otra parte, se estima que una tercera parte de las personas con trastornos de diferenciación sexual padece también trastornos de carácter adaptativo. Por ello, Esteva señala como "fundamental que la persona y la familia cuente con el apoyo de un equipo multidisciplinar de psicólogos, endocrinos, ginecólogos, urólogos, genetistas, cirujanos, psiquiatras, trabajadores sociales, pedagogos desde el momento del diagnóstico".
   Además, incide en la importancia de que la sociedad admita que "el concepto clásico binario ha cambiado. Siempre hablamos de femenino-masculino, hombre-mujer, pero la realidad es un amplio espectro en el que ni la feminidad ni la masculinidad son de una manera fija obligada. En la sociedad hay muchas personas andróginas que disfruta de cualidades de ambos sexos y lo vive sin angustia".

Expertos proponen crear un registro epidemiológico de leucemia mieloide crónica

El Grupo Español de Leucemia Mieloide Crónica, constituido por la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH), ha nacido con el objetivo de investigar este tipo de leucemia y los expertos que lo integran han solicitado la colaboración de la Administración para establecer registros epidemiológicos continuados que notifiquen cada caso de la enfermedad y conocer si existen determinadas circunstancias epidemiológicas que propicien la aparición de este proceso en el paciente.

   La leucemia mieloide crónica (LMC) es una enfermedad hematológica maligna provocada por la aparición del cromosoma filadelfia, un marcador genético no congénito (no hereditario), que origina que se sintetice una proteína anómala (Bcr-Abl) que, junto a otros factores concomitantes, provoca un aumento descontrolado de cierto tipo de glóbulos blancos.
   Por el momento se desconocen las causas que provocan la aparición de esta patología pero, desde el punto de vista farmacológico, se han producido "grandes" avances que permiten controlar la enfermedad mientras que los especialistas continúan estudiando nuevos tratamientos.
   Según el presidente del grupo y hematólogo del Hospital de La Princesa de Madrid, el doctor Steegmann, "el grupo lleva a cabo diversas investigaciones biológicas y una de sus tareas principales consiste en registrar los casos incidentes y prevalentes de este tipo de leucemia en España y realizar ensayos clínicos promovidos por investigadores independientes".
   "El objetivo fundamental desde el punto de vista de investigación del grupo es conseguir grandes ensayos nacionales que respondan a preguntas interesantes desde el punto de vista científico", ha explicado el doctor Steegmann. Para ello, el grupo ha presentado recientemente la Plataforma Española de Ensayos Clínicos (CAIBER), un proyecto de comparación de fármacos.
   Para este experto y su grupo, "el porvenir del tratamiento farmacológico no es cronificar la enfermedad, sino erradicarla y poder suspender el tratamiento sin temor a que el paciente sufra nuevas recaídas". Asimismo, ha destacado que en la actualidad, "la esperanza de vida de un paciente diagnosticado con leucemia mieloide crónica se cuenta en décadas mientras que hace una década se contaba en años".

Pautas imprescindibles para mejorar el pronóstico del asma

Los autocuidados y la educación del paciente son aspectos fundamentales para mejorar el pronóstico del asma ya que si el paciente se encuentra bien formado, su calidad de vida aumentará, disminuirá el riesgo de padecer exacerbaciones y se reducirán también los costes sanitarios. 

   Así quedó de manifiesto durante las II Jornadas de Enfermería organizadas por el Grupo de Asma de la Sociedad Valenciana de Neumología y acreditadas por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), celebradas en Valencia.
   La doctora Eva Martínez, coordinadora del Grupo de Asma de la Sociedad Valenciana de Neumología y neumóloga del Hospital de Sagunto, ha explicado que cuando a un paciente se le diagnostica asma se le debe dar información sobre la enfermedad, el uso correcto de los inhaladores, los factores desencadenantes, las medidas de prevención y los planes de autocuidado; y para todo ello, los médicos necesitan el apoyo de la enfermería.
   Esta especialista asegura que la enfermería participa de forma directa en la realización de los métodos objetivos que se emplean para diagnosticar la enfermedad: espirometría, pruebas de provocación, estudios inmunoalérgicos, monitorización del pico-flujo espiratorio y medición de marcadores inflamatorios en el aire exhalado o en esputo.
   Por tanto, señala, "la correcta interpretación de estas pruebas por parte del médico requiere una colaboración muy estrecha con enfermería para que el desarrollo técnico de cada uno de los procedimientos sea el adecuado; por eso estas jornadas de actualización son tan importantes".
   La educación en asma debe ser, por ello, "un trabajo coordinado entre médicos y enfermeros, porque aunque hay fármacos muy buenos para el asma, para que el paciente se beneficie de ellos y la enfermedad se controle, son necesarias estas intervenciones educativas", apunta.
   Asimismo, esta experta recuerda que en pocos centros sanitarios existen talleres de enfermería para proporcionar educación al paciente, tal y como se hace con otras enfermedades como la diabetes o la hipertensión. "Nuestro objetivo es intentar reducir esta carencia, tanto en centros de Atención Primaria como Atención Especializada", añade esta neumóloga.
   Actualizar los conocimientos sobre los cuidados de enfermería y la monitorización de los pacientes asmáticos fueron los principales temas que se abordaron durante las II Jornadas de Enfermería. Asimismo, se analizó el papel de la enfermería en los estudios diagnósticos del asma y se establecieron las bases de la educación en asma con el fin de controlar mejor los síntomas de la enfermedad. La jornada iba dirigida a aquellos profesionales de la salud que atienden a pacientes con asma, ya fueran médicos o enfermeros.

Las dietas enriquecidas con ácidos grasos saturados alteran el hígado

El profesor de la división de Ciencias Nutricionales de la Universidad de Nottingham (Reino Unido) Andrew Salter ha afirmado en Pamplona que "las dietas enriquecidas con ácidos grasos saturados alteran la expresión genética en el hígado".

   Andrew Salter ha inaugurado la I Semana de la Nutrición en la Universidad de Navarra con un taller sobre genética y obesidad. Según el especialista, dicha alteración podría ser la base de los efectos adversos de estos ácidos sobre el colesterol plasmático o colesterol en sangre.
   "Hace tiempo que sabemos que los ácidos grasos poliinsaturados tienen efectos potentes sobre la expresión génica. En particular, sobre las enzimas implicadas en la síntesis de ácidos grasos. Sin embargo, los estudios 'in vivo' que estamos realizando nos van a permitir conocer los mecanismos que producen estos cambios", ha afirmado.
   Respecto a la alimentación de la madre y la influencia que tendrá en la salud de su hijo, Andrew Salter ha aclarado que tanto la desnutrición -en particular ingerir pocas proteínas-, como la obesidad y el consumo excesivo de nutrientes, "pueden aumentar la susceptibilidad de los descendientes a sufrir una serie de enfermedades crónicas, como la obesidad, la diabetes o las enfermedades cardiovasculares".
   En este sentido, el especialista ha confirmado que están empezando a conocerse los mecanismos subyacentes en estos efectos. "Los cambios en la estructura química del AND -estudiados por la Epigenética- podrían permitirnos diseñar intervenciones dietéticas capaces de revertir este tipo de programación genética, para evitar que suframos las enfermedades a las que parecemos estar destinados", ha explicado.
   Por otro lado, el experto, invitado a esta I Semana de la Nutrición de la Universidad de Navarra, ha hecho hincapié en el trabajo que desarrolla con su equipo para alterar los ácidos grasos en alimentos como carne y leche.
   "Cuando descubramos cómo modificar la composición de esos ácidos grasos -aclara Salter- podríamos evitar los efectos dañinos de ciertos alimentos en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. No estaríamos hablando de obtener nuevos alimentos enriquecidos con principios activos, sino de mejorar los alimentos habituales para evitar sus efectos adversos", ha destacado.

Menos de la mitad de los pacientes con gota están bien tratados

Menos de la mitad de los pacientes con gota --enfermedad producida por depósito de cristales de urato en el cuerpo, sobre todo en las articulaciones y los tejidos blandos-- está tratado correctamente a pesar de ser una de las pocas patologías reumáticas que se puede curar.

   Así lo ha destacado el coordinador del grupo para el estudio de las Artritis Cristalinas de la Sociedad Española de Reumatología (GECACSER), el doctor Fernando Pérez, en el marco del XXXVII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Reumatología (SER), celebrado recientemente en Málaga, donde además, se ha dado a conocer que menos de un 10 por ciento controla su nivel de ácido úrico adecuadamente con niveles de salud general.  
   Para este experto, estos enfermos deben prestar "especial atención a los excesos en la alimentación, siendo recomendable mantener una dieta similar a la mediterránea". Asimismo, ha insistido en que deben "controlar los excesos dietéticos, si los hubiera".
   "La correcta dietética no reduce los niveles de ácido úrico en más de 1 mg/dl, lo que es similar a la dosis más baja de medicación que se pueda utilizar. Es más importante el impacto que causa sobre el riesgo cardiovascular que sobre los niveles de ácido úrico", ha matizado.
   En concreto, en la mayoría de los pacientes, la causa de la hiperuricemia que acaba produciendo la gota es una dificultad selectiva por parte del riñón para eliminar el ácido úrico de la sangre. Así, una causa "frecuente" de hiperuricemia es la ingesta de bebidas alcohólicas o de cerveza, incluso sin alcohol, así como de proteínas de origen animal, salvo los derivados lácteos.
   Asimismo, cuando un obeso con hiperuricemia reduce su peso al deseable, su nivel de ácido úrico puede normalizarse en algunos casos. Por otro lado, en este grupo de pacientes suele haber además altos niveles de grasas en sangre, mayor frecuencia de hipertensión y un riesgo elevado de enfermedad coronaria.
   "Las ventajas de adelgazar, realizar una dieta equilibrada y restringir el alcohol son, por tanto, múltiples", según ha explicado la SER. Asimismo, ha alertado de que algunas medicinas, como los diuréticos para tratar la hipertensión o la insuficiencia cardiaca o renal, pueden favorecer la hiperuricemia y la gota.
   Por otro lado, el doctor Pérez ha apuntado que la duración de la gota se sustenta en "la consecución de niveles de uricemia en sangre bajos de forma mantenida, lo cual implica que el tratamiento debe prescribirse, cumplimentarse y monitorizarse de forma estricta durante años".
   La gota es la forma de artritis aguda más frecuente en los adultos y afecta a entre 5 y 10 personas por cada mil habitantes, lo que representa el doble que la artritis reumatoide. Es más frecuente entre hombres y bastante común entre las mujeres tras la menopausa.

Un 59% de los escolares españoles presenta deficiencia de vitamina D

Un 59 por ciento de los escolares españoles presenta una deficiencia moderada o severa de vitamina D a nivel sérico, según ha revelado el estudio 'Vitamin D status in a group of Spanish schoolchildren', publicado en 'Minerva Pediátrica'. La leche y los productos lácteos, por su abundancia y elevada densidad de nutrientes, así como su contenido en vitaminas y minerales, en especial vitamina D, resultan "fundamentales" en la alimentación de los niños.

   "Una ingesta adecuada de vitamina D en este periodo regula la adquisición ósea, lo cual deriva en un menor padecimiento de osteoporosis en etapas posteriores de la vida; un menor riesgo de padecimiento de infecciones, diabetes, diversos tipos de cáncer y del aumento de la presión arterial, entre otros", ha señalado Rosa Ortega, del departamento de Nutrición de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid.
   Para analizar la situación en vitamina D se controló la ingesta en un colectivo de escolares de 9 a 13 años durante tres días consecutivos. Posteriormente, se comparó el aporte de vitamina D existente con el recomendado para niños españoles de la edad objeto de estudio y se cuantificaron las cifras séricas de vitamina D, indicadoras de la situación a nivel bioquímico.
   Los resultados pusieron de relieve que la ingesta de vitamina D estuvo por debajo de los 5 mg/día recomendados en el 86,9 por ciento de los niños, aunque esto no quiere decir que en todos ellos se manifestara la deficiencia, ya que la vitamina D se puede sintetizar en el organismo, comenzando el proceso cuando la piel se expone a la luz del sol.
   Desde un punto de vista nutritivo, los productos lácteos contribuyen de manera "importante" a una correcta alimentación del niño y adolescente gracias a tres propiedades fundamentales: su equilibrio entre el contenido en proteínas, lípidos e hidratos; la elevada densidad de nutrientes y, por último, su adaptabilidad a dietas variadas.

La agomelatina demuestra una acción antidepresiva "clínicamente significativa"

La agomelatina, comercializada en España como 'Valdoxan' por los laboratorios Servier, demuestra una acción antidepresiva "clínicamente significativa" y "mejora" los patrones de sueño-vigilia en pacientes con depresión mayor, según una revisión sobre el uso de melatonina y sus análogos publicada en la edición 'on-line' de 'The Lancet'.

   Los autores compararon melatonina, ramelteon, tasimelteon, PD-6735 y agomelatina. La melatonina y sus análogos se unen a los mismos receptores en el cerebro, pero tienen una afinidad diferente por dichos receptores melatoninérgicos.
   En su artículo indican que la agomelatina es "el único fármaco de los analizados, con acción antidepresiva clínicamente significativa, cronobiológica y ansiolítica". Los efectos antidepresivos de agomelatina parecen debidos a la acción sinérgica provocada por la acción de unirse a los receptores de melatonina y bloquear los receptores de serotonina (5HT2c), provocando así un aumento de dopamina y noradrenalina en el córtex prefrontal.
   A su vez, en la revisión se destaca que, a corto plazo, "agomelatina tiene una eficacia similar a venlafaxina y superior a fluoxetina y sertralina". Además, a largo plazo, existen menos recaídas con agomelatina (24%) que con placebo (50%). Los pacientes con depresión tratados con agomelatina refirieron mejorar la calidad del sueño y también se redujeron los despertares nocturnos después de la aparición del sueño.
   Asimismo, los autores del artículo aseguran que como agomelatina no eleva los niveles de serotonina, tiene menos efectos secundarios gastrointestinales, sexuales o metabólicos -característicos de otros antidepresivos- y no tiene riesgos de efectos adversos como síndrome serotoninérgico o síntomas de discontinuación.
   "Debido a ese favorable perfil de seguridad y a su potencial para ayudar a restaurar los ritmos circadianos entre los episodios antidepresivos, este fármaco podría ocupar un lugar único en el manejo de los pacientes con depresión severa y otros trastornos del estado de ánimo", afirman.

La enuresis tiene un "importante" componente genético

La enuresis, o pérdida involuntaria de orina durante cualquier hora del día y la noche, es un problema físico con un "importante" componente genético. De hecho, cuando este trastorno está presente en uno de los padres el menor tiene un 40 por ciento de posibilidades de padecerlo y, si está presente en los dos, el porcentaje asciende al 70 por ciento. Así lo han puesto de manifiesto los expertos reunidos en Barcelona en el XXXVIII Curso de Pediatría Hospitalaria.

   Aunque es un trastorno de origen físico, los expertos advierten de que muchas personas y profesionales sanitarios siguen relacionándolo "erróneamente" con aspectos psicológicos. "El grave error de concepto, todavía muy extendido entre los médicos y la sociedad en general, es porque la enuresis todavía está incluida en el DSM-IV, la 'biblia' de la enfermedades psiquiátricas", advierte el pediatra del Hospital San Juan de Dios, Santiago García-Tornel.
   "Los padres se suelen interesar por la enuresis de su hijo cuando tiene unos 5 y 6 años, pero a los pacientes les suele preocupar hacia los 7 u 8 años de edad porque es cuando empiezan a salir de casa para actividades lúdicas o dormir en casa de amigos o colonias", asegura García-Tornel.
   Actualmente, se han desarrollado diferentes estrategias de tratamiento. La información a la familia de que se trata de un proceso madurativo no controlable por el niño es "fundamental para evitar conductas agresivas o pasivas".
   Igualmente, se debe "desmitificar" el problema ante el niño para mejorar su propia imagen y las relaciones interpersonales. La motivación del niño y la familia son fundamentales para abordar el tratamiento. "Es importante dar unas instrucciones sencillas tanto al niño como a los padres y un seguimiento cercano para valorar los resultados y seguir animando al niño para conseguir su objetivo", detalla.
   Todas estas pautas entrarían dentro del capítulo denominado uroterapia o entrenamiento de la vejiga, término que implica un entrenamiento cognitivo para controlar la vejiga normal de forma voluntaria, instrucciones sobre los hábitos de ingesta de líquidos durante el día, eliminación de orina y heces, sueño, etc.
   Por su parte, el tratamiento farmacológico, basado en la administración de desmopresina, tiene un efecto reductor en la producción de orina durante la noche y disminuye la presión intravesical. También existen alarmas nocturnas, una buena alternativa en niños mayores y motivados.
   La enuresis tiene su mayor foco de prevalencia en la infancia y desciende a medida que el niño se hace mayor. Así, de media, está presente en el 34 por ciento de los niños de 3 años, el 15 por ciento de los niños de 5 años, el 8 por ciento de los que tienen 8 y el 2 por ciento de los que tienen entre 12 y 14 años. A partir de esta edad este trastorno suele desaparecer, pero entre un 0,5 y 2 por ciento de los adultos siguen permaneciendo eneuréticos.

El cotilleo agudiza nuestro sistema visual

El cotilleo no sólo puede afectar a la opinión que tenemos sobre una persona, sino que, según una investigación de la Universidad del Noroeste de Boston (EE.UU.) influye en actitudes más primarias como la percepción visual.

   En concreto, cuando recibimos información negativa sobre un sujeto tenemos más posibilidades de fijarnos en su cara que cuando estas informaciones son positivas o neutras, según una información de la plataforma SINC.
   Para llegar a estas conclusiones, los investigadores tomaron en cuenta el fenómeno de la rivalidad binocular, por el que alternamos nuestra visión cuando nos exponemos a dos estímulos visuales diferentes al mismo tiempo. Además, se contó con la colaboración de 117 sujetos, que fueron divididos en dos fases de estudio: 66 participaron en la primera y 51 en la segunda.
   En una primera fase, se expusieron caras neutras (sin expresión emocional) sobre las que se había referido una descripción de un comportamiento negativo (por ejemplo, una patada a un perro), un comportamiento positivo (del tipo 'ayudó a una mujer mayor con sus compras') o un comportamiento neutral. En total, se expusieron 20 caras para cada categoría y cada cara fue presentada cuatro veces.
   Posteriormente, en una segunda fase se mostraron las caras con asociación negativa y se agregaron 20 caras nuevas para utilizarlas en un experimento de 'rivalidad binocular', por el que, en cada ensayo, se le enseñó al participante una cara para un ojo y una casa para el otro.
   Los resultados indican que cuando el sujeto tenía que elegir entre la casa y la cara no había diferencias cuando la relación de chismes era positiva o neutra, pero sí cuando a la cara se le había asociado una información de carácter negativo. Así, en este último caso, lo más probable es que el sujeto se fijase en la cara.
   Aunque los científicos no saben el mecanismo biológico subyacente, la hipótesis que barajan es que las regiones del cerebro que están implicadas en los sentimientos y el aprendizaje emocional están conectados con el sistema visual, y también a las regiones subcorticales del cerebro que forman parte de la percepción.
   "Estas regiones que se proyectan a zonas del cerebro implicadas en la regulación de la atención, a su vez podrían influir en la facilidad con la que se ve una cara", explica la profesora de psicología de la Universidad del Noreste (EE UU), Lisa Barrett.
   "Este hecho puede formar parte de nuestra evolución, ya que ayuda a protegernos de los mentirosos y los tramposos. Si los vemos durante más tiempo, tal vez podamos obtener información más precisa sobre su comportamiento", argumenta la investigadora de la Universidad del Noreste y coautora del estudio, Erika Siegel.