jueves, 22 de febrero de 2018

Crecen las muertes por asfixia en bebés, en parte por el auge del colecho

NUEVA YORK.- Una investigación publicada en la revista 'Jama Pediatrics' ha alertado de un incremento de las muertes por asfixia en bebés en Estados Unidos, muchas de ellas en la cama y vinculadas a la tendencia creciente de muchos padres de dormir con ellos en la cama, lo que se conoce como 'colecho'.

En concreto, el trabajo dirigido por investigadores de la Universidad de Alabama en Birmingham (Estados Unidos) ha constatado como entre 1999 y 2015 la tasa de mortalidad por asfixia en menores de un año ha aumentado más del doble, de 12,4 a 28,3 muertes por cada mil bebés.
Y sólo en el último año analizado, en 2015, se registraron un total de 1.100 muertes que según los autores podrían haberse prevenido, ya que muchas de ellas se produjeron cuando los bebés estaban en la cama.
"Puede ser que los padres no sigan las recomendaciones para que los bebés duerman fuera de peligro, sin peluches, mantas, almohadas u otros elementos que puedan causar asfixia", ha reconocido David Schwebel, uno de los autores del estudio, que también apunta a otras amenazas que deben eliminarse.
En el estudio observaron que las muertes por asfixia y estrangulación aumentaron en ambos sexos y con independencia de otros factores como la raza o si vivían en ámbitos urbanos o rurales.
No obstante, los investigadores admiten que parte del incremento observado puede deberse a un cambio en la clasificación de estas muertes, ya que algunas atribuidas al síndrome de muerte súbita del lactante al inicio del estudio pasaron a considerarse una asfixia accidental en los últimos años analizados.
"Creo que las muertes por asfixia y estrangulamiento están aumentando debido al cambio de diagnóstico", ha reconocido Jeffrey Colvin, del Children's Mercy Kansas City, investigador que no participó en el estudio y que también avisa del aumento de padres que comparten la cama con sus hijos cuando son pequeños.
"El lugar más seguro para que duerma un bebé es en una cuna, o una cuna en la misma habitación con los padres, pero no en la misma cama", ha añadido Lori Feldman-Winter, de la Universidad Rowan en Camden, Nueva Jersey, dijo Feldman-Winter.
La Academia Americana de Pediatría alerta a los padres que duermen con sus bebés en la misma cama de que, en esos casos, deben tener un colchón firme, retirar cualquier objeto blando como almohadas y alejar la cama de la pared.
Asimismo, también deben saber que compartir la cama es más peligroso para los recién nacidos de menos de 4 meses, para los que han nacido de forma prematura o con bajo peso al nacer, o para quienes han estado expuestos al tabaco durante el embarazo.
"Necesitan saber que la evidencia científica demuestra que dormir en la misma cama es peligroso, y aunque puede haber algunos consejos para hacerlo más seguro, no tenemos datos sobre cuáles son", según Feldman-Winter.

Desarrollan en la Universidad de Navarra un método de hipertermia contra células cancerígenas


PAMPLONA.- Investigadores de Ceit-IK4, de la Universidad de Navarra, España, desarrollan un nuevo método de lucha contra el cáncer utilizando hipertermia, es decir, aplicando calor para matar las células cancerígenas.

El objetivo es combatir el cáncer, pero de una manera en la que el paciente "sufra mucho menos" que con los tratamientos empleados actualmente, como pueden ser la quimioterapia, la radioterapia y sus combinaciones con la cirugía. De esta manera, se pretende "mejorar la calidad de vida de un gran número de personas que presentan o puedan presentar este tipo de enfermedad".
La hipertermia consiste en someter determinados tejidos del cuerpo a temperaturas de hasta 45°C, con lo que se logra terminar con las células cancerígenas. En este caso, se pretende introducir en el cuerpo unos microhilos magnéticos mediante los que se aplica esta temperatura a la zona afectada por los tumores.
Maite Mujika, codirectora del grupo Biodispositivos y MEMS (Sistemas Micro Electromecánicos) de Ceit, destaca que este proyecto "ha permitido avanzar hacia una solución innovadora, menos agresiva y con gran potencial en la terapia contra el cáncer".
Las investigaciones realizadas hasta la fecha han mostrado que las altas temperaturas pueden dañar y destruir células tumorales, causando lesiones mínimas en tejidos circundantes.
 "Al destruir las células cancerígenas, dañando las proteínas y estructura dentro de las células, la hipertermia puede favorecer el tratamiento focalizado de los tumores induciendo su reducción", ha resaltado la Universidad de Navarra en una nota.
"La combinación de los microhilos magnéticos de TAMAG Ibérica con la plataforma microfluídica de Ceit-IK4 ha permitido reducir en un 70% la viabilidad de estas células cancerígenas", incide la investigadora Oihane Mitxelena.
El proyecto, que cuenta con la colaboración de Fomento de San Sebastián y del Gobierno Vasco, es parte del trabajo de la investigadora de Ceit-IK4, Oihane Mitxelena, en colaboración con los departamentos de Física de Materiales y de Física Aplicada de la UPV/EHU, TAMAG Ibérica SL y el profesor Jay Campisi de la Regis University de Denver, Colorado.