lunes, 9 de mayo de 2011

La cirugía reduce el riesgo de mortalidad por cáncer de próstata


Científicos de la Universidad de Uppsala, en Suecia, aseguran que el uso de la cirugía en pacientes con cáncer de próstata sirve para reducir su mortalidad en los próximos 15 años, incluso en aquellos tumores de bajo riesgo, según los resultados de un estudio publicado en el 'New England Journal of Medicine'.

   Los investigadores incluyeron en su estudio a tres grupos de pacientes de Suecia, Islandia y Finlandia, de los cuales fueron seleccionados al azar 347 de entre aquellos a los que se les había realizado una prostatectomía radical o extirpación quirúrgica de la glándula de la próstata.
   Al mismo tiempo, también se seleccionaron otros 348 pacientes no operados, en los que se optó por una vigilancia continua y una terapia hormonal cuando se detectó progresión de la enfermedad.
   La edad media de todos los participantes era de 65 años y, en ambos casos, se realizó un seguimiento posterior de quince años.
   Los resultados, que fueron analizados cada tres años, muestran que la cirugía reduce el riesgo de mortalidad por cáncer de próstata, sobre todo teniendo en cuenta que el 88 por ciento de los afectados tenían tumores palpables, frente al 12 por ciento restante en el que la enfermedad sólo se pudo identificar con PSA (un marcador del cáncer de próstata).
   Así, después de 15 años el 48 por ciento de los hombres del grupo tratado con cirugía había muerto, frente al 58 por ciento en el grupo de espera vigilante.
   Además, de los pacientes del grupo quirúrgico el 16 por ciento murió por cáncer de próstata, frente al 23 por ciento en el grupo de espera vigilante, mientras que el riesgo de metástasis fue un 12 por ciento más bajo para este primer grupo.
   El análisis de todos los pacientes ha revelado además que los pacientes más jóvenes son los que más se beneficiaron de la cirugía. Entre los hombres mayores de 65 años, no hubo diferencias significativas entre el grupo quirúrgico y el grupo de espera vigilante, presumiblemente debido al hecho de que los hombres de más edad corren un riesgo mayor de mortalidad por otras enfermedades.
   Los investigadores también estudiaron a un grupo de hombres con un tipo de tumores poco agresivos, considerado de bajo riesgo por esta causa.
   En estos casos también se observaron mejores tasas de supervivencia entre los pacientes operados, lo que muestra que es necesario desarrollar nuevos marcadores para determinar si estos tumores de bajo riesgo pueden acabar siendo más agresivos.
   "El estudio muestra que la cirugía reduce el riesgo de mortalidad por cáncer de próstata, incluso para los hombres con tumores de bajo riesgo", dice Anna Bill-Axelson, médico jefe en el Departamento de Ciencias Quirúrgicas de la Universidad de Uppsala.
   No obstante, advierten de que "no todos se benefician de la cirugía, por lo que los riesgos individuales y los beneficios potenciales deben ser evaluados sobre la base de la edad, otras enfermedades, tipo de tumor y las preferencias del paciente".
   Otra conclusión del estudio es que los pacientes quirúrgicos cuyos tumores habían crecido más allá de la glándula prostática corrieron un riesgo siete veces mayor de mortalidad por cáncer de próstata que aquellos cuyos tumores no se diseminan.
   Los efectos secundarios más comunes del tratamiento quirúrgico son la impotencia y la incontinencia. Sin embargo, añaden los autores, con el tiempo hay un grupo considerable de pacientes sin cirugía que finalmente requieren una terapia hormonal, que también conlleva un impacto en la calidad de vida de estos pacientes.

Nuevos datos apuntan al sistema inmune como desencadenante de enfermedades neurodegenerativas

  El grupo de expertos del Laboratorio de Terapias Avanzadas en Inmunorregulación y Neuroprotección, que dirige David Pozo en el Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa (Cabimer), han aportado nuevos datos y aproximaciones experimentales que ponen de manifiesto "la importancia del sistema inmune como elemento desencadenante o cronificador en el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas". 

   Según indica Andalucía Innova en una nota, las investigaciones realizadas por este grupo se centran en el estudio de los mecanismos que lo alteran, muchos de ellos comunes en enfermedades como la Esclerosis Múltiple, la Esclerosis Lateral Amiotrófica, el Alzheimer o el Parkinson.
   "Nuestra estrategia se basa en tratar de entender esos mecanismos de desestabilización del sistema inmune que desencadenan estas enfermedades para modularlos mediante el uso de moléculas presentes en nuestro organismo, como determinados neuropéptidos", indica Pozo. Así, explica que se trata de proteínas de pequeño tamaño producidas tanto por células del sistema nervioso como del sistema inmune que forman parte del entramado molecular por el que dialogan entre sí estos sistemas.
   En concreto, este grupo estudia el eje formado por los neuropéptidos 'VIP' (Péptido Intestinal Vasoactivo), "capaces de modificar la respuesta inflamatoria y de tolerancia del sistema inmunológico, y la molécula 'ADNP' (Activity Dependent Neuroprotective Protein), de efecto neuroprotector", apunta el investigador.
   Según afirma, estas aproximaciones terapéuticas llevan implícita una doble función, como es la inmunomoduladora, porque modifica la respuesta del sistema inmunológico para frenar el proceso neurodegenerativo, y la neuroprotectora. Así, sus trabajos van encaminados a la intervención de los procesos de equilibrio del sistema inmune, bien a través de la utilización de neuropéptidos, o bien a través de terapia celular. En esta última, el marco experimental permitiría introducir al paciente células inmunes 'T-reguladoras' específicas de antígeno, sustancia que desencadena la formación de anticuerpos y puede causar una respuesta autoinmune.
   "Son células del propio paciente que podrían utilizarse después de manipulación 'ex vivo', en el laboratorio. De este modo actuarían desactivando la respuesta del sistema inmunitario de forma específica, favoreciendo la tolerancia a un determinado antígeno, en este caso, el desencadenante del proceso neurodegenerativo", indica Pozo.
   Además, advierte de que, "aunque los resultados se han obtenido de ensayos realizados en modelos de animales, otros grupos de investigación ya han trabajado infundiendo células 'T-reguladoras' en pacientes con esclerosis múltiple".
   En este sentido, señala que con estos ensayos se está comenzando a entender cuándo y dónde manipular una respuesta inmune inflamatoria en el sistema nervioso central, "favoreciendo incluso una respuesta positiva, para controlar los procesos de neurodegeneración.
   Para estos estudios los investigadores han contado con la colaboración de la Unidad de Gestión Clínica en Neurociencias del Hospital Virgen Macarena, dirigida por Guillermo Izquierdo. De este modo han podido combinar datos referentes a la respuesta inmune con datos metabolómicos, que permiten estudiar el conjunto de metabolitos presentes en el sistema inmune, procedentes de líquido cefalorraquídeo de pacientes con Esclerosis Múltiple. "Estos datos nos permiten establecer perfiles que ayuden a un mejor diagnóstico y seguimiento de la enfermedad", afirma el investigador.
   Fruto de este trabajo son las publicaciones en revistas de referencia internacional como 'Nanomedicine', 'EMBO Journal', 'Journal of Immunology' o 'PLOSOne', junto al registro de cinco patentes, tres de ellas en las que participan las universidades de Sevilla y Pablo de Olavide, el Consejo Superior de Investigación Científicas (CSIC) y la Fundación Reina Mercedes para la Investigación Sanitaria, y las dos más recientes de 2011, como son Nanoliposomas funcionalizados con péptidos de la Universidad Sevilla y el Servicio Andaluz de Salud.
   Dichos proyectos son incentivados con Fondos de Investigación Sanitaria del Instituto de Salud Carlos III, la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía a través de un proyecto de Excelencia y fondos de Federation of European Biochemical Societies (FEBS).

Identifican un estado estable del aminoácido alanina

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han identificado un nuevo estado estable de la alanina, el segundo aminoácido más frecuente en las proteínas. Este hallazgo, realizado gracias a la capacidad de cálculo de la plataforma de computación ciudadana Ibercivis, permitirá avanzar en el conocimiento de la estructura terciaria de las proteínas, necesario para poder diseñar fármacos específicos.

   Javier Martínez de Salazar, del Instituto de Estructura de la Materia del CSIC, señala que "el número de proteínas de las que se conoce su cadena de aminoácidos es muy elevado". "Sin embargo, sólo se ha logrado determinar la estructura terciaria (responsable última de la función biológica de la proteína) de un pequeño porcentaje de las mismas (...) conocer todos los estados posibles y estables de cada aminoácido supone un paso más en la resolución del puzzle", afirma.
   No todos esos estados --determinados por la posición de los átomos del aminoácido y el ángulo de torsión de sus enlaces covalentes-- son igual de estables ni de capaces de conformar proteínas. Para determinar su estabilidad, los investigadores simulan las diferentes formaciones que podría tener el aminoácido en un medio acuoso, similar al del cuerpo humano. Después, miden su nivel de energía mediante cálculos químico cuánticos, ya que a menor energía, mayor estabilidad.
   "La simulación de un solo estado ocupa alrededor de 75 horas en un ordenador doméstico. En esta ocasión, hemos realizado los cálculos gracias al proyecto Ibercivis, en el que los ordenadores voluntarios realizan fragmentos de estas simulaciones", explica.
   Según explica el investigador Víctor Cruz, también del Instituto de Estructura de la Materia del CSIC, "durante unos meses, algo más de 20.000 segmentos de cálculo han sido realizados en más de 2.000 ordenadores personales, lo que nos ha permitido acelerar el proceso".
   De este modo, los investigadores fueron capaces de caracterizar un nuevo estado estable de la alanina que, al ser comparado con datos del Banco de Datos de Proteínas, explicaba estructuras proteicas ya resueltas y permitía acercarse más a las que aún quedan por descifrar.
   El investigador Javier Ramos, también del CSIC, recuerda que "hay proteínas muy difíciles de analizar con las técnicas actuales, como la cubierta de los virus, las proteínas amiloideas o los neuropéptidos". 
"Conocer los posibles estados de los aminoácidos que las componen nos ayudará a hacernos una mejor idea de estas estructuras terciarias, algo necesario si se quiere diseñar fármacos diana que actúen sólo sobre determinadas estructuras moleculares", indica.
   Existen 20 aminoácidos diferentes, divididos en cuatro grupos, aunque algunos son más comunes que otros. La alanina es uno de ellos. Estos aminoácidos se encadenan según una secuencia codificada en los genes y que recibe el nombre de estructura primaria.
   A su vez, esta secuencia se pliega dando lugar a la estructura tridimensional de la proteína, donde se pueden identificar subestructuras compuestas por un pequeño número de aminoácidos, lo que se conocen como estructuras secundarias. Estas subestructuras se acoplan entre sí y dan lugar a la estructura terciaria de la proteína, responsable de su función biológica.
   El proyecto Ibercivis es una plataforma de computación ciudadana basada en 'software' libre que permite a la sociedad participar en la investigación científica de forma directa mediante la cesión de la capacidad de cálculo de sus ordenadores personales en los momentos en que estén inactivos.
   Para ello, sólo es necesario registrarse en 'www.ibercivis.es' y descargarse la aplicación BOINC. A partir de ese momento, cuando el ordenador esté encendido pero no en uso, el sistema solicita de Ibercivis trabajos para realizar (el usuario verá un salvapantallas del proyecto).
  Hasta el momento, el proyecto cuenta con más de 17.000 usuarios registrados y es usado por investigadores de Portugal, Argentina, México y España.
   En el proyecto participan el CSIC, el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas, la Universidad de Zaragoza, la Universidad Complutense, la Universidad de Extremadura, el Proyecto ITACA de la Generalitat Valenciana y RedIRIS.

Identifican mecanismos de aprendizaje que explican el miedo generalizado en el estrés postraumático

Investigadores del Instituto de Ciencia Weizmann en Rehovot (Israel) han descubierto que existen mecanismos de aprendizaje que explicarían el miedo generalizado que sufren en ocasiones las personas afectadas por el síndrome de estrés postraumático. 

   Los resultados del estudio, que se publica en la edición digital de la revista 'Nature Neuroscience', muestran que la asociación entre un sonido neutral y un resultado desagradable podría hacer más difícil distinguir entre sonidos similares.
   Este descubrimiento sugiere una posible razón por la que los individuos con desorden de estrés postraumático a menudo reaccionan reflexivamente a estímulos inocuos que son similares a aquellos que han asociado con resultados indeseables en el pasado.
   Los investigadores, dirigidos por Rony Paz, incluyeron en su estudio a personas que escuchaban un tono de frecuencia específico emparejado con un olor. Cuando el olor era indeseable, los participantes eran muy buenos diferenciando ese tono de otros similares.
   Sin embargo, los autores descubrieron que cuando un tono se empareja con un olor desagradable, las personas se vuelven mucho peores en la discriminación del tono de otros similares.
   El efecto seguía observándose cuando los tonos eran emparejados con otros sonidos, en vez de olores, y persistía el día siguiente al entrenamiento.

El olor de los pies ayuda al mosquito de la malaria a elegir dónde picar

El mosquito de la malaria utiliza el CO2 del aire exhalado para localizar a los seres humanos en la lejanía y, cuando está cerca, altera su rumbo y se dirige a los pies de sus víctimas. Así lo señala un investigador de la Universidad Wageningen (Países Bajos), que ha descubierto cómo este mosquito usa el olor de los pies humanos para guiarse, en los últimos metros, hasta el mejor lugar para picar.

   Los resultados de esta tesis doctoral, que son presentados este lunes por su autor principal, Remco Suer, en la Universidad Wageningen, muestra las opciones para interrumpir el método con el que estos mosquitos buscan a sus víctimas.
   El mosquito de la malaria africana utiliza sus órganos olfativos --que son dos antenas, dos partes de la boca (palpos maxilares) y el probóscide-- para buscar la víctima de la que obtendrá alimento. Desde una distancia de varias decenas de metros, estos animales detectan el CO2 que forma parte del aire exhalado por los seres humanos.
   Sin embargo, el mosquito de la malaria no sigue la pista del CO2 hasta su fuente, que sería la boca, sino que, en un cierto punto cercano a la fuente, cambia su rumbo y se dirige a los pies, que es su lugar preferido para picar.
   Investigaciones previas a la de Suer, costeadas por la Fundación Bill y Melinda Gates, demostraron que la bacteria que vive en los pies humanos producen varios olores. Asimismo, identificaron diez olores de las bacterias de los pies que, cuando se ofrecían como una combinación, resultaban atractivos para este mosquito.
   El trabajo de Suer ha descubierto el mecanismo que hay detrás de esta conducta. Este investigador ha demostrado que nueve de estos diez olores son detectados por las neuronas olfativas presentes por debajo de las estructuras similares a los pelos de las partes de la boca del mosquito de la malaria.
   Más importante, ha descubierto que cinco de los 10 olores microbiales eran capaces de bloquear la respuesta al CO2. Bloqueando la señal del CO2, el mosquito deja de orientarse al CO2 y dirige su atención a los pies.
   Suer añadió CO2 adicional a los experimentos para simular aire exhalado. Una breve estimulación de un segundo con la mayor concentración de cinco olores de pies  por separado provocó una completa inhibición de las respuesta al CO2 durante varios segundo.
   Entre docenas de neuronas olfativas, sólo un tipo es capaz de detectar el CO2. Esta neurona olfativa es co-compartimentada junto con otras dos neuronas olfativas que están por debajo de estructuras similares a pelo, en la boca del mosquito.
   Restringiendo las respuestas de estas neuronas olfativas, Suer fue capaz de determinar qué olores humanos detecta el mosquito hembra de la malaria. De los 10 olores microbiales descubiertos previamente, nueve provocaron respuestas en los tres receptores olfativos en las partes de la boca de estos insectos y cinco de ellos inhibieron la respuesta al CO2.
   Inhibiendo la percepción del CO2 es posible interrumpir el método de búsqueda de víctimas del mosquito de la malaria. Dado que estos olores de las bacterias de los pies bloquean la respuesta al CO2 y al mismo tiempo, activan otras neuronas olfativas, es muy posible que estos olores causen el salto desde la señal a larga distancia del CO2 al lugar preferido del mosquito para picar, que son los pies.
   Varios experimentos han demostrado que un conjunto limitado de estos olores bloquea el efecto del CO2 e incluso potencia el atractivo de un combinación  atrayente de olores básicos. Esta circunstancia implica que estos inhibidores de CO2 no pueden ser utilizados como repelentes y desviar la orientación del mosquito.
   Los olores que bloquean el receptor de CO2 pero activan otras neuronas olfativas, cambiando la orientación del mosquito de la malaria a otras fuentes de olor, tienen potenciales aplicaciones en sistemas de captura basados en el olor como barrera. Colocando barreras que liberaran estos inhibidores de CO2 se podría atraer el mosquito de la malaria hacia trampas de olor que contuvieran una mezcla de otros olores humanos atractivos para estos animales.

El diagnóstico precoz es "clave" para controlar la evolución del lupus

El presidente de la Sociedad Valenciana de Reumatología (SVR), Javier Calvo Catalá, ha destacado este lunes que el diagnóstico precoz es "clave" para controlar la evolución del lupus, una enfermedad reumática de las conocidas como autoinmunes, cuyo nombre significa 'lobo' en latín, y responde a la a la aparición en el rostro de muchos pacientes de manchas y erupciones semejantes a las que tienen algunos de estos animales en la cara. 

   Calvo Catalá ha hecho estas declaraciones con motivo de la celebración este martes, 10 de Mayo, del Día Mundial del Lupus. En los casos en que solo existen lesiones cutáneas, el dermatólogo sería el especialista cualificado para establecer el diagnóstico y tratamiento correcto, pero cuando evoluciona afectando a diversos órganos (riñón, corazón o pulmón) además de las articulaciones (lupus eritematoso sistémico), el reumatólogo, como especialista en enfermedades autoinmunes, es quien debe controlarle, según la SVR.
   Para el presidente de la SVR "se trata de una enfermedad importante". "Cuando una persona recibe este diagnóstico el mundo se le viene encima. Creen que es un proceso de consecuencias fatales, con graves complicaciones, y para la cual no hay tratamiento, pero en la actualidad disponemos de muy buenos tratamientos que consiguen que un porcentaje elevado de los pacientes sean capaces de llevar una vida absolutamente normal", añade.
   Aunque no se conoce su origen, sí se sabe que actúa trastocando los mecanismos de defensa que los seres humanos tienen para protegerse de agentes externos, haciendo que reaccionen produciendo anticuerpos que eliminan sustancias que el cuerpo cree extrañas, pero que en realidad son normales e importantes para el funcionamiento de nuestro organismo.
   "Se diría que nuestro cuerpo es atacado sin motivo por nuestro propio sistema de defensa", ha explicado Calvo Catalá, quien ha añadido que, como consecuencia, el sistema inmunitario ataca a células y tejidos sanos y la enfermedad va dañando numerosos órganos, como riñones, corazón, cerebro, piel, articulaciones, músculos, arterias y venas, entre otros.
   Hace años se creía que el lupus era una enfermedad rara, pero actualmente las técnicas para su diagnóstico han mejorado "sensiblemente", lo que ha traído consigo que se diagnostiquen un número mucho mayor de casos de lupus, que en otro tiempo pasaban desapercibidos.
   Según los datos de la SVR, una ciudad que tenga 100.000 habitantes, cada año tendrá siete casos nuevos de lupus y puede aparecer a cualquier edad: infancia, edad adulta y ancianos, aunque en la mayoría de los casos aparece entre los 17 y 35 años y afecta especialmente a mujeres.
   Los síntomas asociados al lupus más frecuentes "van desde cansancio fácil, a la pérdida de peso inexplicable y fiebre prolongada sin un proceso infeccioso causante. El 90 por ciento de los pacientes con lupus tienen dolor articular, sobre todo en los dedos de las manos, muñecas, codos, rodillas y de los pies. En cuanto a la piel, la lesión más frecuente consiste en el enrojecimiento y erupción en la piel, en las mejillas y en la nariz. Estos pacientes tienen una piel muy sensible a los rayos ultravioletas (fotosensibilidad) y de hecho no es raro que la enfermedad aparezca tras una exposición solar prolongada", ha indicado el especialista.
   En este sentido, el diagnóstico precoz es clave para controlar la evolución de la enfermedad, sobre todo en mujeres jóvenes, ya que el 90 por ciento de los casos afecta a mujeres en edad fértil y, tal como se ha constatado en recientes investigaciones, el lupus "se asocia a un riesgo muy elevado de abortos, partos prematuros o complicaciones en el parto".
   "No obstante, la mujer con lupus puede quedarse embarazada y tener un parto normal, pero es necesario consultar con su reumatólogo para aconsejarle el embarazo cuando sea más aconsejable según la evolución de la enfermedad", ha explicado.
   Con la celebración del Día Mundial del Lupus se quiere "concienciar a los médicos, formar a los afectados y sensibilizar a la sociedad en general sobre esta enfermedad, así como aumentar los fondos destinados a su investigación".

Depresión y grasas, relación causa efecto

El estudio, llevado a cabo por investigadores de las universidades de Navarra y Las Palmas de Gran Canaria, ha relacionado la ingesta de grasas trans y saturadas con el desarrollo de depresión. Para llegar a esta conclusión, durante un periodo de seis años, analizaron a más de 12.000 voluntarios incluidos en el Proyecto SUN. Este proyecto, del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad de Navarra, se inició en 1999 y cuenta ya con más de 20.000 participantes, junto con cerca de 2.000 personas nuevas cada año. 
 
Gracias a este gran número de voluntarios, los investigadores pueden indagar las causas de algunas de las enfermedades que más preocupan: la obesidad, el síndrome metabólico, las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, la infertilidad y la depresión, entre algunas de una larga lista. Al principio del estudio los voluntarios no tenían signos de trastorno mental y, al finalizar, un total de 657 lo desarrollaron. Los autores, según explican en la publicación 'PLoS ONE', detectaron que las personas con un alto consumo de grasas trans y saturadas registraban un 48% más de posibilidades de sufrir depresión que quienes hacían un consumo comedido.
Hace dos años, investigadores de la University College London, publicaron unos resultados similares en 'British Journal of Psychiatry'. Después de utilizar los datos de cerca de 3.500 voluntarios, advirtieron que quienes comían de manera regular comida basura o "fast food", con alto contenido de grasa (comidas preparadas, postres y dulces), tenían un 60% más de riesgo de sufrir depresión que quienes seguían una dieta equilibrada con un aporte adecuado de frutas, verduras y pescado.
Concluían también que a pesar de que son muchos los factores importantes en el desarrollo de este trastorno mental, la dieta desempeña un papel independiente. Entre las posibles razones del efecto protector que confiere seguir una dieta saludable, los científicos señalan los altos niveles de antioxidantes de frutas y verduras, igual que el ácido fólico del brócoli, col, espinacas, lentejas y garbanzos, o los altos niveles de ácidos grasos poliinsaturados (omega 3) del pescado.
Los investigadores insisten en que no todas las grasas son iguales y subrayan que la del aceite de oliva (monoinsaturada) y la de los aceites vegetales o el pescado (polinsaturada) se relacionan con menos posibilidades de sufrir depresión. Además, algunos tipos de grasa son importantes fuentes de energía y ricas en muchos nutrientes. Se dividen en saturadas, monoinsaturadas, poliinsaturadas y ácidos grasos trans. Una alimentación adecuada exige saber distinguirlas, conocer cuál es su función y la cantidad diaria conveniente.
La grasa saturada se localiza, sobre todo, en los alimentos que proceden de los animales (carnes, vísceras, embutidos, piel de pollo, huevos, lácteos enteros, nata, yema de huevo), en el aceite de coco y palma (utilizados en elaboraciones industriales), en el chocolate y en pastelería y bollería. La grasa trans es frecuente en algunas margarinas, patatas fritas y otros aperitivos fritos industriales, así como en pastelería y bollería industrial.
De la misma manera, con este trabajo, los investigadores españoles han confirmado que la incidencia de estrés es mayor en los países del norte de Europa, donde se consumen más derivados lácteos ricos en grasas saturadas, como la mantequilla. En zonas del sur, donde la población tiende a seguir más la dieta mediterránea, el riesgo de padecerlo disminuye.
Unos 25 millones de europeos. Esta cifra corresponde al número de personas en toda la Unión Europea (UE) que sufren depresión, el 5% de la población europea. Y no acaba aquí: de los más de 300.000 millones de euros anuales que se presupuestan en Europa para el tratamiento de las enfermedades mentales, cerca de la mitad se destinan al tratamiento de este trastorno y sus efectos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) prevé que en el año 2020 sea una de las principales causas de discapacidad en todo el mundo, superada solo por las enfermedades cardiovasculares.
Además, sus consecuencias son múltiples y variadas. Las personas con trastornos mentales tienen una menor calidad de vida que el resto de la población y una mayor prevalencia en problemas de salud, como la hipertensión, la obesidad, la diabetes y enfermedades respiratorias, sumado a problemas de comportamiento y al abuso de sustancias tóxicas. Incluso un gran porcentaje de ellos desarrolla problemas sexuales ligados a la propia enfermedad o a los fármacos utilizados en su tratamiento. Entre un 30% y un 70% de los afectados sufren alteraciones frecuentes, que se dan en todas las fases sexuales (desorden del deseo, alteraciones en la excitación, alteraciones del orgasmo o problemas por dolor sexual, entre otros).
Entre sus principales objetivos, la Fundación Española del Corazón (FEC) persigue la prevención de las enfermedades cardiovasculares. Para ello, ha elaborado un Programa de Alimentación y Salud (PASFEC), una iniciativa de apoyo a los productos de alimentación o ejercicio físico considerados saludables para las personas. Con él busca incentivar a la industria para que desarrolle productos más saludables, y ayudar a la vez al propio consumidor en la tarea de escoger un producto, mediante unos criterios establecidos por el comité científico de esta sociedad.
La FEC considera fundamental la prevención de las enfermedades del corazón a través de una alimentación adecuada y la actividad física regular. Por otro lado, también colabora en el desarrollo de "Espacios Cardiosaludables", para ayudar a mejorar la eficacia de las empresas en el ámbito de la prevención de estas patologías, con la adopción de ciertas medidas que permiten obtener la acreditación.

La falta de nuevos fármacos frena la curación de afectados por tumores raros

El déficit de investigación en los tumores raros hace que no se disponga de fármacos nuevos y, en consecuencia, que los pacientes no tengan las mismas posibilidades de sobrevivir que los afectados por tumores "grandes".

Así lo ha manifestado el doctor Enrique Grande, del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Ramón y Cajal, de Madrid, quien ha precisado que está surgiendo una nueva generación de medicamentos que dirigen su acción a dianas moleculares específicas para inhibir el crecimiento tumoral.
Estos fármacos están dando lugar a un nuevo paradigma del cáncer -se pasa de romper la célula a bloquear moléculas- y los oncólogos creen que podrían funcionar en pacientes con tumores poco frecuentes.
El problema radica en demostrar su eficacia dado que la baja incidencia de esos tumores dificulta la formación de grupos de pacientes suficientemente numerosos a los que someter a ensayos clínicos, ha señalado el doctor Jovell, presidente del Foro Español de Pacientes y afectado por un tumor raro.
Se denomina tumores raros a aquellos que presentan una baja incidencia en la población (en Europa afectan a menos de cinco personas por cada 10.000 habitantes) o que se localizan en órganos no habituales.
Aunque se ubican en la mayoría de las estructuras del cuerpo humano, son más frecuentes en los órganos endrocrinos (tiroides, hipófisis o glándulas adrenales), tejidos blandos, piel y cerebro.
A pesar de ser poco comunes, la lista de ellos es muy extensa, por lo que la incidencia global es alta y constituyen el 20 por ciento del total de tumores.
La baja incidencia de estos tumores hace que la industria farmacéutica no apoye la investigación en este campo debido a que "el rendimiento que va a sacar de sus fármacos es menor", ha señalado el doctor Grande.
Precisamente el escaso interés por investigar es una de las quejas de los afectados, según el doctor Jover, quien ha subrayado la preocupación de los pacientes por el hecho de que la crisis les deje desatendidos.
Para el doctor Grande, la investigación "no es la más adecuada" y el tratamiento de estos tumores "no va a la vanguardia" como ocurre en otros tipos de cáncer comunes como el de mama, pulmón o próstata, para los que se dispone de un gran número de fármacos nuevos en estudio y también otros que ya están a disposición de los pacientes.
Otro de los "hándicap" a los que se enfrentan las personas que padecen un tumor raro es el retraso en el diagnóstico.
"El problema es que el médico no lo tiene en mente y, por tanto, no es el primer diagnóstico de sospecha, con lo que muchas veces se pierde un tiempo que puede ser importante para el paciente", señala el doctor Grande.
"Todo lo que significa en cáncer retrasar el diagnóstico redunda en una menor posibilidad de coger el tumor a tiempo. Si se retrasa el diagnóstico de un paciente con un tumor raro, éste puede perder la oportunidad de una cirugía curativa", ha señalado.
Para favorecer la investigación y profundizar en el diagnóstico y manejo de los afectados por tumores raros, la Española de Oncología Médica (SEOM) ha creado un grupo de trabajo, que se constituirá de manera oficial este mes.
Se trata de que los pacientes se beneficien de un mayor conocimiento de su patología por parte del médico que los trata, ha subrayado este oncólogo, quien ha reconocido que "los tumores raros cuando te vienen a la consulta son un marrón", por lo que "tenemos que darle a los médicos una guía".

La nueva vacuna de Patarroyo contra la malaria se probará en humanos en junio de 2012

El científico inmunólogo Manuel Elkin Patarroyo ha dicho hoy en rueda de prensa en Murcia que su nueva vacuna contra la malaria "Colfavac" (Colombian falciparum vaccine) se probará en humanos en junio de 2012 tras obtener un 90 % de eficacia en monos.

Patarroyo, que ha sido invitado por la Fundación de Estudios Médicos para pronunciar la conferencia "Nuevas Vacunas para las Viejas Infecciones", ha desvelado que 25 multimillonarios crearán un consorcio para construir la planta de producción de la vacuna tras fracasar en las negociaciones con la industria farmacéutica.
Ha añadido que un vicepresidente de una multinacional, cuyo nombre no ha querido desvelar, le ofrecía producir la vacuna a 75 dólares la unidad cuando los cálculos de Patarroyo eran de 10 céntimos de euro, por lo que rechazó la oferta porque de ese modo no llegaría a las personas más necesitadas, que es para lo que él ha trabajado estos 33 últimos años.
Patarroyo ha reconocido que su anterior vacuna, descubierta el 26 de enero de 1986, "SPf66", estaba "incompleta", con una protección de entre el 30 y el 50 por ciento de los humanos, pero gracias al descubrimiento en 2002 del genoma del parásito de la malaria y al hallazgo de un colaborador suyo, Mauricio Calvo, logró mejorarla y darla a conocer el 25 de marzo pasado en "Chemical Reviews".
La intuición y el insomnio contribuyeron también al descubrimiento de esta nueva vacuna sintética tras averiguar la estructura química del microbio, sintetizando miles de moléculas en fragmentos de 20 aminoácidos, deteniéndose en esta ocasión, a diferencia de 1986, en seleccionar solo los fragmentos que invadían los glóbulos rojos.
Ha explicado que algunos de los aminoácidos fueron modificados y fueron seleccionados aquellos que poseían el mismo volumen, masa y superficie, pero de polaridad invertida.
Ha dicho también que hace una semana se entrevistó con el director de ingeniería genética de La Habana, Manuel Limonta, que le invitó a trabajar en una vacuna contra el dengue, y en Brasil le han propuesto otra vacuna contra las amigdalitis, de la que ya tienen un prototipo que será ensayado con humanos.
El científico colombiano halló principios químicos para crear vacunas sintéticas que podrán utilizarse en investigaciones de vacunas contra enfermedades infecciosas.
Según Patarroyo, desde que Pasteur en 1884 inventó la primera vacuna han pasado 123 años en los que sólo se han logrado sacar 15 vacunas de las 517 enfermedades infecciosas existentes.
"Colfavac" ha estado financiada inicialmente por el Gobierno colombiano, pero finalmente han sido la Fundación para la Investigación Solidaria de Navarra, la Agencia Española de Cooperación Internacional y la Universidad de Rosario (Bogotá) las que han apostado por esta vacuna.
Preguntado por su rechazo a colaborar con gran parte de la comunidad científica internacional, ha explicado que las instituciones anglófonas obligan a firmar un documento de patentes, mejoras y regalías que va contra su filosofía, y aunque hay científicos que desearían trabajar con él, no pueden sin rubricar tal acuerdo.
"No somos instituciones de beneficencia y tenemos que responder ante nuestros accionistas", le espetó el vicepresidente de una multinacional farmacéutica durante la negociación por "Colfavac", lo que ejemplifica el interés de estas empresas y que los médicos "somos los que tenemos que dejarnos la piel rastrillada por ahí", ha comentado.
Patarroyo se ha mostrado decepcionado con organismos como la OMS, a la que donó en 1993 su primera vacuna, tras lo ocurrido con la gripe A, momento en el que, según afirma, "fue un caso patético en el que quedó patente la serie de intereses creados a su alrededor", uno de los motivos por los que no les cederá "Colfavac".
Su descubrimiento, según ha dicho, "le sienta muy mal a la industria farmacéutica, como un puntapié en la cara", ya que "tienen un mercado más grande que el de las petroleras" y un poder tan grande que "no caigo en la trampa de enfrentarme o un día cualquiera desaparezco en el Amazonas".
"Va a ser duro de roer". Así ha resumido el trabajo que ahora le queda para que comience a aplicarse esta nueva vacuna.
"Le tocará a mi hijo resolverlo", ha concluido a seis meses de cumplir los 65 años.
Patarroyo ha dicho también que el cambio climático está modificando el panorama epidemiológico, por lo que hay países, como el suyo, que se están preparando para la llegada de epidemias.
Patarroyo ha afirmado que Colombia está preparando, gracias a que ha "pinchado un poco al Gobierno" con el riesgo de epidemias que podrían sobrevenir por los cambios en el clima, entre ellas el dengue.
Además ha comentado que países como Venezuela se están preparando para una enfermedad parasitaria llamada "esquistosomiásis", pero ha advertido de que en muchos países sufrirán epidemias no solo por el citado fenómeno, sino por las grandes migraciones humanas.
"Es mas lo que nos hace falta que lo que tenemos", ha aseverado Patarroyo.

Descubren la relación entre una proteína de los linfocitos y los brotes de lupus

La sobreexpresión de una proteína por parte de unas células inmunitarias --linfocitos T CD4+-- está relacionada con los brotes activos de lupus en los afectados por esta enfermedad, incurable pero tratable, según un estudio del Vall d'Hebron Institut de Recerca (VHIR) en Barcelona, publicado en 'Journal of Clinical Immunology'.
 
Según ha explicado coincidiendo con el Día Mundial del Lupus que se celebra este martes, 10 de mayo, otro estudio del grupo de investigación en enfermedades sistemáticas publicado en 'Immunobiology' demuestra que no hay relación entre la infección del controvertido virus XMRV y la presencia del Síndrome de Fatiga Crónica (SFC) en pacientes de lupus, el 40 por ciento de los cuales padecen SFC.
El lupus es una enfermedad autoinmunitaria grave y de causa desconocida en la que los anticuerpos no reconocen al organismo como propio y lo atacan como si se tratara de un virus que tuvieran que eliminar, causando una inflamación que puede afectar cualquier parte del organismo y que se presenta en brotes.
El VIHR trabaja en la búsqueda de marcadores que indiquen cuáles serán las manifestaciones de la enfermedad, muy inciertas y diferentes en cada paciente, además de buscar potenciales dianas terapéuticas para idear nuevos tratamientos. En España hay unos 35.000 afectados de Lupus Eritematoso Sistémico.

Presentan a hombre de Texas que recibió trasplante de cara

El primer paciente de Estados Unidos en haber recibido un trasplante completo de cara hizo su primera aparición en público desde la operación.

Dallas Wiens, luciendo una barba corta y gafas oscuras, se unió a los cirujanos el lunes en el Hospital Brigham y de Mujeres. Wiens está por salir del hospital de Boston luego de someterse al procedimiento de 15 horas en marzo.
El hombre de 25 años de edad y residente de Fort Worth, Texas, recibió la nariz, los labios, la piel, los músculos y los nervios faciales de una persona muerta no identificada.
La operación fue pagada por las fuerzas militares estadounidenses, que esperan aprovechar los resultados del procedimiento para ayudar a soldados con heridas faciales graves.
Wiens se quemó el rostro y se quedó ciego después de tocar accidentalmente un cable de alta tensión mientras pintaba una iglesia en noviembre de 2008.
El receptor del primer trasplante de cara en Estados Unidos hizo su presentación pública hoy lunes, diciendo que pronto volverá a Texas para estar con su hija, que le ha dicho que está guapo con su nueva cara.
Dallas Wiens, de 26 años y nativo de Fort Worth, sufrió quemaduras en la mayoría de su rostro por contacto con un cable de alta tensión en 2008 y hace dos meses pasó por una operación de 15 horas para reemplazar su cara.
El momento más gratificante desde el trasplante, dijo, fue reunirse con su hija, en edad preescolar.
"Estaba impresionada. De hecho, dijo "Papá, eres tan guapo'", dijo Wiens en una rueda de prensa en el hospital Brigham and Women's.
Un equipo de más de 30 expertos médicos del hospital, afiliado al programa de educación de la Escuela de Medicina de Harvard, reemplazó su nariz, labios, piel, músculos de animación facial y nervios en marzo, utilizando a un donante anónimo.
"Para mí la cara se siente natural. Se siente como si se hubiera convertido en la mía", dijo Wiens, hablando despacio pero con claridad.
Antes del trasplante, el paciente no tenía olfato, tenía problemas para respirar y había pasado por más de 20 operaciones en Dallas.
Cuando el trasplante recuperó su sentido del olfato, Wiens dijo que el primer olor que identificó fue el de la lasaña del hospital. Olía deliciosa, añadió.
Los médicos, que no pudieron recuperar la vista de Wiens, habían dicho de que tras la cirugía no tendría ni su aspecto de antes ni el del donante. El lunes llevaba gafas oscuras, y su rostro estaba algo inclinado hacia un lado. Su barba está volviendo a crecer, y tiene cabello en la cabeza.
Además de su rueda de prensa, Wiens apareció el lunes en el programa de ABC "Good Morning America".
El accidente que le desfiguró se produjo en noviembre de 2008, cuando trabajaba en la construcción. Estaba ayudando a pintar una iglesia, subido a una plataforma elevadora que chocó con un cable eléctrico.
Wiens señaló el lunes que cuando vuelva a casa quizá vaya a la universidad.
Durante los próximos seis o nueve meses trabajará para recuperar la función muscular y la sensibilidad en partes del rostro, según los médicos.
"Cada paso del camino ha sido impresionante", señaló el paciente. "Se siente como aprender a hacerlo todo de nuevo, pero de una forma muy real, muy buena".
Los médicos del hospital realizaron el segundo trasplante de cara del país en abril sobre Mitch Hunter, un hombre de Indiana de 30 años que sufrió un grave choque eléctrico de un cable de alta tensión tras un accidente de tráfico en 2001.
Charla Nash, una mujer de Connecticut herida por un chimpancé en 2009, está en lista de espera para la operación, según el hospital.
El primer trasplante completo de cara del mundo se realizó en España en 2010.
Más de una decena de trasplantes de cara se han realizado en todo el mundo.

El CNIO desarrolla dos nuevas moléculas con propiedades anticancerosas

El Grupo de Inestabilidad Genómica del Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNIO) ha finalizado el desarrollo de dos nuevas moléculas con propiedades anticancerosas que actúan inhibiendo la quinasa ATR, cuya diana son las mutaciones del gen p53, muy frecuentes en diferentes tipos de cáncer. 

Según informa la revista ´Nature Structural and Molecular Biology´, el director de esta investigación, Óscar Fernández-Capetillo, ha colaborado con el Programa de Terapias Experimentales del CNIO, que dirige Joaquín Pastor, ya que estos habían descrito previamente que los niveles reducidos de esta quinasa eran partícularmente tóxicos para células que carecían del gen p53.

Basándose en esta observación, la hipótesis con la que trabajaban era que inhibidores de ATR podrían ser particularmente eficientes para matar células con mutaciones en p53.

En concreto, la relevancia de esta idea es que la pérdida de p53 es muy frecuente en cáncer, lo que se asocia en muchos casos a la pérdida de respuesta del tumor a muchas de las estrategias genotóxicas que se usan en quimioterapia.

Así, y tras tres años de trabajo en los que han participado los investigadores de su grupo Luis I. Toledo, Matilde Murga, Rafal Zür y Rebeca Soria, el grupo consiguió identificar varias moléculas capaces de inhibir de manera muy potente a ATR.

Estudios ´in vitro´ han demostrado que, efectivamente, estas moléculas son particularmente tóxicas para células que carecen de p53, pero también para células que portan otras mutaciones cancerosas como la sobreexpresión de ciclina E.

De hecho, uno de los compuestos que se ha identificado (NVP-BEZ235), está siendo actualmente testado en ensayos clínicos para el tratamiento del cáncer, pero se desconocía que su efecto podría estar mediado por la inhibición de ATR.

En la actualidad, el grupo está explorando las posibilidades de trasladar estas ideas a ensayos clínicos y preclínicos con la ayuda del Programa de Investigación Clínica del CNIO, dirigido por el Manuel Hidalgo.

Además de este trabajo, el grupo ya dispone de datos en modelos animales de que esta estrategia es "muy eficiente" para el tratamiento de algunos tumores.