lunes, 2 de junio de 2014

Viejo remedio, útil para cáncer de próstata

CHICAGO.- Un fármaco barato para la quimioterapia, usado desde hace décadas, prolongó la vida más de un año cuando fue agregado a la terapia hormonal regular para los varones cuyo cáncer de próstata está muy extendido, informaron expertos el domingo.

Los varones que recibieron docetaxel, que en Estados Unidos se vende en forma genérica, vivieron casi 58 meses en comparación con 44 meses de quienes no la recibieron, según halló un estudio importante.
"Esta es una de las mayores mejorías en la supervivencia de adultos" con cualquier tipo de cáncer muy extendido más allá de su localización original, afirmó el doctor Christopher Sweeney del Cancer Institute Dana-Farber en Boston, que dirigió el estudio y comunicó los resultados el domingo en la conferencia anual en Chicago de la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica.
El cáncer de próstata es el cáncer más común en los varones. En Estados Unidos se diagnostican 240.000 casos nuevos por año. Unos 30.000 anuales son como los sujetos de este estudio, con la enfermedad propagada a los huesos u otros órganos.
En el estudio, todos los 790 sujetos recibieron fármacos para bloquear la testosterona, una hormona que impulsa el crecimiento del cáncer de próstata y la mitad recibió seis infusiones de docetaxel, una cada tres semanas.
Unos dos años y medio después, 101 de los segundos habían muerto, en comparación con 136 de los primeros. Un hombre murió del tratamiento y un 6% padeció fiebre pero la mayoría toleró bien el tratamiento, dijo Sweeney.
El National Cancer Institute (Instituto Oncológico Nacional) financió el estudio, que tomó casi una década. El resultado indica la importancia de la financiación federal para investigaciones que de otro modo podrían no llevarse a cabo, observó el doctor Clifford Hudis, que trabaja en el Centro Oncológico Memorial Sloan Kettering en Nueva York y también es presidente de la sociedad oncológica.
"Estos suelen ser estudios que la industria tiene menos interés en financiar, como el uso nuevo de un fármaco viejo" que perdió la protección de patente hace mucho, afirmó.
El fármaco genérico docetaxel cuesta unos 1.500 dólares o menos por infusión. Eso es mucho menos que otros medicamentos para el cáncer, que pueden exceder los 100.000 dólares para un proceso de tratamiento.

Un estudio podría abrir nuevas vías para mujeres jóvenes con cáncer de mama

CHICAGO.- El fármaco Aromasin, que bloquea estrógenos, funcionó mejor que la terapia con tamoxifeno, que lleva tiempo usándose, a la hora de evitar la recurrencia del cáncer en mujeres con cáncer de mama en estadios iniciales, según un estudio que podría cambiar el modo en que se trata a los pacientes, según dijeron científicos el domingo.

Aromasin, un medicamento que se vende como genérico bajo el nombre de Exemestano, pertenece a los tratamientos denominados inhibidores de aromatasa que se usan habitualmente en mujeres postmenopáusicas con bajos niveles de estrógenos.
La aromatasa es una enzima que convierte la hormona andrógeno en pequeñas cantidades de estrógenos.
Estos fármacos no se solían recetar para mujeres jóvenes cuyos ovarios producen estrógeno.
En mujeres premenopáusicas con cánceres sensibles a las hormonas, el estándar para prevenir la recurrencia del cáncer son cinco años de tratamiento con un medicamento llamado tamoxifeno. Para las mujeres con mayor riesgo, los médicos en algunos países recomiendan exemestano más algún tipo de terapia que paralice la actividad de los ovarios, cortando el suministro de estrógeno. Esa práctica no se suele usar en Estados Unidos porque no hay suficiente evidencia de que produzca beneficios.
Científicos internacionales probaron si los inhibidores de la aromatasa combinados con tratamientos que bloqueen los ovarios podrían funcionar mejor que el tamoxifeno en dos ensayos clínicos en los que participaron 4.690 mujeres premenpáusicas.
Todas las mujeres en los estudios se sometieron a algún tratamiento para bloquear la función de sus ovarios, o con un fármaco llamado Triptorelina, la extirpación quirúrgica de los ovarios o el uso de radiación. Además, un grupo probó exemestano y el otro tamoxifeno.
Un análisis conjunto de dos ensayos internacionales conocidos como SOFT y TEXT, presentado en reunión de la American Society of Clinical Oncology (ASCO) en Chicago, mostró que el exemestano funcionó mejor a la hora de mantener a raya el cáncer cuando se suprimía la función de los ovarios, dijo la doctora Olivia Pagani del Instituto de Oncología del Sur de Suiza.
Su estudio fue presentado en la reunión y será publicado esta semana en el New England Journal of Medicine.
El doctor Clifford Hudis, experto en cáncer de mama y presidente de ASCO, dijo que con supresión ovárica, los inhibidores de la aromatasa ofrecían una opción para reducir el riesgo de recurrencia.
Pero sigue habiendo dudas.
Aunque los inhibidores de aromatasa mostró un beneficio a la hora de prevenir la recurrencia, los científicos aún tienen que presentar datos que demuestren si el tratamiento también mejora la supervivencia en comparación con el tamoxifeno.
Tampoco está claro si anular la actividad de los ovarios añade algún beneficio a las mujeres que sólo son tratadas con tamoxifeno, que es el actual estandar en Estados Unidos.

Un fármaco arroja avances contra la leucemia

CHICAGO.- Un nuevo fármaco para la forma más común de leucemia en adultos mejora la supervivencia de los pacientes cuyo estado empeoró pese a haber sido sometidos a tratamientos estándares, de acuerdo a los resultados de un estudio.

Ibrutinib, vendido bajo la marca Imbruvica, fue aprobado por los reguladores estadounidenses en febrero como tratamiento para la leucemia linfática crónica.
La terapia "le dio una paliza" a ofatumumab, o Arzerra en la fase 3 de los ensayos clínicos, dijo el doctor John Byrd, investigador jefe del estudio y profesor de medicina de la Universidad Estatal de Ohio.
El analista de JP Morgan Cory Kasimov dijo que los resultados de los ensayos clínicos, junto con el hecho de que el fármaco es una píldora y no requiere combinarse con otra terapia, podrían ayudar a impulsar las ventas.
  
Se espera que las ventas de Imbruvica alcancen los 295 millones de dólares este año, una cifra que decepcionó a algunos inversores.
El ensayo implicó a 391 pacientes con leucemia linfática crónica cuya enfermedad había avanzado después de dos o más terapias anteriores. El tratamiento estándar para estos pacientes es una combinación de quimioterapia con un medicamento que genera anticuerpos conocido como Arzerra.
Los resultados fueron presentados en la Sociedad Americana de Oncología Clínica que se reunió ayer sábado en San Francisco.
Imbruvica es un fármaco oral diseñado para atacar una enzima específica y bloquear la función de ciertas células cancerosas.
La leucemia linfática crónica, una forma de cáncer en la sangre de lento avance, se diagnostica en unos 16.000 estadounidenses y produce unas 4.600 muertes cada año, según la Sociedad Americana del Cáncer.