miércoles, 21 de septiembre de 2011

La diálisis tres veces a la semana puede no ser suficiente

Un nuevo estudio puso en entredicho la manera en que se ha tratado durante medio siglo a los diabéticos y otros pacientes con problemas renales, al encontrar que las diálisis para limpiar la sangre tres veces a la semana pueden no ser suficiente.
 
Las muertes, los ataques cardíacos y hospitalizaciones fueron mucho más altos el día después del intervalo de dos días entre tratamientos que se crea al pasar de una semana a la otra, encontró el estudio financiado con fondos federales.
La presidenta de la Fundación Nacional del Riñón dijo que estaba "muy preocupada" por los resultados publicados en el New England Journal of Medicine.
"Podríamos hacer un mejor trabajo para nuestros pacientes de diálisis", y eso podría significar hacerlo más a menudo, dijo la doctora Lynda Szczech, una especialista en riñón de la Universidad de Duke, quien no participó en el estudio.
Los riñones eliminan desechos y líquidos del cuerpo. La mayoría de los 400.000 estadounidenses con falla renal se mantienen con vida gracias a que una máquina purifica su sangre tres días a la semana en clínicas de diálisis, por lo general los lunes, miércoles y viernes o los martes, jueves y sábados. En ambos casos, hay una pausa de dos días entre la última sesión de una semana y la primera de la siguiente.
El horario de diálisis de tres días existe desde mediados de la década de 1960 y da a los pacientes un fin de semana de descanso de las agotadoras horas que pasan conectados a la maquina.
Sin embargo, los doctores sospechan que la pausa de dos días entre los tratamientos es peligrosa, y estudios más modestos han encontrado más muertes relacionadas con el corazón el día después de esa brecha.
El estudio más reciente, financiado por los Institutos Nacionales de Salud, es el más grande hasta el momento. Fue realizado por el doctor Robert Foley, de la Universidad de Minnesota, y sus colegas. Todos dijeron haber recibido honorarios de las clínicas de diálisis y proveedores.
Los investigadores encontraron que el riesgo de muerte el día siguiente de la pausa más larga era 22% más alto en comparación con los demás días de la semana.