martes, 4 de diciembre de 2012

Un 50% de los tumores se tratarán con medicina personalizada en la próxima década

La mitad de los tumores se tratarán mediante la medicina personalizada a partir de la próxima década, es decir, mediante fármacos específicos para cada tipo de cáncer diseñados en función de las características genéticas de cada paciente, según afirman los especialistas.

   Esta es una de las conclusiones del Congreso sobre Medicina Personalizada del Cáncer que ha reunido hasta este martes a 200 investigadores en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), convocados por el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (Idibell).
   El investigador Manel Esteller ha explicado que "no todos los tumores son iguales, aunque lo parezcan a vista de microscopio", ya que un tumor de mama y uno de colon tienen alteraciones genéticas diferentes y ello hace que se busquen fármacos específicos dirigidos a esta alteración y que no afecten a la célula sana.
   Según Esteller, actualmente, sólo un 10% de los tumores son tratados de forma personalizada, pero "en la próxima década pasarán a ser el 50% porque conoceremos la alteración genética que lo hace más débil".
   El avance más notable realizado durante los últimos años en el tratamiento del cáncer ha sido la irrupción de nuevos fármacos que permiten una quimioterapia más "moderna" que evita parte de los efectos secundarios.
   Entre otras innovaciones, el doctor Esteller destaca "los avances en el campo de las leucemias y los linfomas, donde hay leucemias que, por su alteración genética, deben recibir un fármaco determinado".
   El congreso celebrado en L'Hospitalet ha contado con una veintena de ponentes destacados en la oncología y la investigación del cáncer, especialmente del estudio de los perfiles genéticos y epigenéticos que permiten personalizar el tratamiento de los pacientes y desarrollar nuevos fármacos.

El tabaquismo en adolescentes aumenta el riesgo de osteoporosis

Las adolescentes que fuman acumulan menos hueso durante un período crítico de crecimiento y, por lo tanto, tienen un mayor riesgo de desarrollar más adelante osteoporosis, una enfermedad donde los huesos pierden densidad mineral y se vuelven quebradizos, según un nuevo estudio publicado este martes en 'Journal of Adolescent Health'.

   Los investigadores Hospital Infantil de Cincinnati (Estados Unidos) analizaron a 262 niñas sanas en grupos de edad de 11, 13, 15 y 17 años, mediante exámenes clínicos anuales durante tres años en los que se les midió el contenido mineral óseo corporal total y la densidad mineral ósea. Las pacientes informaron a los científicos sobre su consumo de tabaco o alcohol, así como síntomas de depresión o ansiedad.
   Los expertos hallaron que un hábito tabáquico frecuente se asoció con una tasa de densidad mineral más baja de la columna lumbar y cadera de los 11 años hasta los 19 años. Mayores síntomas depresivos se relacionaron también con una menor densidad mineral ósea de la columna lumbar en todas las edades, mientras que el consumo de alcohol no tuvo impacto en los resultados de ningún hueso.
   Los datos muestran que la masa ósea era esencialmente igual entre los participantes del estudio a los 13 años, independientemente de lo mucho o poco que fumaban las chicas, pero conforme las chicas iban creciendo, las grandes fumadoras tenían una menor tasa de acumulación de masa ósea en la cadera y la columna vertebral que las que fuman con menos frecuencia, explica Dorn Lorah, investigador principal y director de investigación en la División de Medicina del Adolescente de Niños de Cincinnati.
   Las niñas con una tasa más elevada de síntomas de depresión siguieron acumuláando hueso pero en una trayectoria ascendente más baja que las chicas con menos síntomas depresivos. No obstante, los investigadores señalaron que la muestra del estudio actual tenía una ingesta de calcio y realizaba ejercicio en unas tasas inferiores a las directrices nacionales recomendadas, por lo que consideran que los resultados no pueden generalizarse a las niñas que cumplen con esos estándares.

Una dieta inadecuada durante el embarazo predispone a la diabetes en el bebé

La calidad de la dieta materna durante la gestación es fundamental en el crecimiento fetal y en los niveles de insulina y glucosa al nacer, índices que alertan de una predisposición a padecer enfermedades como la diabetes o el síndrome metabólico, según estudio liderado por investigadores de la Universidad Complutense de Madrid y publicado en el 'European Journal of Clinical Nutrition'.

   Estudios anteriores ya apuntaban que, cuando la madre ingiere insuficientes alimentos durante el embarazo, se reduce en el feto la oferta de glucosa a otros tejidos para asegurar un aporte correcto al cerebro, lo que provoca un menor crecimiento fetal. Este mecanismo adaptativo se conoce como hipótesis del fenotipo ahorrador de Barker.
   "Sin embargo, son menos conocidos los efectos de un desequilibrio entre grasas, proteínas e hidratos de carbono, es decir, el efecto durante la gestación del consumo de dietas occidentales que se alejan del tipo mediterráneo", ha explicado a la plataforma SINC uno de los autores del estudio Francisco J. Sánchez-Muniz, investigador de la Universidad Complutense de Madrid.
   De esta forma, el nuevo trabajo, que forma parte del Estudio Mérida --una macroinvestigación que analiza diferentes parámetros de los recién nacidos y sus madres-- revela que, cuando las gestantes asimilan cantidades adecuadas de energía, sus hijos tienen un peso normal al nacer, del orden de 3,3 a 3,5 kilogramos.
   "No obstante, más de la mitad de las mujeres consumen dietas de baja calidad que aportan muchos productos de origen animal ricos en grasas saturadas y pocos hidratos de carbono procedentes de verduras o legumbres. Además, más de la tercera parte sigue un patrón lejano al de la dieta mediterránea", ha señalado Sánchez-Muniz, para quien es destacable "que las mujeres durante el embarazo no cambian la forma de comer ni la calidad de su dieta".
   Con todo, "es importante" concienciar a las madres de la importancia de comer bien durante la gestación, "con dietas equilibradas de tipo mediterráneo", ha comentado este investigador. "También urge continuar los estudios en esta misma población para conocer cómo evolucionarán en el tiempo los niños y así evitar o, al menos paliar, el desarrollo de estas enfermedades de alta prevalencia en nuestra sociedad", ha señalado.

Investigadores españoles simulan por primera vez un paso clave en la maduración del virus del sida

Bioinformáticos del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (Imim) y de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona han conseguido explicar, mediante técnicas de simulación molecular, como las nuevas partículas inertes del virus del sida se convierten en infecciosas. 

   La simulación de este paso clave en la maduración del VIH es esencial para entender su replicación y poder mejorar futuros fármacos, un hallazgo que se ha publicado en la última edición de la revista 'Pnas', han informado el Imim y la UPF en un comunicado conjunto.
   Los viriones del VIH se convierten en maduros e infecciosos a través de la acción de una proteína llamada VIH proteasa, que actúa como unas tijeras cortando la larga cadena de proteínas que forman el VIH y dejando proteínas individuales que formarán la estructura infecciosa de nuevos viriones.
   Según el coordinador del los investigadores del grupo de biofísica computacional del Imim-UPF, Gianni De Fabritiis, uno de los aspectos más intrigantes del proceso de maduración, es "cómo la 'proteína tijera' aparece por primera vez, ya que ésta también forma parte inicialmente de la larga cadena de proteínas que forman los nuevos viriones del VIH".
   Ahora, el hallazgo ha permitido demostrar que las primeras 'proteínas tijeras' se pueden cortar ellas mismas de dentro de la cadena de proteínas, mediante un software para simulaciones moleculares (ACEMD) y utilizando una tecnología llamada GPUGrid.net.

Los berrinches continuos de los niños serán considerados enfermedad mental

La Asociación Americana de Psiquiatría (APA, en sus siglas en inglés) ha modificado por primera vez en 20 años su 'Manual de diagnósticos y estadísticas de enfermedades mentales' para incluir en él nuevos trastornos, tales como la adicción a la comida o los berrinches persistentes en los niños.

   Esta publicación es uno de los manuales de referencia más influyentes para los psiquiatras y en su quinta edición, que será publicada en mayo de 2013, incluirá un total de 20 capítulos que, según la APA, estarán reestructurados basándose en una relación aparente entre los síntomas de las enfermedades.
   Entre los cambios más importantes que presentará está una nueva definición de lo que ahora será llamado trastorno del espectro autista.
   De este modo, ya no se hablará de autismo ni síndrome de Asperger, trastorno generalizado del desarrollo o trastorno desintegrativo de la infancia, sino que todos estos términos quedarán incluidos dentro del diagnóstico de trastorno del espectro autista "para ayudar de forma más precisa y consistente a diagnosticar a niños con autismo".
   Otros cambios importantes en el nuevo manual es que ahora, por primera vez, los psiquiatras reconocen la adicción a la comida como una enfermedad mental real.
   También se catalogará a partir de ahora como enfermedad mental el acaparamiento compulsivo, definición que servirá para diagnosticar a quienes tienen "una dificultad persistente de deshacerse o separarse de posesiones, sin importar su valor real".
   "La conducta a menudo tiene efectos perjudiciales, tanto emocionales como físicos, sociales, financieros e incluso legales, para el acaparador y los miembros de su familia", ha explicado a la BBC el doctor Eduardo Grande, psiquiatra y ex presidente de la Asociación Argentina de Salud Mental.
   Y también se incluye el llamado Trastorno de Desregulación Disruptiva del Estado de Ánimo (DMDD, en sus siglas en inglés) con el cual se diagnosticará a niños que "exhiben episodios frecuentes de irritabilidad y arrebatos de conducta durante tres o más veces a la semana durante más de un año".
   Esta definición ha causado amplia controversia porque, según explica, podría desembocar en el diagnóstico y medicación de los berrinches de los niños.
   En cambio, la APA afirma que con este nuevo término se espera combatir el potencial error de diagnosticar a los niños con trastorno bipolar y tratarlos innecesariamente con potentes medicamentos.
   Por otro lado, el manual ha introducido una categoría de trastornos que "necesitan ser más investigados", para incluir en ellos la adicción al juego 'on-line' o a través de Internet o las relaciones sexuales.
   Asimismo, también excluye la definición de duelo como trastorno depresivo cuando éste dura menos de dos meses después de la muerte de un ser querido.
   Sobre este punto, incluye varias notas en las que reconoce que "el duelo es un factor de estrés psicológico severo que puede precipitar un episodio depresivo grave poco después de la muerte de un ser querido".
   Y a pesar de que muchos habían pedido definir el "trastorno hipersexual", o adicción al sexo, como una enfermedad mental, el manual ha decidido excluirlo.
   Pese a estos cambios, el profesor Grande reconoce que los psiquiatras "no tienen que aferrarse al manual, porque pueden aparecer otras sintomatologías que no se encuadren dentro de los diagnósticos que éste recoge".
   "Es necesario que, como profesionales, cada psiquiatra sea consciente del paciente que trata y de saber si realmente se le puede encuadrar la enfermedad a ese paciente y no seguir sólo lo que dice el manual. Como lenguaje común es válido, pero creo que es una publicación mucho más útil para el profesional que comienza que para el que ya está formado", ha aseverado.

Una mutación genética predispone al alcoholismo en adolescentes

Los individuos con la variante del gen RASGRF-2 beben con más frecuencia a los 16 años que aquellos con ninguna variación en el gen, según una nueva investigación, publicada en 'Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS)'. El alcohol y otras drogas adictivas activan el sistema de la dopamina en el cerebro, responsable de los sentimientos de placer y recompensa, que aumentan en el caso de los inviduos con esta variación genética, según los investigadores. 

   "Encontramos que el gen RASGRF-2 juega un papel crucial en el control de cómo el alcohol estimula el cerebro para liberar dopamina y por lo tanto desencadenar la sensación de recompensa. Así que, si las personas tienen una variación genética del gen RASGRF-2, el alcohol les da un sentido más fuerte de la recompensa, haciéndolos más propensos a ser bebedores", resume el profesor Gunter Schumann, del Instituto de Psiquiatría del Kings College de Londres.
   Primero estudiaron modelos de ratones sin el gen RASGRF2 para ver cómo reaccionaban al alcohol y detectaron que la ausencia del gen RASGRF-2 estaba relacionado con una reducción significativa en la actividad de búsqueda de alcohol. Tras la ingesta de alcohol, esta falta de variación del RASGRF-2 evitaba que el cerebro liberara dopamina en el área ventral tegmental (VTA, en sus siglas en inglés) del cerebro y tuviera cualquier sentido de recompensa.
   Posteriormente, el análisis de los escáneres cerebrales de 663 niños de 14 años de edad, que todavía no habían tomado grandes cantidades de alcohol,  demostraron que los individuos con variaciones genéticas en el gen RASGRF2 tuvieron mayor activación del área estriado ventral del cerebro (estrechamente vinculado a la VTA y que participa en la liberación de dopamina) al anticipar la recompensa en una tarea cognitiva.
   Esto sugiere que los individuos con una variación genética en el RASGRF-2 liberan más dopamina cuando se anticipa una recompensa y por lo tanto obtienen más placer de la experiencia. Para confirmarlo, los investigadores analizaron el comportamiento de un mismo grupo de chicos de 16 años, cuando muchos ya habían comenzado beber con regularidad, y hallaron que los individuos con la variante del RASGRF-2 bebió con más frecuencia a los 16 años que aquellos sin variación genética.
   "La identificación de factores de riesgo para el abuso de alcohol a temprana edad es importante en el diseño de las intervenciones de prevención y tratamiento de la adicción al alcohol", concluye Schumann. Los autores del estudio recuercan que el abuso de alcohol adolescente está vinculado a problemas de mala salud, desarrollo del cerebro en la vejez, riesgo de conductas (conducir ebrio, sexo sin protección) y comportamiento antisocial.

Experto apuesta por el ejercicio físico moderado pues en exceso "puede derivar en una verdadera patología"

Para el jefe de servicio de Cardiología del Hospital La Zarzuela y Hospital San Francisco de Asís, en Madrid, el doctor Enrique Asín Cardiel, el ejercicio físico moderado es útil, "pero realizar deporte en exceso puede derivar en una verdadera patología". 

"Hace falta matizar los límites entre lo fisiológico y lo patológico en el corazón del deportista, ya que ahondar en esta diferencia puede suponer prevenir muchas muertes súbitas", argumenta.
En cuanto a la conveniencia de realizar ejercicio tras haber presentado un problema cardíaco, el especialista ha afirmado que sí es recomendable, sobre todo en lo referido a enfermedad coronaria. Y en cuanto al resto de enfermedades cardíacas, siempre y cuando el paciente no presente insuficiencia cardíaca, sin duda es beneficioso el ejercicio. "Es lo que llamamos prevención secundaria y rehabilitación", matiza.
Para este experto, la gente que realiza ejercicio físico sin conocer su situación cardiovascular corre un "riesgo importante", motivo por el cual "el ejercicio físico debe ir adaptado a la situación de cada paciente".
Este experto explica que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en los países desarrollados, y, en este sentido, ha querido destacar que "el sedentarismo, los hábitos alimentarios, el exceso de peso, la grasa corporal, o la grasa abdominal, se correlacionan directamente con las enfermedades cardiovasculares, y especialmente con enfermedad coronaría, hipertensión arterial y sus complicaciones cardiovasculares, diabetes, síndrome metabólico, o insuficiencia cardiaca".
"Cuanto más progresa la Cardiología Terapéutica más importancia debemos dar a la prevención", subraya el jefe de Cardiología del H. La Zarzuela y coordinador del Simposio Internacional sobre 'Implicaciones cardiovasculares del ejercicio, el deporte y la obesidad', auspiciado por la Fundación Ramón Areces y que tendrá lugar el próximo 13 de diciembre.
Para este experto, "hay que empezar a abordar este problema en la escuela, cuando el sistema cardiovascular está sano y antes de que se dañe". 
"Lamentablemente, hoy en día el 46 por ciento de los niños sufre exceso de peso, el 16 por ciento obesidad y el 35 por ciento sobrepeso, "una situación que debe cambiar, ya que es un problema sanitario de primera magnitud", recuerda.