viernes, 8 de junio de 2012

Los tratamientos agresivos para disminuir la glucosa logran normalizar sus niveles en las personas con "prediabetes"

Los tratamientos agresivos para disminuir la glucosa logran normalizar la glucosa en personas con "prediabetes" (un estado de alto riesgo para el desarrollo de diabetes tipo 2) que experimentan un período de regulación de la glucosa normal. Además, estas personas son un 56% menos propensas a desarrollar diabetes 7 años más tarde, según un nuevo artículo presentado en las Sesiones Científicas de la Asociación Americana de la Diabetes, y publicado en 'The Lancet'.

Los hallazgos podrían tener importantes implicaciones para la prevención de la diabetes, y ser una forma efectiva de reducir la progresión de la enfermedad. En 2011, los Centros para el Control de Enfermedades estimaron que 79 millones de estadounidenses, el 35% de la población -tienen prediabetes. Cada año, aproximadamente el 11% de las personas con prediabetes desarrolla la enfermedad. Por lo tanto, estudiar nuevas estrategias de prevención en este grupo es fundamental para reducir las tasas globales de diabetes.
La investigación, realizada por el Grupo de Investigación para el Programa de Prevención de la Diabetes, en los EE.UU., utilizando datos de un programa de investigación a largo plazo que continúa examinando los resultados de los pacientes que participaron en el Programa de Prevención de la Diabetes -un estudio de más de 3.000 pacientes con prediabetes.
Si bien los análisis anteriores han demostrado que los cambios en el estilo de vida y el tratamiento farmacológico pueden reducir eficazmente la progresión de la diabetes entre las personas con prediabetes, el nuevo análisis demuestra que estos pacientes consiguieron normalizar los niveles de glucosa durante el período de estudio.
Según el autor principal, el doctor Leigh Perreault, de la Universidad de Colorado, "los resultados del presente análisis indican que lo importante es que la intervención sea precoz (cuando alguien tiene prediabetes). Este estudios pone de relieve la significativa reducción, a largo plazo, del riesgo de desarrollar diabetes, en personas con prediabetes que reciben un tratamiento agresivo para disminuir la glucosa".
Los resultados de esas investigaciones podrían cambiar sustancialmente la estrategia terapéutica de la prevención de la diabetes.

El uso escáneres cerebrales en niños puede triplicar el riesgo de cáncer

Un estudio internacional ha demostrado que exponer a un niño a la radiación nuclear de dos o tres tomografías computarizadas (TC) en la cabeza puede triplicar su riesgo de desarrollar cáncer cerebral a lo largo de su vida, según los resultados que publica en su último número la revista 'The Lancet'.

   Asimismo, la investigación también ha revelado que aquellos que se han sometido a esta prueba radiológica entre cinco y diez veces tienen el triple de riesgo de desarrollar leucemia, en comparación con quienes no se las han hecho nunca.
   Aunque el riesgo absoluto de desarrollar cáncer después de una TC aún es pequeño, los investigadores dijeron que las dosis de radiación deberían ser reducidas al mínimo posible y usar otra alternativa cuando se pueda.
   "Es bien sabido que la radiación puede causar cáncer, pero este es el primer estudio que muestra pruebas directas sobre esta relación y permite cuantificar el riesgo", según ha explicado la doctora Amy Berrington de González, del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, que ha participado en este centro junto con científicos de Reino Unido y Canadá.
   La TC es una técnica de diagnóstico que suele usarse en los niños con posibles lesiones en el cabeza, y el riesgo de cáncer proviene de la radiación ionizante utilizada con estas pruebas, ante la que los niños son más sensibles.
   En el estudio actual, los investigadores estudiaron casi a 180.000 pacientes que se habían sometido a una TC entre 1985 y 2002 en Reino Unido.
   El equipo extrajo la cantidad y tipos de TC de los registros y estimó la dosis de radiación absorbida por el cerebro y la médula espinal, para luego cruzar los datos con los casos de cáncer y muertes del Registro Nacional del Servicio de Salud del Reino Unido entre 1985 y 2008.
   Un total de 74 de 178.604 pacientes fueron diagnosticados con leucemia y 135 de 176.587 fueron diagnosticados con cáncer cerebral.
   Por su parte, David Spiegelhalter, experto en comprensión del riesgo de la Cambridge University (R.Unido) que no participó directamente de la investigación, dijo que los resultados deben ser puestos en contexto.
   "Este estudio sugiere que hay alrededor de una de cada 10.000 posibilidades de que una persona joven desarrolle leucemia por una TC en los próximos 10 años", señaló en un comentario, recordando que "aunque esto es importante, quizá una TC puede ser aún más importante por la evaluación que debe realizarse" agregó Spiegelhalter.
   Y es que actualmente la alternativa a esta técnica son los ultrasonidos que, aunque no incluyen radiación, no son tan precisos.

El estilo de vida compite con los genes para llegar a los 100

La genética puede ser el mejor pronosticador de la longevidad, pero los hábitos de vida, incluidos factores como estar conectado con familia y amigos, son claves para llegar a los cien años, según un sondeo conocido esta semana.

Más del 80 por ciento de cien hombres y mujeres que han llegado a centenarios en Estados Unidos dijeron que estar socialmente activos les había ayudado, y un número similar de 'baby boomers' cree que eso les ayudará a cumplir cien años.
"Científicamente, sabemos que la fórmula, el mejor pronosticador, de cuánto vivirá alguien ha sido cuánto han vivido sus parientes inmediatos, así que sabemos que la genética es un factor importante", dijo la doctora Rhonda Randall, jefe médico de UnitedHealthcare, que realizó la encuesta.
"Pero estamos viendo cada vez más que los hábitos de vida - el ejercicio físico, la dieta, estar comprometido, tener una finalidad social - se está volviendo una influencia cada vez mayor", dijo en una entrevista.
Al igual que sus hijos y nietos, los centenarios han recurrido a Internet para estar conectados.
Aproximadamente una cuarta parte de los mayores de cien años preguntados en la encuesta telefónica dijeron que tenían acceso a la web, el doble de hace apenas un año. De ellos, más de la mitad usan Internet para ver y compartir fotos, y casi el mismo número envía y recibe correos y busca información por Internet.
"Se están dando cuenta de que las claves de la longevidad tienen que ver con la salud física, mental y emocional", dijo Randall.
Aproximadamente el 10 por ciento de quienes tienen más de cien años han visto un video en YouTube o escuchado música en un iPod, según el sondeo, pero sólo el 3 por ciento ha usado Facebook, y uno de ellos había accedido a Twitter.
Los centenarios, junto con el grupo de más de 65 años, son el segmento de población que más crece en Estados Unidos. Más de 10.000 'baby boomers' cumplirán 65 años cada día en la próxima década, según el censo de ese país.
Los centenarios pueden enseñar alguna cosa a los más jóvenes en lo que se refiere a cuestiones de salud. Más del 80 por ciento de la generación más vieja dice que comen de forma equilibrada, frente al 68 por ciento de los 'baby boomers'.
El 71 por ciento de los encuestados dijeron dormir ocho horas o más, pero sólo el 38 por ciento de la generación del 'baby boom' duerme tanto.

UNICEF reclama medidas para aumentar la supervivencia infantil

Un nuevo informe del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha puesto de manifiesto las diferencias existentes entre países desarrollados y en desarrollo en cuanto a la supervivencia infantil a diarrea y neumonía, las dos principales causas de mortalidad de niños menores de cinco años, y asegura que se trata de una "gran oportunidad" para reducir la "brecha" actual.

   "La neumonía y la diarrea son las enfermedades que golpean con más dureza a los países pobres", ha recordado Anthony Lake, director ejecutivo de UNICEF, quien ha destacado que mediante intervenciones "sencillas" se podría aumentar su supervivencia en los países menos desarrollados "para que cada niño tenga una oportunidad justa para crecer y prosperar".
   La neumonía y la diarrea son la causa de cerca de un tercio de las muertes de niños menores de cinco años, y cada año se contabilizan más de 2 millones de fallecimientos. El problema, ha avanzado UNICEF, es que el 90 por ciento de las muertes por neumonía y diarrea se producen en el África subsahariana y en el sur de Asia.
   La prevención y el tratamiento para ambas enfermedades incluyen medidas tan básicas como incrementar la cobertura de vacunas, fomentar la lactancia materna y el lavado de manos, la ampliación del acceso al agua potable, la distribución de sales de rehidratación oral a los niños con diarrea y el suministro de antibióticos a los niños con neumonía bacteriana.
   De hecho, el informe avanza que las vidas de más de 2 millones de niños podrían salvarse en los 75 países con mayor carga de mortalidad si toda la población de niños menores de cinco años recibiera la cobertura ya alcanzada por el 20 por ciento de los países ricos.
   UNICEF lamenta que sólo un tercio de los niños afectados reciba antibióticos o sales de rehidratación oral, lo que supone "un fracaso en la aplicación de una de las intervenciones de supervivencia infantil más probadas y eficaces".
   Asimismo, ha recordado que una de las formas más simples y efectivas para proteger a los bebés de las enfermedades es la lactancia materna, algo que no se consigue como demuestra el hecho de que menos del 40 por ciento de los niños menores de seis meses recibe leche materna de forma exclusiva, privándolos por tanto de esta protección crucial.
   En lo que respecta a las vacunas, este organismo de Naciones Unidas ha reconocido que ya existen medios para la inmunización de ambas enfermedades pero, pese a que la mayoría de los países de bajos ingresos han introducido la vacuna contra el Haemophilus influenza tipo B (Hib) y las vacunas antineumocócicas están cada vez más disponibles, todavía necesitan introducirlas en los programas rutinarios de vacunación.
   El informe de UNICEF se publica poco antes de la puesta en marcha de una iniciativa global sobre supervivencia infantil que se va a celebrar en Washington (Estados Unidos) los días 14 y 15 de junio, convocada por los gobiernos de Etiopía, India y Estados Unidos, y que contará con 700 líderes y expertos mundiales del Gobierno, el sector privado y la sociedad civil.

Cada año se detectan en España 3.500 casos nuevos tumores cerebrales

  Cada año se detectan en España 3.500 casos nuevos de cáncer cerebral, una enfermedad que afecta a 7,5 personas de cada 100 mil habitantes, lo que supone el 2 por ciento de los cánceres en adulto y cerca de un 15 por ciento en menores de 15 años, según han explicado expertos con motivo del Día Internacional de los Tumores Cerebrales, que se celebra hoy viernes por primera vez en España. 

   La incidencia de los tumores cerebrales en la edad pediátrica es de aproximadamente entre 30 a 45 casos nuevos por cada millón de habitantes al año. "Es la segunda causa de enfermedad oncológica en este grupo de edad tras las leucemias", ha señalado el doctor Hinojosa Mena-Bernal, jefe de la sección de tumores cerebrales infantiles del Hospital 12 de octubre.
   La supervivencia de estos tumores --los más frecuentes son el glioma, seguido del meduloblastoma y el ependimoma-- es de aproximadamente el 66 por ciento tras los cinco años del diagnóstico. Y los principales síntomas de estas patologías son los focales --crisis epilépticas y déficit neurológicos- y generales -hipertensión intracraneal, dolor de cabeza, nauseas y vómitos-.
   El oncólogo Pedro Pérez Segura, responsable del Consejo Genético del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, ha asegurado este viernes que "los avances que se han producido en los tumores cerebrales durante los últimos 5 ó 10 años no se ha dado en ninguna otra patología oncológica".
   "En España, las tasas de supervivencia de estos tumores son las mismas o mayores que en otros sitios", ha recalcado este experto, quien ha querido lanzar el mensaje de "optimismo" y "esperanza" a la sociedad de que, en la actualidad, los tumores cerebrales tienen un buen pronóstico. "Hay que quitar de la cabeza que no se puede hacer nada más allá de la cirugía", ha insistido.
   Los avances moleculares han sido uno de los últimos logros en este campo. Así, este oncólogo ha explicado que, hace varios años, se pensaba que todos "los gliomas (un tipo de tumor cerebral) eran iguales" y, en estos momentos, se sabe que existen diferentes variantes, lo que permite seleccionar al paciente "el mejor tratamiento".
   De igual modo, ha resaltado que, en la actualidad, los pacientes están más concienciados e informados sobre esta patología, de tal forma que son ellos mismos los que investigan cuál es el mejor centro al que acudir a tratarse. "La gente ha perdido el temor al tumor cerebral. Los pacientes lo encajan de manera distinta", ha añadido.
   No obstante, para seguir avanzando y para que las personas que se enfrenten a un tumor cerebral -- cada año se detectan en España 3.500 casos nuevos-- obtengan el mejor pronóstico es necesario invertir en tecnología. En palabras del doctor Hinojosa Mena-Bernal, "la supervivencia de los pacientes mejora cuanto mejor sea el trabajo de los cirujanos. Por ello, es necesario invertir en tecnología".
   En relación a si los recortes económicos van influir a la hora de renovar los equipos con los que trabajan los profesionales sanitarios, este experto ha reconocido que sí lo van a hacer pero ha matizado que este hecho no va a tener impacto alguno en el tratamiento del paciente, puesto que el pronóstico depende del trabajo conjunto de todas las disciplinas.
   Por su parte, el jefe del Servicio de Neurocirugía del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, Juan Antonio Barcia-Albacar, ha lamentado que la "renovación tecnológica" se haya detenido, incluso, antes de la crisis económica. No obstante, "la forma de hacer las cosas en los hospitales no va a sufrir de forma esencial", ha precisado.
   En este sentido, ha aclarado que, a pesar de que España no se equipare en tecnología con otros países, en lo que se refiere a técnica es como "los mejores del mundo". Además, a su juicio, "el cáncer no se cura con la tecnología pero sí con la técnica".
   Mientras, el presidente de la Asociación de Afectados por los Tumores Cerebrales en España (ASATE), Oscar Prieto Martínez, ha apostado por actualizar el equipamiento tecnológico ya que, de esta manera, se va a mejorar la estancia hospitalaria y la calidad de vida de los pacientes y se va a reducir el gasto sanitario.
   Por otro lado, este experto ha trasmitido las dudas que tienen los pacientes una vez que les diagnostican la enfermedad, entre las que se encuentra cuál es el mejor centro en el que tratarse. Igualmente, Barcia-Albacar ha explicado que, si bien existen muchos hospitales que realizan este tipo de operaciones, lo mejor es acudir a "centros de excelencia" en los que existen tanto dotación tecnológica como experiencia profesional acumulada.
   A parte de la tecnología y de los centros de referencia, Pérez Segura ha resaltado la importancia que cobran las Unidades de Recuperación Funcional y, en este sentido, ha lamentado que, en estos momentos, estas secciones estén "infradotadas".
   De la misma opinión es Prieto Martínez, para quien otro tipo de accidentes, como los deportivos, tienen una mayor atención en el campo de la rehabilitación que estos tumores. En su opinión, la rehabilitación proporciona al paciente un "avance impresionante", que permite una rápida recuperación que, a su vez, posibilita su pronta reinserción laboral.
   En este sentido, el representante de los pacientes ha denunciado el estigma social al que tienen que enfrentarse todavía este tipo de pacientes a la hora de volver a su puesto de trabajo. También, el que hacen muchas compañías de seguros, negando sus servicios a las personas que padecen algún tumor cerebral.
   Con todo, los expertos han coincidido en la importancia de concienciar a la sociedad de que este tipo de tumores reciben los mismos esfuerzos terapéuticos que el resto y de que se hacen al máximo nivel.

Un estudio advierte del "mito" de beber dos litros de agua al día

  Investigadores de la Universidad de La Trobe de Melbourne, en Australia, aseguran que la recomendación de beber dos litros de agua es un "mito" o una "malinterpretación" ya que, en realidad, tal sugerencia engloba a todo tipo de líquidos y no específicamente agua.

   Así se desprende de un artículo que publica en la revista 'Australian and New Zealand Journal of Public Health', en la que se anima a los ciudadanos a consumir otras bebidas como té, café o zumos para llegar a este cupo.
   "Estamos bebiendo inútilmente demasiada agua, principalmente agua embotellada", ha reconocido el profesor Spero Tsindos, del Departamento de Dietética y Nutrición Humana de la Universidad de La Trobe, que destacado en una entrevista a la BBC, que "hace treinta años no se veía una botella de plástico por ningún lado y ahora parecen accesorios de moda".
   Este científico quería investigar cuántos líquidos bebe la gente normalmente y si realmente necesitamos suplementar nuestro consumo con dos litros adicionales diarios.
   Tras revisar el Sondeo Nacional de Nutrición de Australia --que desde 1995 ha seguido los hábitos alimenticios de los australianos-- encontró que las mujeres bebían en promedio 2,8 litros de líquidos y los hombres 3,4 litros diarios.
   Esto incluía los líquidos que se encuentran en verduras, frutas y otros alimentos. Pero, cuando se tuvieron en cuenta sólo las bebidas, observaron que el consumo diario "óptimo" era de 2,6 litros en los hombres y 2,1 litros en las mujeres.
   Esto quiere decir, señala este experto, que si suplementamos nuestro consumo diario de líquidos con los dos litros adicionales que recomiendan los expertos, "estaríamos bebiendo demasiada agua", ha señalado el profesor Tsindos.
   Según Tsindos, sentarse a beber una cantidad enorme de agua para alcanzar el consumo recomendado diario es "inútil" porque el agua no se distribuye donde es necesario en el organismo. "Esto no tiene ningún efecto de hidratación, todo lo que el agua hace es diluirse en la orina", ha señalado.
   "No estoy diciendo que no se beba agua. Lo que digo es que la necesidad de beber dos litros de agua regularmente es un mito total, y si uno tiene sed, se puede recurrir a otras bebidas", ha explicado.
   Y es que otras bebidas, como el té y el café, a pesar de su contenido de cafeína, "no conducen a la deshidratación y contribuyen a las necesidades de fluidos diarios de una persona".

Identifican un receptor cerebral que controla el apetito

Investigadores del Centro Médico de la Universidad de Columbia han identificado un receptor cerebral que parece desempeñar un papel central en la regulación del apetito. Los resultados, publicados en 'Cell', podrían conducir al desarrollo de nuevos medicamentos para prevenir o tratar la obesidad.

   "Hemos identificado un receptor que está íntimamente involucrado en la regulación de la ingesta de alimentos", explica el líder del estudio, Domenico Accili, profesor de Medicina en Columbia. Accili añade que, "lo especialmente alentador es que este receptor pertenece a una clase de receptores que resultan ser buenos objetivos para el desarrollo de fármacos; de hecho, varios medicamentos existentes ya parecen interactuar con este receptor".
   En su búsqueda de nuevas terapias para la obesidad, los científicos se han centrado en el hipotálamo, una pequeña estructura del cerebro que regula el apetito. Numerosos estudios sugieren que este mecanismo de regulación se concentra en las neuronas que expresan un neuropéptido -o modulador cerebral- llamado AgRP. Sin embargo, hasta ahora se desconocían los factores específicos que influyen en la expresión de AgRP.
   Los investigadores hallaron nuevas pistas sobre el control del apetito mediante el seguimiento de las acciones de la insulina y la leptina. Ambas hormonas están involucradas en el mantenimiento del equilibrio energético del cuerpo, y ambas  inhiben el AgRP.
   "Sorprendentemente, el bloqueo de la vía de señalización de la insulina, o la de la leptina, tuvo poco efecto sobre el apetito", afirma Accili, quien agrega que "por lo tanto, pensamos que ambas vías debían ser bloqueadas de forma simultánea con el fin de influir en el apetito".
   Para probar su hipótesis, los investigadores crearon una cepa de ratones cuyas neuronas de AgRP carecían de una proteína que es parte una integral de la señalización de la insulina y la leptina. Como los investigadores pensaban, la eliminación de esta proteína -llamada Fox01- tuvo un profundo efecto sobre el apetito de los animales.
   "Los ratones sin Fox01 comieron menos, y eran más delgados, que los ratones normales", afirma el coautor Hongxia Ren, quien añade que, "además, los ratones con deficiencia de Fox01 mostraban un mejor equilibrio de la glucosa, y una mayor sensibilidad a la leptina y la insulina -signos de un metabolismo saludable".
   Dado que Fox01 es una diana farmacológica pobre, los investigadores buscaron otras formas para inhibir la acción de esta proteína. Así, mediante el perfil de expresión génica, los científicos encontraron un gen (Gpr17) que se expresa altamente en los ratones con neuronas de AgRP normales, pero se desactiva en ratones con deficiencia de Fox01.
   Para confirmar que el receptor está implicado en el control del apetito, los investigadores inyectaron un activador de Gpr17 en ratones normales, aumentando su apetito. A la inversa, cuando a los ratones se les administró un inhibidor de Gpr17, su apetito disminuyó.
   Según Accili, hay varias razones por las que Gpr17, que también se encuentra en los seres humanos, sería un buen objetivo para crear medicamentos contra la obesidad.