viernes, 23 de marzo de 2012

Casi el 5% de los niños españoles está en estado de malnutrición

Casi el 5 por ciento de los niños españoles está en estado de malnutrición, tal y como se ha afirmado en base a los datos del estudio 'Desnutrición Hospitalaria Pediátrica Española' (DHOSPE) durante las VII Jornadas de Formación de Residentes de Pediatría organizadas por el Instituto de Nutrición Infantil Hero Baby.

   El trabajo de investigación, que fue realizado el año pasado pero que ha sido revelado ahora, también arroja el dato de que el riesgo de malnutrición "se eleva a casi el 30 por ciento" en el caso de los niños que ingresan en los hospitales españoles, explican los responsables del mismo. En cuanto a los menores atendidos en las consultas de pediatría de Atención Primaria, el porcentaje alcanza "entre el 10 y el 30 por ciento", confirman.
   Para los expertos, la coyuntura actual está producida "por el aumento de las bolsas de pobreza y desempleo en nuestro país y por la falta de conocimientos nutricionales de la población en general". Por ello, señalan que la iniciativa del Instituto de Nutrición Infantil Hero Baby, en colaboración con la Asociación Española de Pediatría desarrollada en Murcia "es muy importante para la divulgación de estas cifras".
   El estudio DOSPHE, que se ha efectuado en más de 60 hospitales españoles con una muestra de más de 1.200 niños de hasta 18 años, ha servido para poner de relieve la relevancia de esta situación. Para los especialistas presentes en las jornadas, un niño puede considerarse malnutrido "cuando su desarrollo normal se ralentiza".
   Para ejemplificarlo, advierten que "se puede afirmar que un niño está en riesgo cuando transcurren 4 semanas sin aumento de peso". Además, derivan al 'Índice Waterlow' para conocer si un menor se encuentra en un estado de buena nutrición o no.
   Éstas y otras recomendaciones han sido ofrecidas a los residentes de pediatría, que han recibido formación complementaria e información sobre los avances acaecidos en "diagnóstico prenatal, enfermedades del tracto respiratorio y la denominada pubertad precoz", concluyen los especialistas.

Descubren nuevas funciones en las regiones del cerebro responsables de ver el movimiento

Científicos de Tubinga, en Alemania, han descubierto nuevas funciones en las regiones del cerebro responsables de ver el movimiento, publicando sus hallazgos en la revista 'Neuron'. 

   Con la ayuda de resonancia magnética funcional (fMRI), los científicos del Centro de Werner Reichardt de Neurociencia Integrativa, y el Instituto Max Planck para la Cibernética Biológica, en Tubinga, han identificado dos áreas del cerebro que comparan los movimientos del ojo con los movimientos visuales proyectados en la retina, para percibir correctamente los objetos en movimiento.
   Las dos áreas del cerebro mencionadas son especialmente buenas reaccionando a los movimientos externos, incluso durante los movimientos oculares, y son conocidas como V3A y V6 -se encuentran en la mitad superior de la parte posterior del cerebro. El área V3A muestra un alto grado de integración: reacciona a los movimientos que nos rodean, independientemente de si podemos o no seguir el objeto en movimiento con los ojos; pero, sin embargo, no reacciona a los movimientos visuales en la retina cuando los movimientos oculares que producen.
   Por otro lado, el área V6 tiene características similares y, además, puede realizar estas funciones cuando nos estamos moviendo; los cálculos que el cerebro tiene que realizar son más complicados en este caso: el movimiento tridimensional se superpone a los movimientos laterales de dos dimensiones, causados ??por los movimientos oculares.
   Los científicos Elvira Fischer y Andreas Bartels, del Centro de Werner Reichardt de Neurociencia Integrativa y el Instituto Max Planck de Cibernética Biológica, han investigado estas áreas con la ayuda de la resonancia magnética funcional (un procedimiento que puede medir la actividad cerebral sobre la base de los cambios locales en el flujo sanguíneo y el consumo de oxígeno).
   Los participantes en el estudio observaron varios escenarios visuales, durante la exploración por fMRI. Por ejemplo, tuvieron que seguir con los ojos un pequeño punto mientras éste se movía a través de una pantalla, de un lado a otro. El fondo del modelo se encontraba estacionario, o se movía a distintas velocidades más lentas, unas veces, y otras, más rápido, que la misma velocidad que el punto. En otras ocasiones, el punto era estacionario, mientras que sólo se movía el fondo.
   En un total de seis experimentos, los científicos midieron la actividad cerebral en más de una docena de escenarios; siendo capaces de descubrir que V3A y V6, a diferencia de otras áreas visuales del cerebro, tienen una pronunciada habilidad para comparar los movimientos de los ojos con las señales visuales en la retina.
   Ya se trate de nuestro propio movimiento, o de algo más en nuestro entorno, éste es un proceso sobre el que rara vez pensamos, ya que en el nivel subconsciente de nuestro cerebro calcula constantemente y corrige nuestra impresión visual. De hecho, los pacientes que han perdido la capacidad de integrar los movimientos en su entorno con los movimientos de sus ojos, no pueden reconocer qué es lo que, en última instancia, se está moviendo: el entorno o ellos mismos. Estudios como éste nos permiten dar un paso más hacia la comprensión de las causas de estas enfermedades.

Desarrollan una nueva prueba para predecir ataques cardiacos

Los nuevos hallazgos de un estudio de investigación sin precedentes, dirigido por el Instituto de Ciencia Traslacional Scripps (STSI, por sus siglas en inglés), muestran que una prometedora prueba de sangre puede ser útil para ayudar a los médicos a predecir quién está en riesgo de sufrir un inminente ataque al corazón. 

   Los resultados del estudio, titulado 'Caracterización de las células endoteliales circulantes en el infarto agudo de miocardio', han sido publicados en 'Science Translational Medicine'. La investigación concluye que las células endoteliales circulantes (CEC) de pacientes que han sufrido un ataque cardíaco, son anormalmente grandes y deformes y, a menudo, contienen múltiples núcleos, lo que indica que las CEC son prometedores biomarcadores para la predicción de la ruptura de la placa arterial.
   "La capacidad de diagnosticar un ataque al corazón inminente ha sido considerado como el santo grial de la medicina cardiovascular", afirma el doctor Eric Topol, principal investigador del estudio y director del STSI. Topol explica que "esta ha sido una gran colaboración de dos instituciones en el área de la investigación, tres sistemas de atención a la salud en San Diego, y una industria líder en ciencias de la vida, que se ha traducido en un importante descubrimiento, que podría ayudar a cambiar el futuro de la medicina cardiovascular".
   En el estudio participaron 50 pacientes que acudieron a los servicios de urgencias, con ataques al corazón, de cuatro hospitales de cuidados agudos en San Diego. Usando diferentes plataformas de aislamiento de células, incluyendo el CellSearch System, de Veridex, los investigadores observaron que los recuentos de las CEC, y las características estructurales de las células, se habían alterado drásticamente debido al ataque al corazón, en comparación con el grupo control sano.
   Según Mark Connelly, investigador en Veridex, "CellSearch ha demostrado ser una poderosa herramienta para la investigación oncológica, y el cuidado de los pacientes con cáncer metastásico. Además, este estudio pone de relieve su valor en la captura precisa de células raras y su análisis, en áreas más allá de la oncología".
   El estudio fue co-escrito por los médicos y científicos del STSI; Veridex, LLC (una compañía de Johnson & Johnson); Palomar Health; y Sharp HealthCare. La financiación provino de una donación de 2 millones de dólares por parte de los Institutos Nacionales de Salud de EE.UU.
   Los resultados son significativos, ya que más de 2,5 millones de personas en Estados Unidos han sufrido un ataque cardíaco o accidente cerebrovascular isquémico, como resultado de una enfermedad coronaria obstructiva.
"Esperamos que esta prueba pueda ser desarrollada para su uso comercial en los próximos dos años", afirma Raghava Gollapudi, investigador en  Sharp HealthCare, quien concluye que "esta prueba es ideal para realizarse en una sala de urgencias, con el fin de determinar si un paciente está en la cúspide de un ataque al corazón, o a punto de experimentar uno en el próximo par de semanas".