Los niveles bajos de glucemia son igual de peligrosos que la
hiperglucemia, advierte el profesor Antonio Ceriello, del Instituto de
Investigaciones Médicas August Pi i Sunyer de Barcelona (IDIBAPS), quien
ha participado en el seminario 'Hot Challenges in Diabetes', impulsado
por la Alianza Boehringer Lilly, celebrado en Barcelona.
Este experto ha apuntado a la hipoglucemia como factor
independiente de riesgo cardiovascular. En sus palabras, se trata de una
tendencia de investigación novedosa que relaciona las disminuciones de
la glucemia con una mayor probabilidad de sufrir ateroesclerosis. "En mi
época de estudiante me enseñaron los efectos negativos de la
hiperglucemia, pero ahora sé que los niveles bajos de glucosa también
son peligrosos", ha precisado Ceriello.
En este sentido, el doctor Francisco Javier Ampudia-Blasco,
endocrinólogo y médico adjunto del Hospital Clínico Universitario de
Valencia, ha señalado que, "en un corazón vulnerable, como puede ser el
de un paciente con diabetes de tipo 2, una hipoglucemia puede ser
realmente peligrosa. Si a esto le añadimos que algunas hipoglucemias son
silentes, es decir, el paciente no reconoce los síntomas, nos
encontramos ante una situación de enorme riesgo", ha argumentado.
En este punto, Ceriello también ha relacionado la hipoglucemia con
el 'síndrome de muerte en la cama' que suele darse en adultos jóvenes
con diabetes tipo 1, y ha advertido que es importante prestar atención a
la manera cómo el paciente se recupera de las disminuciones de glucosa.
"Si se pasa de una hipoglucemia a una hiperglucemia, el daño
cardiovascular que se produce es más grave que si va seguida de una
normoglucemia", ha señalado.
Por otro lado, durante el encuentro, se ha reconocido el efecto de
la terapia con incretinas sobre la función del corazón y de los vasos
sanguíneos. "Existen cada vez datos más numerosos que apoyan que este
tipo de terapias pueden tener un rol importante en la disminución de la
función endotelial. Se ha visto, además, cómo mejoran la contractilidad y
la perfusión de los vasos sanguíneos a nivel cardíaco", ha señalado
Ampudia-Blasco.