MADRID.- Nectome ha desarrollado una tecnología de embalsamamiento a
través de la que es capaz de preservar un cerebro humano a nivel
nanométrico durante un largo periodo de tiempo. Para ello, el órgano
tiene que estar fresco, por lo que está pensado para ser utilizado con
personas en estado terminal, que tendrán que someterse a eutanasia.
Nectome
ha asegurado que es capaz de preservar cerebros humanos a nivel
nanométrico a través de un proceso tecnológico de embalsamamiento, que
permitiría almacenar y subir a la nube sus pensamientos.
Según
ha explicado el portal MIT Technology Review, el objetivo de la
compañía es utilizar una solución química para conservar el cuerpo
humano durante cientos o miles de años en un estado similar al cristal.
En un futuro, los técnicos serían capaces de escanear el cerebro
preservado y reactivarlo a través de un proceso informático.
El
principal requisito es que el cerebro tiene que estar fresco. La
startup ha considerado que el mejor método para conservar el órgano
consiste en conectar a personas con enfermedades terminales a una
máquina de corazón y pulmón mientras estas están todavía vivas. De esta
forma, conseguirían bombear sus productos de embalsamamiento a las
arterias carótidas de sus cuellos.
Dado que este proceso
requiere que el usuario se someta al proceso de eutanasia, la compañía
ha consultado con abogados especializados en la ley específica vigente
en California (Estados Unidos), y entiende que su servicio es legal, al
menos en Estados Unidos.
Según el MIT Technology Review,
la compañía recibió un premio de 80.000 dólares tras haber preservado
el cerebro de un cerdo, consiguiendo que cada una de sus sinapsis
pudiese ser vista empleando un microscopio de electrones. Por el
momento, no es capaz de demostrar que los recuerdos persisten en el
tejido muerto.
Nectome ha invitado a aquellos interesados
en convertirse en futuros usuarios a unirse a una lista de espera a
cambio de un depósito de unos 8.000 euros, reembolsable en caso de
cambio de idea. Por el momento, 25 personas han realizado esta
aportación económica, según ha compartido la compañía.
El
método creado por McIntyre ha sido desarrollado en base a la
combinación del embalsamamiento con la criogenización. Gracias a ambas
técnicas, ha sido capaz de preservar un cerebro completo a nivel
nanométrico, incluido el conectoma, que es el conjunto de todas las
sinapsis que conecta a sus neuronas. Previsiblemente, un mapa del
conectoma sería la base para poder recrear la consciencia de una
persona.