lunes, 10 de octubre de 2011

El cannabis aumenta el riesgo de depresión en los pacientes genéticamente vulnerables

Fumar cannabis aumenta el riesgo de desarrollar síntomas depresivos, según una investigación realizada por el Behavioural Science Institute de la Radboud University Nijmegen, en Países Bajos, y publicada 'on line' en 'Addiction Biology'. Dos tercios de la población tienen variantes genéticas asociadas a la depresión.

   El cannabis aumenta el riesgo de desarrollar esquizofrenia y psicosis. Además, se creía que podía aumentar el riesgo de desarrollar una depresión, pero no existían evidencias claras sobre esta relación hasta la fecha.
   El investigador Roy Otten, del Behavioural Science Institute de la Radboud University Nijmegen,  sospechaba que esta falta de evidencias sobre el uso del cannabis y la depresión se debía, en parte, a que anteriores investigaciones olvidaron considerar la vulnerabilidad genética individual frente a la depresión.
   Para realizar su investigación, Otten recogió, durante un periodo de cinco años, datos de un total de 428 familias y de sus hijos adolescentes. Cada año, los niños respondían un cuestionario sobre temas como sus conductas y síntomas depresivos.
   Asimismo, se determinó en esta muestra la variante del gen de la serotonina

(5-HTT) responsable del aumento de la vulnerabilidad a desarrollar depresión. En jóvenes con una variante especial del gen, el consumo de cannabis llevó a un aumento de los síntomas depresivos.
   "El efecto es fuerte. Permanece, incluso si se tiene en cuenta otra serie de variables que podrían causar este efecto, como el tabaquismo, el alcohol, la educación, la personalidad o el estatus socioeconómico", dice.
   "Algunas personas pueden pensar que los jóvenes con una predisposición a la depresión podrían comenzar a fumar cannabis como una forma de automedicarse y que la presencia de los síntomas depresivos es, por tanto, la causa del uso del cannabis", señala.
   Sin embargo, según el investigador, "a largo plazo, definitivamente, este no es el caso". "Aunque el efecto inmediato del cannabis puede ser agradable y causar un sentimiento de euforia, a largo plazo hemos observado que el consumo de cannabis lleva a un aumento de los síntomas depresivos en los jóvenes con un genotipo específico", concluye.

El tomate previene el cáncer de próstata y mejora la piel

 La I Jornada Científica Tomate y Salud, celebrada esta semana en la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense, ha servido como marco para descubrir los poderes preventivos del tomate como en casos de enfermedades cardiovasculares. "El licopeno antioxidante del tomate ayuda a reducir el colesterol y disminuir el factor de riesgo en enfermedades cardiovasculares", asegura la doctora Montaña Cámara, Profesora Titular de Nutrición y Bromatología de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid y organizadora de la jornada.

   Esta hortaliza rica en vitamina C y de bajo valor calórico "es recomendable en la dieta, incluso en cualquiera de sus derivados como las salsas o el ketchup", afirma Cámara. La profesora también asegura que "sus beneficios son muchos y variados, dependiendo del consumo". Otra de las razones por las que la especialista en nutrición aconseja el tomate es que "contiene gran cantidad de agua, por lo que hidrata".
   El tomate, que también contiene fibra, ayuda a prevenir el cáncer de próstata ya que el licopeno antioxidante "se fija en los tejidos de la próstata y evita la presencia de células malígnas". Sin embargo, Montaña no cree que el tomate por sí solo tenga propiedades curativas. "No proporciona la curación pero apoya a los tratamientos farmacológicos", explica.
   A nivel estético el tomate también funciona haciendo el efecto de rejuvenecer la piel mejorando la calidad de la misma. El consumo de la hortaliza favorece que las capas acuosas tengan una mejor salud haciendo las funciones de una crema antiarrugas.
   La reunión sobre el tomate ha provocado "gran interés de la gente", asegura la doctora Cámara, que afirma sentirse "muy satisfecha" del transcurso de la misma. Las conferencias en la Facultad de Farmacia han versado sobre la historia y los usos del tomate, la transferencia de resultados de I+D en el sector del procesado de tomate o el conocimiento de los derivados del tomate como el Ketchup.
   Además, el acto ha contado con la presencia del doctor Howard D. Sesso, profesor de la Universidad de Harvard, que ha hablado sobre el futuro del tomate en la prevención de las enfermedades cardiovasculares. El norteamericano, en consonancia con Cámara, ha afirmado que "existen evidencias de que  el consumo de derivados del tomate, con un alto contenido en licopeno, disminuyen el riesgo de padecer dichas enfermedades". No obstante, Sesso ha ido más allá asegurando que este hecho se hace más patente en las mujeres.
   Por último, María Jesús Periago, catedrática en Nutrición y Bromatología de la Universidad de Murcia, ha expresado su opinión sobre Lycocard, un proyecto de más de cinco años de investigación en el que se han estudiado conjuntamente con empresas productoras de derivados de tomate todos aquellos factores que determinan el contenido de compuestos bioactivos en los tomates frescos, así como el efecto del tratamiento tecnológico, envasado y almacenamiento sobre los mismos. El análisis de la estabilidad de los compuestos bajo condiciones industriales ha sido el objetivo de Lycocard.