martes, 22 de enero de 2013

Nanopartículas de colesterol sintético matan el linfoma de células B

Investigadores de Northwestern Medicine han descubierto que nanopartículas de HDL sintético matan el linfoma de células B, la forma más común de la enfermedad en cultivos de células humanas e inhibe el crecimiento de células B humanas en un linfoma tumoral en ratones, según un estudio realizado por C. Shad Thaxton y Leo I. Gordon, publicado en 'Proceedings of the National Academy of Sciences'.

   Los autores de esta investigación descubrieron que el linfoma de células cancerosas tiene una comida preferida, el HDL natural, pero cuando la partícula se acopla a la célula, que en realidad se conecta y bloquea la entrada del colesterol. Privados de un nutriente esencial, la célula muere.
   "Esto tiene el potencial para convertirse eventualmente en un tratamiento no tóxico para el linfoma de células B que no implica la quimioterapia", dijo el profesor asistente de Urología en la Escuela de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern, Leo Gordon, que lo calificó de "hallazgo preliminar interesante".
   Estudios recientes han demostrado que el linfoma de células B depende de la captación de HDL natural (la lipoproteína de alta densidad), del que deriva el contenido de grasa, como el colesterol. La nanopartícula, originalmente desarrollada por Thaxton como una posible terapia para la enfermedad cardiaca, imita el tamaño, la forma y la química de la superficie de las partículas de HDL naturales, con una diferencia clave: es una partícula nanométrica con cinco medallas de oro en su núcleo.
   Así, cuando las nanopartículas se incubaron con células humanas de linfoma de células B o se usa para tratar el tumor humano en un ratón, ataca al linforma con un doble golpe. Después de adherirse a la célula del linforma, la superficie esponjosa de la partícula de oro chupa el colesterol mientras el núcleo de oro evita que la célula absorba más colesterol que el que lo hace típicamente en el núcleo de las partículas de HDL naturales.
   "Al principio, la investigación se centró en gran medida en el desarrollo de nanopartículas que pueden eliminar el colesterol de las células, especialmente aquellas involucradas en la enfermedad cardiaca", dijo Thaxton. "El trabajo sobre el linfoma ha ampliado este enfoque a la forma de las nanopartículas de HDL de impacto tanto en la retirada como la absorción de colesterol por las células. Hemos descubierto que las partículas son multitareas", destaca.
   El estudio de la Northwestern también mostró que el HDL natural no mató las células ni inhibió el crecimiento del tumor, por lo que la nanopartícula es esencial para que las células del linfoma mueran de hambre.

Asocian el uso habitual de 'Aspirina' a un mayor riesgo de ceguera

El uso habitual de 'Aspirina' parece asociarse con un mayor riesgo de degeneración macular neovascular relacionada con la edad (DMAE), que es la principal causa de ceguera en las personas mayores, y parece ser independiente de una historia de enfermedad cardiovascular y tabaquismo, según un informe publicado en 'JAMA Internal Medicine'.

   Gerald Liew, de la Universidad de Sydney (Australia), y sus colegas examinaron si el uso regular de aspirina (una o más veces por semana en el último año) se asoció con un mayor riesgo de desarrollar DMAE mediante la realización de un análisis prospectivo de los datos de un estudio realizado en Australia que incluía cuatro exámenes durante un período de 15 años. De 2.389 participantes, 257 personas (el 10,8 por ciento) eran usuarios regulares de aspirina.
   Tras 15 años de seguimiento, 63 personas (24,5 por ciento) desarrollaron degeneración macular neovascular relacionada con la edad. La incidencia acumulada de la DMAE neovascular entre los usuarios de aspirina no regulares fue del 0,8 por ciento en cinco años, un 1,6 por ciento a los 10 años, y el 3,7 por ciento en 15 años, mientras entre los usuarios de aspirina regularmente, la fue del 1,9 por ciento en cinco años, 7 por ciento a las 10 años y el 9,3 por ciento en 15 años, respectivamente.
   "El uso habitual de aspirina se asoció significativamente con un aumento en la incidencia de DMAE neovascular", aseguran los autores de la investigación, que señalan que cualquier decisión sobre si se debe suspender el tratamiento con aspirina es "compleja y debe ser individualizada", puesto que actualmente  "no hay pruebas suficientes para recomendar cambios en la práctica clínica, excepto quizás en pacientes con factores de riesgo importantes para la DMAE neovascular".

Diseñan células inmunes que resisten la infección del VIH

Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford (Estados Unidos) han descubierto una nueva manera de diseñar las células claves del sistema inmunológico para que sean resistentes a la infección por el VIH, el virus que causa el sida, según un nuevo estudio publicado en 'Molecular Therapy'. La investigación describe el uso de un tipo de tijeras moleculares que cortan y pegan una serie de genes resistentes al VIH en las células T, las células inmunes especializadas dirigidas al virus del sida.

   El genoma editado se realizó en un gen que el virus utiliza para conseguir entrar en la célula. Al desactivar un gen receptor e insertar otros genes anti-VIH, el virus bloquea la entrada de las células, lo que le impide destruir el sistema inmunológico, dijo Matthew Porteus, profesor asociado de Pediatría de la Universidad de Stanford y hematólogo y oncólogo pediátrico en el Hospital de Niños Lucile Packard.
   "Inactivamos uno de los receptores que utiliza el VIH para entrar y añadimos nuevos genes para proteger contra el VIH, por lo que tenemos varios niveles de protección, lo que llamamos apilamiento", explicó Porteus, investigador principal del estudio. A su juicio, se puede usar esta estrategia para hacer que las células resistentes a los dos tipos principales de VIH.
   En este sentido, añadió que el nuevo enfoque, una forma de terapia génica a medida, podrían acabar por sustituir el tratamiento farmacológico, en el que los pacientes tienen que tomar varios medicamentos diariamente para mantener el virus bajo control y prevenir las infecciones potencialmente mortales provocadas por el sida.
   "Proporcionar a una persona infectada con células T resistentes no curaría la infección viral. Sin embargo, se les proporcionaría un conjunto protector de células T para mantener a raya el colapso inmune que normalmente da lugar al sida", afirmó Sara Sawyer, profesora asistente de Genética Molecular y Microbiología de la Universidad de Texas en Austin (Estados Unidos) y coautora del estudio.
   Uno de los grandes retos en el tratamiento del sida es que el virus muta, por lo que los pacientes deben ser tratados con un cóctel de drogas, conocido como terapia antirretroviral de gran actividad o TARGA. Los investigadores fueron capaces de sortear el problema con un nuevo ataque en varios frentes genéticos que bloquean el VIH y esperan imitar el tratamiento a través de la manipulación genética.
   El virus entra en las células T típicamente por engancharse a una de las dos proteínas de superficie conocidas como CCR5 y CXCR4. Algunas de las últimas drogas ahora se utilizan en el tratamiento trabajan para interferir la actividad de estos receptores y hay un pequeño número de personas portadoras de una mutación en CCR5 que los hace naturalmente resistentes al VIH. Así, una paciente con leucemia y sida, ahora conocida como la paciente de Berlín, fue curada del VIH al recibir un trasplante de médula ósea de un donante que tenía el gen resistente a CCR5.
   Científicos de Sangamo BioSciences en Richmond, California (Estados Unidos), han desarrollado una técnica que utiliza una proteína que reconoce y se une al gen del receptor CCR5, genéticamente modificado para imitar la versión naturalmente resistente. Para ello, se usa una nucleasa dedos de zinc, una proteína que puede dividir piezas de ADN, para inactivar eficazmente el gen del receptor y la compañía está probando sus genes CCR5 resistentes en ensayos en fase 1 y 2 en pacientes de sida de la Universidad norteamericana de Pennsylvania.
   Los investigadores de Stanford utilizaron un enfoque similar, pero con un toque añadido: la misma nucleasa desde cero en una sección no dañada de ADN del receptor CCR5. Según explicó Porteus, se creó una ruptura en la secuencia y en mediante edición genética se pegó en tres genes conocidos para conferir resistencia al VIH y esta incorporación de los tres genes de resistencia ayudó a proteger a las células de la entrada del VIH a través tanto de CCR5 como de CXCR4. La desactivación del gen CCR5 por la nucleasa y la adición de los genes anti-VIH crearon varias capas de protección.
   El bloqueo de la infección por VIH a través de tanto de CCR5 como de CXCR4 es importante, según Porteus, ya que no se ha logrado anteriormente a través de la edición por genoma. Para probar las capacidades de las células T protectoras, los científicos han creado versiones en las que insertan una, dos y tres genes y luego se exponen a las células T al VIH.
   Estas células trillizas tenían una protección de más de 1.200 veces contra el VIH que el receptor CCR5 y más de 1.700 veces más que el receptor CXCR4, informaron los investigadores. Las células T que no habían sido alteradas sucumbieron a la infección a los 25 días.
   Entre las posibles desventajas de esta estrategia, Porteus señala que, si bien la nucleasa está diseñada para crear una ruptura en un solo lugar, posiblemente podría causar una ruptura en otro lugar, lo que llevaría al cáncer o una aberración de otra célula, además de que existe la posibilidad de que las células no toleren el cambio genético.
   Sin embargo, cree que ambos problemas son técnicamente superables, por lo que apuesta por probar la estrategia en las células T procedentes de pacientes de sida y luego pasar a la experimentación animal. Así, este investigador espera comenzar los ensayos clínicos dentro de tres a cinco años y confía en poder adaptar estas técnicas para luchar contra otras enfermedades, como la anemia de células falciformes.

Un estudio halla eje de respuesta de la piel a los rayos UVA

Un equipo de investigadores de la Universidad de Brown (Estados Unidos) ha descubierto que los melaoncitos, las células humanas de la piel, confían en un canal iónico llamado TRPA1 para permitir un flujo de iones de calcio en las células cuando se exponen a los rayos UVA. La abundancia resultante de los iones de calcio da la señal a la célula para que empiece a producir la melanina, el pigmento responsable de la respuesta de bronceado en las personas.

   El hallazgo, publicado en 'Proceedings of the National Academy of Sciences', algún día podría convertirse en una diana farmacológica para mejorar la protección. Varios experimentos descritos en el documento muestran que TRPA1, que se conoce por una serie de apariciones en otras partes del cuerpo, es un paso esencial en la respuesta de la piel a la luz UVA, según la autora principal, Elena Oancea, profesora asistente de Ciencias Médicas en el Departamento de Farmacología Molecular, Fisiología y Biotecnología de Brown.
   Así, el hallazgo refuerza la evidencia de un paralelo sorprendente entre la respuesta de la piel a la luz UVA y la forma en que el ojo detecta la luz. "Es emocionante porque confirma que este mecanismo de fototransducción es similar al encontrado en el ojo. Se compone de un receptor sensible a la luz, una cascada de señalización molecular y un canal iónico", dijo Oancea.
   En otras partes del cuerpo, TRPA1 se ha demostrado que ayuda a detectar los productos químicos picantes pero benignos, tales como los de alimentos con un sabor intenso. Oancea y el coautor Nicholas Bellono explican que la sensibilidad química de TRPA1 ofrece la posibilidad de que podría convertirse en un objetivo para los experimentos con el fin de aumentar la producción de melanina.
   "Los canales iónicos de TRPA1 están involucrados en la detección de productos químicos picantes como el cinamaldehído, wasabi y aceite de mostaza, y ahora hemos descubierto que es importante para esta respuesta de la melanina", dijo Bellono. A su juicio, hay una posibilidad de que farmacológicamente puede alterar la pigmentación a través de la regulación de este canal de iones.

El 85% de las mujeres con cáncer de mama sobrevive cinco años después

El 85% de las 3.200 mujeres que son diagnosticadas de cáncer de mama cada año en Cataluña sobrevive cinco años después del diagnóstico de la enfermedad, según se ha puesto de relieve durante una sesión informativa organizada por la Asociación Ginesta, grupo de autoayuda para mujeres que sufren esta enfermedad.

Los expertos calculan que una de cada once mujeres padecerá un cáncer de mama a lo largo de su vida, sobre todo a partir de los 50 años, aunque los programas de detección precoz que existen permiten que estos casos se diagnostiquen en la etapa temprana de la enfermedad, lo que mejora la posibilidad de curación.
La Asociación Ginesta ha recordado la importancia de garantizar el acceso rápido y equitativo a la innovación oncológica para mantener estos datos de supervivencia, dado que está previsto que el envejecimiento de la población conlleve el aumento de las cifras de cáncer.
"Ninguna crisis puede cuestionar la importancia de la detección precoz del cáncer de mama. Hablamos de una enfermedad de primer orden y, por ello, la situación económica actual no puede comprometer la calidad de los servicios", ha subrayado en un comunicado la presidenta de la entidad, Fina Santacana.
La jornada, bajo el título 'Cáncer de mama, un nombre con diferentes apellidos', ha incidido en la importancia de dotar de información completa a las mujeres enfermas sobre los avances científicos, para que éstas tomen las decisiones adecuadas durante el proceso de tratamiento.