miércoles, 3 de agosto de 2011

Desvelado por qué las dietas de ayuno no adelgazan

Ayunar para hacer dieta no es una buena opción, porque, como ya habrá notado más de uno, no comer da más hambre. Las culpables de este apetito desmesurado son unas neuronas que se devoran a sí mismas en cuanto detectan alguna señal de huelga de hambre, según muestra un estudio realizado por la Facultad de Medicina Albert Einstein de Nueva York que publica hoy la revista Cell Metabolism.
 
El cuerpo necesita extraer energía de los azúcares para realizar cualquier actividad, desde intercambiar moléculas hasta correr una maratón. Cuando se pasa hambre, el organismo utiliza fuentes de energía alternativas como las grasas o lípidos, que rompe hasta dejar un residuo que son los ácidos grasos. La presencia de estos circulando libremente por el cuerpo está asociada al ayuno.
Cuando unas neuronas llamadas AgRP (cuyo nombre deben a la hormona que producen) detectan ácidos grasos libres, lo toman como una señal de alerta del estado de hambruna; un aviso de que el organismo empieza a estar desnutrido. Estas neuronas inician entonces un proceso llamado autofagia, literalmente comerse a sí mismas. Es una especie de autocanibalismo con dos funciones.
Por un lado, la neurona que se digiere a sí misma obtiene de este proceso la energía suficiente para mantenerse. Por otro, y esta es la novedad del estudio, la autofagia libera aún más ácidos grasos (restos de los lípidos que forman las estructuras de las neuronas) que estimulan la producción de la hormona AgRP. Como la describe Ana María Cuervo, investigadora española del proyecto, "es la hormona del necesito comer". Dicho de otro modo, no comer provoca autofagia que, a su vez, incita a comer.
"No es que hacer dieta sea malo explica Rajah Singh, otro de los investigadores del proyecto, pero este estudio explica por qué es más difícil seguir una dieta radical en la que la grasa del cuerpo se moviliza de forma masiva".
Los investigadores creen que controlar la autofagia puede servir para luchar contra la obesidad. Singh explica que crearon ratones cuyas neuronas no podían autodevorarse. "Los ratones disminuyeron de peso y comían menos".
Además, la investigación da un paso más en los estudios que relacionan el envejecimiento con la obesidad. "Tenemos evidencias de que la autofagia podría disminuir con la edad, pero hay que estudiar más", concluye Singh.

Telefónica instalará 86 columnas de cardioprotección en 35 aeródromos españoles

Telefónica Telecomunicaciones Públicas (TTP), filial de Telefónica, instalará 86 columnas de cadioprotección en 35 aeropuertos españoles de la red de Aena Aeropuertos, según informó la compañía en un comunicado.

   La filial de Telefónica se ha adjudicado mediante concurso público la cardioprotección de estos 35 aeródromos y sumará las nuevas columnas a las 46 instaladas con anterioridad en el aeropuerto de Barcelona-El Prat y próximamente once en el de Palma de Mallorca, entre otros puntos.
   Dichos puestos contribuirán a combatir la muerte súbita cardiaca, un episodio cada año produce en España 25.000 fallecimientos, precisó el grupo de telecomunicaciones.
   TTP puso en marcha el servicio de cardioprotección en 2005 para combatir la muerte súbita cardiaca. El sistema cuenta con un dispositivo 'Columna de Rescate Cardiaco', que incorpora un desfibrilador y transfiere llamadas a los servicios de emergencia ante eventos cardiacos de muerte súbita. Su tecnología permite al sistema estar monitorizado a distancia de forma que siempre se puede conocer su estado.
   Telefónica dispone ya de 500 instalaciones y espacios cardioprotegidos como aeropuertos, oficinas, ayuntamientos, fábricas y hoteles. Estos espacios cardioprotegidos  están monitorizados por la red de gestión de Telefónica, quien se encargará de, una vez activado el sistema de alarma local, transferir la llamada a los servicios de emergencia.
   Mientras estos llegan, el personal no sanitario, pero formado en esta técnica, se hará cargo del desfibrilador semiautomático, un dispositivo que mediante voz le irá indicando los pasos a seguir. El aparato realiza una evaluación del estado de la víctima y, sólo en caso de parada cardiaca, aplica la descarga eléctrica necesaria para revertir dicho estado.
   La compañía se encargará igualmente del mantenimiento y supervisión integral de los dispositivos para que estén disponibles.
   Telefónica recuerda que la instalación de desfibriladores en entornos públicos comienza a ser obligatoria en algunas comunidades autónomas, que han entendido, que son "de vital importancia" para que se reduzcan las cifras de fallecidos por muerte súbita cardiaca.
   Los aeropuertos que actualmente cuentan con columnas de cardioprodección son Barcelona-El Prat, Vitoria, Álava, Albacete, Badajoz, Ibiza, Menorca, Ceuta, La Coruña, Santiago de Compostela, Gerona, Granada, San Sebastián, Huesca, Logroño, Melilla, San Javier-Murcia, Pamplona, Asturias, Fuerteventura, Lanzarote, Tenerife Norte,  La Palma, El Hierro, Santander, Sevilla, Reus, Valencia, Bilbao y Zaragoza.
   Además, se encuentran en proceso de instalación las columnas de los aeropuertos de Palma de Mallorca, Tenerife Sur, León, Salamanca, Burgos, Valladolid y Vigo.