viernes, 23 de febrero de 2018

La sanidad española no es la mejor del mundo: ocupa el puesto 18 de 35 países europeos


MADRID.- En el último informe de Euro Health Consumer Index -una organización de consumidores sueca especializada en sanidad y colaboradora de la Comisión Europea- España ha quedado en el puesto número 18 de 35 países analizados. Los parámetros para organizar la clasificación son cinco: derechos de los pacientes e información (175 puntos), listas de espera (250 puntos), resultados (300 puntos), servicios cubiertos (175 puntos) y productos farmacéuticos (100 puntos), para un total máximo de 1.000 puntos, según recoge www.libremercado.com.


Para puntuar todos los campos del estudio, se realizaron entrevistas y encuestas a más de 970 asociaciones de pacientes. Este trabajo que muestra que países como Estonia, Eslovenia, República Checa, Alemania, Luxemburgo, Noruega y Holanda, entre otros, tienen mejor sistema de salud que el español. En los tres primeros puestos de esta lista, se sitúa Holanda -que ha liderado el informe en muchas ediciones-, Suiza y Noruega.
En las páginas del estudio se puede leer cómo las causas del mal resultado de nuestro país se atribuyen a una "enorme variación regional" y a una gestión que alarga los tiempos de espera -añaden que el problema de las listas de espera no es por falta de recursos, sino por fallos de gestión-. Donde se registra la peor nota es, precisamente, en la categoría dedicada a la accesibilidad, encargada de estudiar los tiempos de espera y la gestión.
En el año 2006, Holanda estableció un modelo muy novedoso en el que se combinaba la financiación pública y la prestación de servicios privada. El Estado asegura a todos sus ciudadanos que tendrán cubiertos todos sus gastos médicos, pero son las empresas del sector las que compiten por atraer a los clientes.
Todos los ciudadanos holandeses están obligados a contratar un seguro médico -que establece un mínimo de prestaciones y ninguna compañía puede rechazar a un paciente por razones de edad o historial clínico-. Los que pagan este seguro son tres: el Gobierno, las empresas y los asegurados -los pacientes pagan en torno a 100 euros por adulto y nada por los niños-. 
En caso de no tener ingresos o tener bajos ingresos, el Estado holandés subvenciona una parte o la totalidad del seguro médico. Además, cada año los holandeses tiene que pagar una especie de copago por sus visitas al médico -unos 220 euros anuales-.
"Básicamente consiste en que el Estado se cerciora de que todos los ciudadanos están asegurados, pero luego son estos los que deciden a quién confían la provisión de los servicios".

Las lentejas previenen el riesgo de morir por cáncer, según un estudio


BARCELONA.- El consumo de legumbres, especialmente de lentejas, tiene un efecto beneficioso en la prevención de la mortalidad por cáncer, según un estudio de la Unidad de Nutrición Humana de la Universidad Rovira y Virgili (URV) y del Instituto de Investigación Sanitaria Pere Virgili.

Los investigadores han analizado a 7.212 personas con un alto riesgo de enfermedad cardiovascular a los que se ha hecho el seguimiento durante 6 años.
Los resultados del trabajo, que publica la revista «Clinical Nutrition», han revelado que, en comparación con aquellas personas con un menor consumo de legumbres totales -lentejas, garbanzos, alubias y guisantes- (13,95 gramos/día), aquellos con un consumo más alto (27,34 gramos/día ) tenían un 49 % menos de riesgo de mortalidad por cáncer.
En cuanto a las diferentes especies de legumbres, el estudio ha asociado las lentejas con un 37% menor riesgo de mortalidad por cáncer.
Por el contrario, aquellos participantes con un mayor consumo de legumbres y particularmente alubias durante el seguimiento en comparación con los que tuvieron un consumo menor, tenían un mayor riesgo de mortalidad por enfermedad cardiovascular.
Según los investigadores, el efecto protector del consumo total de legumbres y lentejas sobre el riesgo de mortalidad por cáncer se puede explicar por varios mecanismos potenciales, entre los que el más importante parece ser su alto contenido de polifenoles, predominantemente ácidos fenólicos y flavonoides.
«Además, las legumbres son una buena fuente de fibra dietética, vitamina E y B, selenio y lignanos, todos componentes dietéticos con reconocidas acciones contra el cáncer», han añadido los autores del estudio.
Según los investigadores, los resultados contradictorios en relación a la mortalidad por cáncer y enfermedad cardiovascular son importantes. En este sentido, han resaltado que los profesionales de la salud deben conocer los posibles beneficios y peligros del consumo de legumbres y, especialmente las alubias.
Los investigadores se plantean ahora hacer futuros trabajos para saber si hay algunas personas que son más propensas a los efectos del consumo de determinadas legumbres, como podrían ser los frijoles que se asociaron a un mayor riesgo de mortalidad por enfermedad cardiovascular.
El estudio ha sido dirigido por Christopher Papandreou, investigador en la Unidad de Nutrición Humana de la URV, y Jordi Salas-Salvadó, director de Nutrición en el Servicio de Medicina Interna del Hospital Sant Joan de Reus e investigador principal en el Centro de Investigación Biomédica en Red de la fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBERobn), ambos miembros del Instituto de Investigación Sanitaria Pere Virgili (IISPV).