martes, 7 de junio de 2011

Investigadores españoles abren una nueva vía de diseño de fármacos

Investigadores del Instituto de Investigación Hospital del Mar (IMIM) y la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona han conseguido reproducir y reconstruir el proceso completo de la unión de una molécula pequeña a su proteína diana, lo que abre una nueva vía en el diseño de nuevos fármacos.

   Este avance permite calcular la afinidad y el tiempo de unión del fármaco con la proteína y conocer qué interacciones establece el fármaco para actuar, permitiendo así avanzar hacia el diseño más seguro y eficiente de nuevos fármacos.
   Este innovador trabajo ayuda a ver un proceso que hasta ahora era invisible, y se basa en la captura de movimientos de moléculas pequeñas con una resolución de hasta un átomo, más allá de las capacidades técnicas actuales.
   Mediante técnicas informáticas es posible representar las moléculas en su escala atómica y reproducir sus movimientos con una alta precisión matemática.
   La comprensión de cómo se produce la unión de una proteína y una molécula, esta última provocando una respuesta biológica al ser reconocida por la primera, es de vital importancia para el diseño de nuevos medicamentos.
   A pesar del progreso de la técnica, hasta ahora, ningún estudio había proprocionado una reconstrucción completa del citado proceso.
   "El método proporciona no sólo la afinidad de unión y la cinética de la reacción, sino también información de la resolución atómica durante el proceso: sitios de unión, estados de transición y estados metaestables", ha explicado el coordinador del Laboratorio de Biofísica Computacional del Programa de Investigación en Informática Biomédica del IMIM y la UPF, Gianni de Fabritiis.
   El coordinador ha destacado que esta metodología es directamente aplicable a otros sistemas moleculares, y, por tanto, de interés general en la investigación biomédica y farmacéutica.

Retrasan la progresión de un tipo de cáncer de pulmón sin quimioterapia

Investigadores del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP) han conseguido aumentar en casi el doble la supervivencia libre de progresión de un subtipo de cáncer de pulmón gracias al uso de una terapia dirigida administrada por vía oral y sin necesidad de recurrir a la quimioterapia, evitando también la toxicidad que causan estos tratamientos.

   Así se desprende de los resultados del estudio 'Eurtac' en fase III presentados en el Congreso de la Asociación Americana de Oncología Médica (ASCO, en sus siglas en inglés), que se celebra estos días en Chicago (Estados Unidos).
   En el estudio han participado un total de 48 hospitales españoles, además de otros centros franceses e italianos, que compararon los efectos por separado de la quimioterapia con platino y el fármaco oral erlotinib, comercializado por Roche como 'Tarceva', en pacientes con cáncer de pulmón que presentaban una mutación del gen EGFR y todavía no habían recibido tratamiento.
   Esta mutación es más frecuente en los tumores de pacientes con adenocarcinoma, en mujeres y en no fumadores y, el objetivo, según han explicado sus autores, era determinar cuál es la mejor opción para que estos afectados vivan más tiempo sin que la enfermedad avance.
   De este modo, observaron que los pacientes tratados con erlotinib alcanzan una supervivencia libre de progresión media de 9,7 meses, frente a los 5,2 de la quimioterapia, lo que supone que el medicamento dirigido reduce un 63 por ciento el riesgo de que la enfermedad avance de nuevo y el paciente empeore.
   De hecho, la importancia de tales resultados fue tal que el estudio tuvo que interrumpirse antes de lo previsto al comprobarse en un análisis intermedio que ya se había conseguido el objetivo primario.
   Según ha destacado el presidente del GEPC y uno de los coordinadores del estudio, el doctor Rafael Rosell, "el estudio ha despertado muchas expectativas porque el beneficio que aporta la terapia dirigida es claramente superior a la quimioterapia que hoy día todavía se utiliza para cualquier paciente con cáncer de pulmón metastásico".
   "Esperemos que esta investigación sirva para que las autoridades europeas y estadounidenses aprueben el uso, aún pendiente, de erlotinib en primer línea para pacientes con mutación del EGFR", reconoce este experto, quien destaca además la baja toxicidad que ofrece la terapia dirigida.
   Y es que, como explica Rosell, entre los tratados con la terapia dirigida apenas hay casos de anemia, frente a la elevada incidencia con la quimioterapia.
   "El fármaco mejora el control de los síntomas (tos, disnea, fatiga), lo que hace que estos pacientes perciban mejor su calidad de vida", asevera, destacando también que esta terapia permite "la posibilidad de tomar el fármaco en su casa".
   Otro de los directores de este estudio, el jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, Luis Paz-Ares, también ha destacado la importancia de este hallazgo ya que "es la demostración de que se puede investigar la medicina personalizada en una enfermedad de tan mal pronóstico como el cáncer de pulmón avanzado".
   "Este tratamiento personalizado para un subgrupo de pacientes les proporciona más tiempo con la enfermedad controlada", apuntando a que si este tipo de ventajas se obtuviese en otros subgrupos de la enfermedad se estarían "dando más pasos hacia su cronificación".
   El buen perfil toxicidad es el que además permite, según el doctor Paz-Ares, "que los nuevos fármacos dirigidos puedan ser utilizados, no sólo como terapia de inicio, sino en mantenimiento, es decir de forma ininterrumpida hasta que la enfermedad progrese al ser mucho mejor tolerados que la quimioterapia".
   La comunidad que ha contado con más participación en este estudio ha sido Madrid, con doce centros (los hospitales 12 de Octubre, Gregorio Marañón, Ramón y Cajal, Puerta de Hierro, La Princesa, La Paz, Fundación Jiménez Díaz, Alcorcón, Clínico San Carlos, la Ruber y el de Fuenlabrada), seguida de Cataluña, con diez (con el Institut Català D'Oncologia ICO-Bellvitge, el Vall d'Hebron, el Germans Trias i Pujol, el Santa Creu i Sant Palau, el Clínic, el Mataró, el Dexeus, el Althaia de Manresa, el Josep Trueta de Girona y el Arnau de Vilanova de Lleida).
   Además de estos también tienen una amplia participación la Comunidad Valenciana, con ocho centros (los hospitales Doctor Peset, el Arnau de Vilanova, el Generak y el Complejo Hospitalario, todos en Valencia; el Universitario, el de Torrevieja y el Virgen de Lirios de Alcoy, y el General de Castellón), y Andalucía, con siete (el hospital de Valme y el Virgen del Rocío en Sevilla; el Carlos Haya y el Virgen de la Victoria de Málaga; el Virgen de las Nieves de Granada; el Reina Sofía de Cordóba, y el Complejo Hospitalario de Jaén).
   También han participado los hospitales baleares de Son Llatzer, Son Dureta y el Centro Médico Clínica Rotger, el Juan Canalejo de La Coruña, los hospitales de Lozano Blesa y Miguel Servet de Zaragoza, el Insular de Gran Canaria, Nuestra Señora de Candelaria de Tenerife, el Valdecilla de Santander, el de las Cruces de Bilbao, el Donostia de San Sebastían y el San Millán-San Pedro de La Rioja.

La malaria es la enfermedad importada en España con mayor potencial de mortalidad

Médicos expertos en el tratamiento de la malaria, participantes en la edición número 15 del Congreso Nacional de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, que este domingo se ha clausurado en Málaga, han señalado que la malaria es la enfermedad importada en España con mayor potencialidad de gravedad y mortalidad.

   La malaria está siendo "cada vez más reducida" en sus ámbitos geográficos, con "eficaces progresos" en Asia y en América Latina, pero, a pesar de ello, los doctores José Antonio Pérez y Joaquím Gascón, de los hospitales Ramón y Cajal, de Madrid, y del Clinic, de Barcelona, respectivamente, han mostrado su preocupación por "la banalidad con la que esta grave enfermedad está siendo objeto en la mayoría de los viajeros --inmigrantes, turistas, diplomáticos, cooperantes, etcétera--.
   En la actualidad, han señalado, un mínimo de 500 casos al año de malaria se vienen diagnosticando en España, si bien esta cifra tiene "un escaso" rigor ya que el sistema de registro de enfermedades de declaración obligatoria (EDO) en el sistema sanitario no recoge la totalidad de las incidencias al emplearse una metodología registral pasiva para los facultativos.
   De cada 1.000 diagnósticos, la mortalidad alcanza a cuatro afectados, siendo los casos graves en torno al 12 por ciento, de los cuales uno de cada cuatro enfermos fallece. Los lugares donde se advierten más malaria son Madrid y Barcelona, ya que en estas grandes capitales se dan grandes tránsitos, existe una mayor población y concentración de inmigrantes.
   Los facultativos Pérez y Gascón han puesto de manifiesto "el buen" nivel asistencial de la red pública provincial española de atención al viajero, "muy superior a las existentes en el resto de Europa", la cual facilita de manera gratuita toda la información necesaria para prevenir la afección de este tipo de patologías importadas.
   Por ello, han incidido en que los viajeros, especialmente con destino a los países del África subsahariana, aumenten las medidas preventivas para evitar esta enfermedad tropical. "El mosquito que porta la malaria no entiende de fronteras y todas las medidas profilácticas que se adopten serán fundamentales para garantizar la prevención", ha manifestado el doctor Pérez, quien ha apuntado que esta prevención ha de ser tenida en cuenta por todos: niños y adultos, hombres y mujeres, etcétera.
   Igualmente, los expertos han hecho hincapié en la tarea profesional de los médicos de atención primaria para concienciar a la población de cara a los viajes que pueda emprender a países de riesgo, así como la labor de información adecuada de las agencias de viaje a la hora de gestionar trayectos o estancias turísticas en zonas de cuestionadas garantías sanitarias.

La OMS alerta de que las enfermedades mentales son la primera causa de discapacidad juvenil

Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revela que el 45 por ciento de los afectados por un trastorno mental, como la depresión, el trastorno bipolar o el abuso de alcohol, tienen entre 10 y 24 años, siendo la principal causa de discapacidad entre los jóvenes de todo el mundo.

   Según alerta este organismo de Naciones Unidas en dicho trabajo que publica la revista 'The Lancet', estas enfermedades constituyen un problema de salud pública "mucho más importante" que los accidentes de tráfico o algunas enfermedades infecciosas como el VIH o la malaria, ya que "se pierden muchos años de vida debido a la discapacidad" que provocan.
   Sin embargo, lamentan los autores de dicho informe, en declaraciones a la BBC, los adolescentes y los jóvenes se han quedado relegados en los programas de salud que atienden estos problemas porque son "un grupo de edad que siempre se ha considerado sano".
   En el estudio se utilizaron los datos del Estudio Global de Enfermedades llevado a cabo por la OMS en 2004, con los que calcularon cuáles eran las causas concretas que estaban provocando una mayor discapacidad y una pérdida de años de vida en cada región.
   Los resultados mostraron que entre este grupo de edad, que suma cerca del 27 por ciento de la población mundial (unos 1.800 millones de personas), hay más enfermedades que causan discapacidad a largo plazo que enfermedades que causan muerte.
   De hecho, los investigadores encontraron que la principal causa de discapacidad tanto en hombres como mujeres son las enfermedades neuropsiquiátricas, con una incidencia del 45 por ciento de la población, siendo las más frecuentes la depresión, el abuso de alcohol, esquizofrenia y el trastorno bipolar.
   Otros eventos, principalmente los accidentes de tráfico son la segunda causa de discapacidad (12%) y en tercer lugar, con una incidencia de 10 por ciento, están las enfermedades infecciosas y parasitarias, como la malaria, el VIH y la tuberculosis.
   La región más afectada por estas discapacidades mentales es África y, según el estudio, los factores de riesgo de discapacidad comienzan entre los 15 y 19 años, mientras que en los primeros años de la adolescencia la aparición de enfermedades que causan discapacidad es "baja".
   "Las tasas aumentan drásticamente en los últimos años de la adolescencia y primeros de la edad adulta, tanto por el abuso de alcohol como por las relaciones sexuales sin protección", explica la coordinadora del estudio, Fiona Gore.
   "Otros factores de riesgo que por lo general comienzan en la adolescencia son el consumo de tabaco, la falta de actividad física, el aumento de la presión arterial, el sobrepeso y la obesidad".
   Tal y como señalan los investigadores, este estudio pone de manifiesto "la necesidad de enfocar los esfuerzos en la prevención de las enfermedades no transmisibles y en los factores de riesgo que no causan mortalidad sino discapacidad en adolescentes y jóvenes".
   Según explica Gore, los programas de salud pública de todo el mundo se centran en la salud de los niños menores de cinco años, ya que este grupo de edad sigue siendo el más vulnerable y el que representa la tasa más alta de mortalidad en el mundo.
   Sin embargo, los autores del informe también defienden que la adolescencia y la juventud son períodos "cruciales" porque en ellos se establecen los factores de riesgo de algunas enfermedades y otros problemas de salud en el futuro, como el abuso de sustancias, los embarazos no deseados y las infecciones de transmisión sexual

Cerca de un millar de madrileños comprueban su riesgo de padecer diabetes

Casi un millar de clientes de los mercados de Madrid han podido conocer su riesgo de padecer diabetes y cómo evitarla gracias a la campaña la Diabetes en Tu Barrio, según ha informado la Asociación de Diabéticos de Madrid, organizadora de la iniciativa. 

   Durante cuatro meses, el equipo de la Asociación de Diabéticos y los profesionales sanitarios de los distintos Centros Madrid Salud han recorrido los principales mercados de Madrid ofreciendo la posibilidad de hacerse un test Findrisc, un pequeño cuestionario que permite conocer el riesgo de sufrir diabetes a través de parámetros como el peso, el índice de masa corporal, el perímetro de la cintura o los antecedentes familiares.
   Además de los tests, durante la campaña se repartieron en los mercados 12.000 bolsas de pan con consejos sobre alimentación saludable, que permitirán que los clientes recuerden cuáles son las bases de una dieta equilibrada cada vez que  se acerquen a comprar.
   De los 968 tests realizados, 600 se hicieron en población entre 50 y 69 años, y de ellos el 25,3 por ciento sumaron una puntuación que indica riesgo de diabetes, un porcentaje superior al esperado, lo que indica que los mercados son un buen lugar para detectar población de riesgo.
   Los ciudadanos a los que se les detectó el riesgo alto de padecer diabetes han sido invitados a seguir un taller en su centro municipal de salud más cercano, dentro del Programa ALAS (Alimentación, Actividad física y Salud) de Madrid Salud.
   El siguiente paso para las personas interesadas en tener un seguimiento será hacerles una valoración individual y una curva de glucosa, para valorar si son prediabéticos, es decir, si tienen ya una alteración en el control de la glucemia, lo que significaría que el riesgo de padecer diabetes en un futuro es aún mayor.
   Además, se les ofrece participar en un taller de diez sesiones durante seis meses con el objetivo de conseguir hábitos de alimentación y de actividad física adecuados y, en caso necesario, perder peso, para poder reducir el riesgo de ser diabéticos.
   Se  trata de una actividad educativa en grupo con una metodología de trabajo basada en la participación activa de los participantes, para que sean conscientes de cuáles son los factores necesarios para conseguir un cambio y que adquieran compromisos para modificar hábitos de forma progresiva. Hay experiencias previas y en curso, en distintos países, que demuestran que este tipo de intervención como la que se oferta en los centros de Madrid Salud, consigue el objetivo de disminuir el riesgo de ser diabético.
   Según los resultados del estudio PREDIMERC (2007), el 6 por ciento de la población de la Comunidad de Madrid entre 30 y 74 años tiene un riesgo alto de desarrollar diabetes tipo 2 en los próximos 10 años. Esta cifra asciende al 14 por ciento en las personas de 50 a 69 años. En Madrid se estima que cerca de 88.000 personas de este grupo de edad presenta un riesgo alto de desarrollar diabetes.