sábado, 27 de abril de 2013

Hallan en células madre de placenta una vía para regenerar el hígado

  Investigadores del Grupo de Medicina Regenerativa del Instituto de Investigación del Hospital 12 de Octubre i+12, de Madrid, han llevado a cabo un estudio de laboratorio en el que evidencian que las células madre mesenquimales de placenta se transforman en hepatocitos -células del hígado-, con la posibilidad de regenerar este órgano de forma eficiente si está lesionado.

   Según ha informado el Gobierno regional, este trabajo científico, que se ha publicado en la revista 'Cytotherapy' de la Sociedad Internacional de Terapia Celular, demuestra que las células madre mesenquimales de placenta -tejido del que derivan gran parte de los órganos- cultivadas in vitro en un medio que contiene proteínas presentes de forma natural en el hígado, pueden convertirse en hepatocitos y formar una estructura -hepatosferasemejante a un pequeño hígado de apenas medio centímetro de grosor.
   Esta hepatosfera muestra actividad propia del órgano, ya que produce albúmina, una proteína que permite la distribución correcta de los líquidos corporales en el organismo. Se trata de la primera investigación que pone de manifiesto la formación de estructuras biológicas capaces de desarrollar una función hepática a partir de células madre de placenta adultas.
   Esto va a permitir en un futuro posibles aplicaciones, tanto para el trasplante hepático una vez realizado, como para el paciente que permanece en lista de espera hasta que recibe el órgano de un donante compatible. Los resultados del trabajo evidencian que el trasplante de las hepatosferas mejorará la adherencia y permanencia del injerto una vez trasplantado, favoreciendo al mismo tiempo la regeneración del hígado de forma más eficiente.
   Otra parte de la investigación también destaca que si las células madre mesenquimales de placenta se cultivan con elementos presentes en un hígado dañado, también se convierten en hepatocitos y pueden ser útiles en un futuro para su uso en lesiones hepáticas.
   El Grupo de Medicina Regenerativa del Instituto de Investigación i 12 del Hospital 12 de Octubre de la Comunidad de Madrid ha demostrado en otro estudio, publicado en la revista científica 'Cancer Gene Therapy' e incluido en la sección de artículos destacados de dicha revista, que el uso de células madre mesenquimales de placenta en cáncer de mama ralentiza directamente el crecimiento del tumor y retrasa la aparición de nuevos tumores secundarios.
   Los resultados de la investigación ponen de manifiesto que en ensayos en laboratorio las células madre de placenta migran habitualmente hacia el tejido de mama humano sano, pero que esta migración es aún mayor si el tejido está afectado por cáncer de mama, lo que destaca su capacidad para ser utilizadas como transportadoras de medicamentos anti-cancerígenos.
   Este trabajo de laboratorio también ha sido desarrollado en tejido de tumores mamarios procedente de ratas, muy semejante al de los adenocarcinomas mamarios en seres humanos, con los mismos resultados positivos.
   Los investigadores destacan los beneficios del tejido placentario, ya que tiene disponibilidad ilimitada y no requiere de ninguna técnica quirúrgica invasiva para su obtención, así como que "no plantea riesgos para el donante, ni por supuesto conflictos éticos".

Más del 50% de los pacientes con artrosis padece también inflamación en la membrana sinovial

Entre el 50 y el 90 por ciento de los pacientes con artrosis también padecen sinovitis, una enfermedad que aparece cuando el revestimiento de la articulación se irrita e inflama, que cursa con gran dolor y déficit de movimiento, y que, recientes estudios, muestran como se ha convertido en un marcado del avance de la enfermedad.

   Este descubrimiento es relativamente reciente, según ha explicado el doctor Jordi Monfort, miembro de la unidad de Artrosis del servicio de Reumatología del Hospital del Mar de Barcelona, quien destaca que ha sido en lo últimos cinco años cuando ha visto la importancia que tiene la sinovitis a la hora de valorar el grado de la enfermedad, ya que se asocia con una pérdida de cartílago más avanzada y, en consecuencia, mayores posibilidades de que el proceso finalice en prótesis.
   "Ahora sabemos que las artrosis que tienen una peor inflamación son aquellas que tienen más posibilidades de terminar en prótesis; en consecuencia, es un factor importante porque nos podemos hacer una idea del dolor que tiene el paciente, y podemos relacionarlos con la progresión de la enfermedad", añade.
   La artrosis afecta, además de al cartílago, al resto de estructura articular, lo que incluye la membrana sinovial y el hueso subcondral; este último, destaca Monfort, también se ha convertido en uno de los marcadores más fiables para conocer la progresión de los cambios estructurales de la artrosis.
   Todos los pacientes padecen en mayor o menor medida inflamación, sin embargo ha sido gracias al avance en el desarrollo de diferentes técnicas de imagen que ahora se sabe que gran parte de esta población padece inflamación la membrana sinovial, desde el 50 por ciento de los pacientes hasta el 90 por ciento, dependiendo de si la prueba es a través de una ecografía o de una resonancia magnética, respectivamente.
   "Detectar más pacientes es un problema de técnica", afirma Monfort, quien comenta que estos datos dados a conocer en pacientes con artrosis son extrapolables a otras articulaciones, especialmente periféricas (cadera, rodillas o manos).
   La inflamación permite un mejor conocimiento del proceso de la enfermedad, los factores moduladores, así como sus principales reguladores, y, por lo tanto, tiene mucho valor a la hora de trabajar con nuevas formulaciones terapéuticas para retardar el avance de la patología.
   De alguna forma se ha convertido en un marcador, y los esfuerzos médicos van encaminados a su relación con el progreso de la enfermedad. "Conocer esto significa que se puede empezar a conocer dónde se debe trabajar para controlar la enfermedad "una vez establecida", y teniendo muy en cuenta el desarrollo de nuevos fármacos.
   "Además de nuevas moléculas, nos lleva a revaluar los fármacos ya existentes teniendo presente ésta nueva visión", de este modo de podrá dar un mayor control a esta "enfermedad multifactorial" y, como explica el doctor Monfort, "compleja".
  "No es una enfermedad asilada, se ve afectada por lo que tiene a su alrededor que, a su vez, tiene repercusiones sobre la artrosis; si bien no afecta a la expectativa de vida, sí afecta a la calidad de vida", añade.
   Respecto a qué se puede hacer para que esta inflamación no se produzca, el doctor aclara que "se puede controlar reduciendo los factores de riesgo, pero no prevenir", y, por tanto, se deben reducir aquellas actividades que sobrecargan la articulación, y, sobre todo, evitar la obesidad.
   Los dos tratamientos más usados son los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) y los Sysadoa, donde se encuentran el condroitín sulfato y el sulfato de glucosamina. Los primeros son uno de los tratamientos más utilizados en artrosis, particularmente en los estadios iniciales de la enfermedad, sin embargo "no están exentos de efectos secundarios importantes", y, por eso, "es recomendable el mínimo tiempo a la mínima dosis necesaria".
   Por eso, su recomendación es el uso de los Sysadoa, fármacos de acción lenta para el tratamiento sintomático de la artrosis, que "al tratarse de productos de origen animal están más cercanos a las necesidades de la articulación", y, en consecuencia, "hace que tenga mucho menos efectos secundarios".
   Además, "estos fármacos tienen una acción nada despreciable sobre la inflamación sinovial, también sobre la progresión, ya que se les atribuye la cualidad de retardar la progresión articular y, en parte, eso viene del efecto que tienen sobre la inflación sinovial".
    Diversos estudios llevan a pensar que una detección temprana de la inflamación podría reducir su desarrollo gracias al uso de fármacos especialmente destinados a reducir el dolor. De hecho, algunas investigaciones ya han demostrado que fármacos como el condroitín sulfato protege la pérdida del volumen de cartílago y revierte en la menor necesidad de implementar prótesis en pacientes con artrosis de rodilla y sinovitis.

Realizan un trasplante de células de cordón umbilical entre hermanos para tratar una anemia congénita

El Hospital Niño Jesús de Madrid realizó este jueves con éxito un trasplante de células madre de sangre de cordón umbilical para poder tratar a un niño de 4 años que padece anemia de Blackfan-Diamond (ABD). Las células de cordón procedían de su hermana y, tras la intervención, se espera que el menor se recupere con normalidad.

   Según ha informado el banco de conservación de las muestras, Crio-Cord, se trata del primer trasplante realizado en España para tratar esta enfermedad congénita, que impide que la médula ósea genere glóbulos rojos (necesarios para transportar el oxígeno a todo el cuerpo), con una muestra conservada en un banco familiar.
   "No podemos estar más felices, porque ahora nuestro hijo va a poder llevar a cabo una vida completamente normal", ha asegurado la madre del menor, Elena, que explica que hasta el trasplante la vida de su hijo estaba sometida "necesariamente" a transfusiones periódicas de concentrados de hematíes.
   El problema de este tratamiento es que altera claramente la calidad de vida de los pacientes. Además, la terapia con corticosteroides a largo plazo que también requeriría no es tolerada en todos los casos.
   Por ello, ha explicado el jefe del Servicio de Oncohematología del Hospital Niño Jesús de Madrid, Luis Madero, "el trasplante de células madre de la sangre del cordón umbilical, especialmente entre hermanos, es hoy en día una opción terapéutica recomendable para cierto tipo de enfermedades hematológicas, como esta anemia".
   En cuanto se les informó desde el banco privado de que existía esta posibilidad de tratamiento, la familia de este niño se acogió al Programa Donación Familiar Gratuita de Crio-Cord, que contempla la conservación gratuita de las células madre de la sangre y el tejido del cordón umbilical del bebé para aquellas familias que tengan un familiar diagnosticado con una enfermedad tratable con células madre.
   Al cumplir los requisitos, empezaron los distintos trámites y, una vez aceptados en el Programa, recibieron "la buenísima noticia" de que sus hijos eran compatibles, ha explicado Elena.
   El programa también cubre todo el proceso necesario para que pueda generarse el trasplante: los análisis que necesita la muestra para confirmar su compatibilidad con el paciente a tratar, así como la coordinación del tratamiento y el envío de la muestra, desde el banco de conservación del Grupo Cryo-Save, con sede en Bélgica, al hospital donde se llevará a cabo el tratamiento, todo de forma gratuita dentro de la Unión Europea.
   La directora general de Crio-Cord, Susana Esteban, se ha mostrado "muy satisfecha" de "haber contribuido a aliviar el sufrimiento de esta familia".
   "Queremos seguir mostrando nuestro compromiso con el desarrollo y el bienestar de la sociedad, no sólo a través de programas de colaboración con investigadores y universidades, sino también apoyando directamente a familias que lo necesiten, como con este programa", ha añadido.

Los avances en dermatología se ubican en la terapia de anticuerpo monoclonal en psoriasis

Los avances en dermatología se fundamentan en las terapias de anticuerpos monoclonales en psoriasis y en el tratamiento de tumores, según ha asegurado el presidente de la Asociación Española de Dermatología y Venereología (AEDV), el doctor José Carlos Moreno.

   Así lo ha señalado el dermatólogo con motivo de la presentación, en colaboración con AbbVie, de las últimas novedades científicas abordadas en este campo durante el congreso anual de la Academia Americana de Dermatología (AAD), que tuvo lugar el pasado mes de marzo en Miami (Estados Unidos).
   En él participó Moreno, que destaca que se ha producido un avance en psoriasis gracias al desarrollo de las terapias con anticuerpos monoclonales, las cuales se han denominado "terapias biológicas". Éstas han alcanzando unos niveles "realmente altos".
   El especialista, que destaca que el único inconveniente grave de las mismas es que son "extremadamente caras", señala que donde se han establecido otras novedades importantes en los últimos tiempos ha sido "en el tratamiento de tumores sin necesidad de recurrir a la cirugía". Así, explica que en ello han tenido que ver también "las terapias de anticuerpos monoclonales".
   "En los tumores que se escapan de las manos quirúrgicas, porque se han extendido mucho o porque son difíciles de limitar, hay nuevas moléculas que actúan sobre su expresión genética", continúa el experto. Tras ello, el tumor se elimina "o disminuye haciéndolo asequible a la cirugía", manifiesta.
   De esta forma, expone que un lunar tiene distintos tipos de moléculas para las que hay anticuerpos específicamente dirigidas a ellas, por lo que "hoy en día, a la hora de hablar de melanoma, hay que afinar más y saber que expresión tiene antes de hacer un tratamiento complementario".
   No obstante, y a pesar de estos avances, Moreno sostiene que la prevención en dermatología se hace "fundamentalmente manteniendo una piel sana". Por ello, y debido a que los enfermos acuden al dermatólogo cuando ya tienen un problema y no consultan para saber que tienen que hacer para tener una piel sana, considera que existe "un problema educacional".
   Así, con la intención de ser divulgativo, el máximo representante de la AEDV subraya que la fotoprotección con moléculas de consumo oral "no es sustitutiva de la tópica". No obstante, y aunque insiste en que las cremas solares y las protecciones físicas son necesarias para exponerse al sol, sí asegura que "son un paso más y ayudan".
   Por otra parte, Moreno explica en relación a la seguridad de las nuevas terapias, que los altos índices de infecciones en tratamientos contra enfermedades como la psoriasis se han reducido gracias "a la elección de los enfermos adecuados". Además, sostiene que se les hace un seguimiento cercano con controles clínicos y analíticos que permiten "evitar los efectos secundarios".
   No obstante, lamenta que los avances no hayan sido "tan espectaculares" en otras patologías, como es el caso de la dermatitis atópica propia de los niños. Ésta, que aparece en la etapa comprendida entre el nacimiento y la pubertad, provoca un trastorno no sólo al niño, sino también "al ámbito familiar", afirma.
   Su principal síntoma es el picor, que es algo "verdaderamente desastroso", ya que es "bastante mas difícil de soportar que el propio dolor", indica. Los menores que la padecen aún no tienen "terapias tan efectivas como en otros campos", apunta.
   De cualquier forma, Moreno confirma que en España se está investigando en función "a las posibilidades" existentes. Así, se está trabajando en los hospitales universitarios, además de que la AEDV dispone de una unidad de investigación que pretende "ayudar a los dermatólogos que desean investigar".
   En este sentido, sostiene que en el centro al que el pertenece, el Reina Sofía de Córdoba, hay una línea de trabajo sobre genética y alteraciones metabólicas en pacientes con psoriasis. "Parece que las autoridades sanitarias se están dando cuenta de que la investigación es importante", concluye.

Un 15% de los que trabajan sentados, en riesgo de sufrir trastornos músculo-esqueléticos

Casi un 15% de los trabajadores que desempeñan su labor sentados ante una mesa está en riesgo de sufrir trastornos músculo-esqueléticos por posturas forzadas, según han señalado los expertos de la Sociedad de Prevención de Fremap con motivo de la celebración este domingo, 28 de abril, del Día Mundial de la Salud en el Trabajo.

   De esta forma, y según los datos que arrojan las 700.000 evaluaciones realizadas cada año por esta sociedad a trabajadores en los programas de vigilancia de la salud, estos problemas físicos "son unos de los más frecuentes en el entorno laboral".
   De estos exámenes médicos, también se confirma que "a un 3,8 por ciento de los trabajadores examinados se les ha apreciado una lesión osteomuscular", la cual ha obligado a comunicarle a su empresa "una limitación en su puesto para evitar esta dolencia", sostienen.
   Además, la 'Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo' realizada por el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT) en 2011 expone que "un 77 por ciento de los trabajadores que realizan trabajos administrativos tiene trastornos musculoesqueléticos".
   Por todo ello, y con el fin de detectar qué tipo de posturas o movimientos pueden ser perjudiciales, la Sociedad de Prevención de Fremap utiliza el sistema de 'Herramienta de Análisis por Diseño Asistido' (HADA). Éste, que funciona mediante sensores, permite la captura del movimiento que hace el trabajador en su puesto laboral "y confecciona un estudio tridimensional del mismo en cualquier situación de su actividad", indican.
   De esta forma, se aumenta "la precisión y alcance de los métodos tradicionales de evaluación ergonómica de puestos de trabajo", explican los expertos. Así lo comparte el especialista en Medicina del Trabajo de la sociedad, el doctor José Antonio Díaz, que señala que este tipo de lesiones "se pueden evitar con acciones preventivas".
   En este sentido, expone que la institución a la que pertenece dispone de un programa de escuela de espalda "para evitar lesiones osteomusculares generadas por el sobreesfuerzo". Éste "identifica los riesgos ergonómicos a los que se ven expuestos los trabajadores en su entorno cotidiano y laboral", manifiesta al tiempo que declara que existen ejercicios de estiramientos y fortalecimiento muscular que son "muy recomendables" para personas que tengan una actividad laboral sedentaria.
   Entre las lesiones más frecuentes de los trabajadores destaca la fatiga física muscular, "que suele manifestarse en la columna vertebral". Además, son comunes "los dolores en la nuca y cuello, y los propios de la espalda y lumbares".
   Los síntomas de los mismos "suelen manifestarse al finalizar la jornada laboral debido a que la contracción muscular disminuye la sangre que llega a los músculos", continúa Díaz, que identifica otros trastornos, como "las contracturas musculares, los hormigueos, el cansancio o astenia, la epicondilitis, el síndrome del túnel carpiano o la tendinitis del dedo pulgar".
   Para él, éstos pueden ser consecuencia de, entre otros factores, "posturas incorrectas ante el ordenador, una mala organización del trabajo, del mobiliario o de la iluminación". No obstante, concluye afirmando que existen otras intrínsecas al propio individuo, como "los defectos visuales o las lesiones preexistentes".