MADRID.- Durante nuestra vida llegamos a experimentar episodios de dolor debido a diferentes afecciones. Generalmente suele haber quorum a la hora de determinar cuál o cuáles son los más intensos que solemos sufrir. Cólicos, partos, dolor de muelas, etc, suelen copar los primeros puestos, ¿pero son los hay peores?
Desde Gizmodo han consultado a expertos internacionales en dolor y han consultado investigación sobre el tema, llegando a interesantes respuestas.
David
C. Yeomans, especialista en Anestesiología, Perioperatorio y Medicina
del Dolor de la Universidad de Stanford, considera que el peor dolor que
puede sufrir un ser humano es el provocado por lo que se denomina neuralgia del trigémino.
Se produce cuando un vaso sanguíneo se dilata y acaba empujando el
nervio trigémino, que es el encargado de transmitir toda la información
de los diferentes dolores que se producen en la cara, algunos muy
intensos como el de muelas o el de cabeza.
El dolor por neuralgia del
trigémino suele manifestarse en un lado de la cara y apenas dura un par
de minutos. Su tratamiento puede hacerse mediante cirugía o con
medicamentos como el tegratol, aunque en este caso cabe recordar que se
trata de un fármaco con efectos secundarios relevantes.
Theodore
Price, investigador principal del Grupo de Investigación de
Neurobiología PAIN y Profesor de Ciencias del Cerebro y del
Comportamiento en la Universidad de Texas, asegura que el peor dolor
suele ser el que se da tras lesiones traumáticas, como un
accidente o la rotura de una extremidad, y que se alarga en el tiempo
aunque la lesión se haya curado. Especialmente dolorosa es la lesión
que, pese a curarse, provoca el aplastamiento de un nervio y esto causa
dolor neuropático. También destaca entre los dolores más intensos y
molestos el que se produce durante años en pacientes con cáncer que ha
recibido quimioterapia, generalmente en extremidades.
Mohab Ibrahim, profesor Asociado de Anestesiología y
Farmacología y director de la Clínica del Dolor Crónico de la
Universidad de Arizona, establece en este grupo todos aquellos dolores
que cumplen ciertos criterios y no se pueden controlar. Especialmente
dolorosos son los que entran en la categoría de la fibromialgia.
También asegura que el peor dolor siempre será aquel que no tenga un diagnóstico conocido tras realizarse todo tipo de pruebas y salir negativas ya que la psicología juega un papel fundamental en el dolor.
James
McAuley, científico investigador sénior y líder de grupo en
Neuroscience Research Australia y actual presidente del grupo del dolor
de espalda de STREAM Health, asegura que depende de la persona y de cómo es interpretado por el cerebro
y pone como ejemplo el caso de un un buzo de la Marina de Australia que
estaba siendo mordido por un tiburón y no empezó a sentir dolor hasta
que se dio cuenta de que era mordido por el animal, algo que no había
visto en un primer momento.
Erin Young,
profesor asistente y director asistente del Centro para el Avance en el
Manejo del Dolor de la Escuela de Enfermería de la Universidad de
Connecticut, está convencido de que el peor de todos es el dolor crónico, pero también dolores agudos como el de un hueso roto, un parto o un postoperatorio especialmente molesto.
Steven
Harte, director de Ciencia Sensorial en el Centro de Investigación del
Dolor Crónico y la Fatiga de la Universidad de Michigan en Ann Arbor,
también recuerda que el dolor es subjetivo y que suele depender de variables
tan dispares como la genética, el funcionamiento del sistema nervioso,
el historial de consumo de drogas y las experiencias dolorosas previas,
así como las expectativas sociales y culturales.
Sí que establece un
listado con algunos de los que considera como más intensos: parto,
accidente traumático, dolor crónico durante años, artritis o el daño
nervioso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario