NUEVA YORK.- Una nueva investigación sobre el ayuno periódico, presentada en la reunión anual de la Asociación Americana de la Diabetes, ha identificado un proceso biológico en el cuerpo que convierte el colesterol malo en las células de grasa en energía, de modo que combate los factores de riesgo para la diabetes.
Investigadores
del Instituto del Corazón del Centro Médico Intermountain en Murray,
Utah, Estados Unidos, han descubierto que tras entre 10 y 12 horas de ayuno,
el cuerpo comienza a rebuscar para encontrar otras fuentes de energía
para mantenerse a sí mismo, de forma que termina extrayendo el
colesterol LDL (colesterol malo) de las células de grasa y lo utiliza
como energía.
"El ayuno tiene el potencial de convertirse en una importante intervención para la diabetes", dice Benjamin Horne,
director de Epidemiología Cardiovascular y Genética del Instituto del
Corazón de Intermountain y principal investigador del estudio. "Aunque
hemos estudiado el ayuno y sus beneficios para la salud durante años, no
sabíamos por qué el ayuno podría proporcionar los beneficios para la
salud relacionados con el riesgo que observamos de la diabetes", añade.
Prediabetes
significa que la cantidad de glucosa, también llamado azúcar en la
sangre, es más alta de lo normal pero no lo suficientemente elevada para
llamarse diabetes. Antes de la investigación realizada por el doctor
Horne y su equipo en 2011 centrada en las personas sanas durante un día
de ayuno, sólo el agua en ayunas se había asociado con niveles más bajos de glucosa y pérdida de peso.
"Cuando
estudiamos los efectos del ayuno en personas aparentemente sanas, los
niveles de colesterol aumentaron durante un tiempo de 24 horas de ayuno",
subraya Horne. "Los cambios que fueron más interesantes o inesperados
estaban relacionados con riesgos para la salud y la diabetes metabólica.
Nuestros
estudios anteriores en los que mostramos que décadas de ayuno de forma
rutinaria se relacionaron con un menor riesgo de diabetes y enfermedad
de las arterias coronarias nos llevaron a pensar que el ayuno es más
impactante en la disminución del riesgo de diabetes y los problemas
metabólicos relacionados", agrega.
Debido a los hallazgos en 2011, Horne se involucró en este nuevo estudio para analizar los efectos del ayuno en los prediabéticos durante un mayor periodo de tiempo. Los participantes de este trabajo eran prediabéticos, hombres y mujeres de 30 a 69 años, con por lo menos tres factores de riesgo metabólicos.
Debido a los hallazgos en 2011, Horne se involucró en este nuevo estudio para analizar los efectos del ayuno en los prediabéticos durante un mayor periodo de tiempo. Los participantes de este trabajo eran prediabéticos, hombres y mujeres de 30 a 69 años, con por lo menos tres factores de riesgo metabólicos.
Los factores de riesgo
podían ser una gran cintura, también conocida como obesidad abdominal o
"tener forma de manzana"; un nivel alto de triglicéridos, un tipo de
grasa que se encuentra en la sangre, y un bajo nivel de colesterol HDL,
el colesterol "bueno", que eleva el riesgo de enfermedades del corazón.
Otros
factores de riesgo eran la presión arterial alta, la fuerza de la
sangre contra las paredes de las arterias cuando el corazón bombea
sangre, y un nivel alto de azúcar en sangre en ayunas, que puede ser un
signo temprano de diabetes.
En el grupo de participantes del estudio había personas con diferentes pesos, algunos obesos y otros no.
En otros análisis previos sobre el ayuno realizados por algunas otras
instituciones, sólo se examinó a participantes obesos y se centraron en
la pérdida de peso debido al ayuno.
En el estudio de
Intermountain, aunque los participantes perdieron unos 1,36 kilogramos
en seis semanas, el foco principal del estudio fue la interención en la
diabetes."Durante los días reales de ayuno, el colesterol subió
ligeramente en este estudio, al igual que en nuestro análisis previo de
las personas sanas, pero vimos que en el periodo de seis semanas los
niveles de colesterol disminueron un 12 por ciento además de perder
peso", destaca Horne.
"Como esperamos que el colesterol
se usara para la energía durante los episodios de ayuno y probablemente
proviniera de las células grasas, esto nos lleva a creer que el ayuno
puede ser una intervención eficaz para la diabetes", valora.
El proceso de extracción de colesterol LDL
de las células de grasa para la energía debería ayudar a evitar la
resistencia a la insulina. En la resistencia a la insulina, el páncreas
produce más insulina, hasta que no se puede seguir produciendo insulina
suficiente para las demandas del cuerpo, por lo que se eleva el azúcar
en la sangre.
"Las propias células de grasa son un contribuyente
importante a la resistencia a la insulina, lo cual puede llevar a la
diabetes. Debido a que el ayuno puede eliminar y ayudar a romper las
células de grasa, la resistencia a la insulina puede verse frustrada por
el ayuno", explica Horne, quien señala también la necesidad de realizar
más estudios en este sentido.
"Aunque el ayuno puede proteger contra la diabetes
--advierte Horne--, es importante tener en cuenta que estos resultados
no eran instantáneos en los estudios realizados que realizamos. Lleva su tiempo".
No hay comentarios:
Publicar un comentario