Investigadores del Brigham and Women's
Hospital (BWH), en EE.UU., hallan un mecanismo natural que puede
resolver el dilema de las bacterias resistentes a los antibióticos. El
doctor Charles Serhan, del BWH, ha identificado las vías moleculares -de
origen natural- en el organismo humano, que pueden mejorar el
rendimiento de los antibióticos.
Para el estudio, publicado en 'Nature', ratones infectados con
'Escherichia coli' (E. coli) o 'Staphylococcus aureus' (S. aureus),
recibieron moléculas, llamadas mediadoras pro-resolución, junto con
antibióticos. Las moléculas mediadoras pro-resolución se encuentran
naturalmente en nuestro cuerpo, y son responsables de la mediación de la
respuesta anti-inflamatoria, y la resolución de la inflamación (una
respuesta anti-inflamatoria es la manera del cuerpo de protegerse de los
agentes infecciosos, e iniciar el proceso de curación).
Los investigadores observaron que dos tipos específicos de
mediadoras pro-resolución, llamadas resolvinas y protectinas, fueron
clave en la respuesta anti-inflamatoria, a la hora de limitar el daño a
los tejidos -mediante la estimulación de las células blancas de la
sangre, con el fin de contener, matar y eliminar la bacteria.
Administradas con antibióticos, las resolvinas y protectinas aumentaron
la respuesta inmune de los glóbulos blancos, que atacaron y devoraron a
las bacterias, resultando en una rápida reducción de la cantidad de
bacterias en la sangre y los tejidos.
En particular, RvD5 -un tipo de resolvina- también fue útil en la
regulación de la fiebre causada por E. coli, así como en la
contra-regulación de los genes responsables del exceso de inflamación
asociada con las infecciones, limitando, por lo tanto, los daños
colaterales en el cuerpo, mientras luchaba contra la infección.
Serhan y sus colaboradores han sido los primeros en demostrar la
acción de RvD5 contra la invasión bacteriana. Además, el equipo del BWH,
en colaboración con el doctor Fredrik Bäckhed, del Centro Sahlgrenska
de Investigación Cardiovascular y Metabólica, en Suecia, descubrió que
los animales libres de gérmenes producen altos niveles de resolvinas.
Cuando el doctor Nan Chiang, del BWH, y autor principal del
estudio, añadió antibióticos a estos mediadores naturales, los
antibióticos fueron menos necesarios. Esto demostró, por primera vez,
que estimular los programas pro-resolución puede limitar las
consecuencias negativas de una infección.
Según los investigadores, otra de las ventajas de las moléculas
mediadoras pro-resolución es que, a diferencia de los fármacos
anti-inflamatorios (por ejemplo, la aspirina, los esteroides, o el
ibuprofeno), estas moléculas no paralizan la respuesta inmunitaria
normal del cuerpo. "Los agentes anti-inflamatorios son ampliamente
conocidos por ser inmunosupresores", añade Serhan, "ahora sabemos que
tenemos vías moleculares naturales en nuestros cuerpos, que funcionan
como estos agentes, y estimulan la contención de las bacterias y la
resolución de las infecciones, sin el efecto secundario de ser
inmunosupresores".
No hay comentarios:
Publicar un comentario